capítulo 17 - feria

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Es normal que después de semejantes heridas, el hospital fuera un lugar al que debían ir de inmediato. Donde las preguntas eran confusas y todo bastante borroso. En esta ocasión ella no había salido gravemente herida, así que solamente se conformó con ver como por la ventana, Edward era tratado de emergencia y como Madeleine era revisada por los doctores. Ignoro como las manos de la chica estaban ensangrentadas y con grandes vendas en ellas.

Un accidente.

Fue la única explicación que dio, que si bien no pareció convencerlos, fue suficiente para atenderlos.

Ahí estaba ella, al lado del cuerpo de Edward, sosteniendo su única mano restante. Vio de forma preocupada el lugar donde antes estaba su brazo izquierdo, que ahora tenía unas vendas adecuadas. El hombre estaba con morfina y probablemente, estaría en ese lugar un tiempo, para que sus heridas lograran sanar de forma correcta.

Su brazo.

Se había perdido.

Por su culpa.

Edmund entro al lugar, dispuesto a tomar su siguiente turno.

Ella no quería irse, pero debía ir a comer algo. No ganaba nada con otro enfermo en ese lugar, así que comería algo a la fuerza que le sustentara un poco de energía.

Al salir de la habitación se detuvo, viendo como Adrien estaba sentado fuera con mirada perdida, esperándola aparentemente.

Este la vio.

Ella también.

Todo era muy confuso, no sabía que pensar o que decir, solo sabía que a pesar que no estuviera claro en sus pensamientos, no la dejaría sola. Por eso ambos estaban en la azotea del hospital, con un pequeño emparedado y un refresco, que Marinette comía lentamente, con bocados pequeños y sin ninguna prisa en realidad.

Eso le dejaba pensar en la tranquilidad.

Recordando el rostro de Marinette bajo la máscara de Queen Heart.

Las luchas de ambos después de eso.

Descubrir poco a poco la verdad.

Luchar juntos, pero sin perdonarla del todo.

Luego el secuestro de Madeleine y su rescate.

Marinette había dado todo para salvar a Paris, incluso llegar a meterse en la oscuridad para poder darle una oportunidad. Algo que no aceptaba del todo, si uno desea proteger algo, no es motivo para hacer sufrir a otros. Pero no podía juzgarla, esa fue la solución que ella encontró, tal vez no la correcta, pero estaba seguro que solo intento ayudar en todo lo posible.

Aunque fuera el método incorrecto.

Lo peor de todo, es que sus sentimientos por ella, parecían no haber cambiado en ningún momento. Si se sintió traicionado, pero aun la quería.

¿Qué hacer?

Todo era bastante confuso.

—Edward fue quien estuvo cuando mis padres murieron...fue mi único sustento...yo lo lleve a todo esto—hablo Marinette apretando con fuerza el emparedado.

La vio intensamente.

Notando la mirada de soledad y dolor en sus ojos, que le produjo un dolor a él mismo.

—Estoy seguro que Edward decidió su camino, no parecía arrepentirse de sus decisiones—hablo él tomando su lata de refresco y sorbiendo un poco.

—Somos villanos Adrien, no intentes ver luz donde solo hay oscuridad—

—Tú solo quisiste ayudar a tu manera, no creo que sea la correcta, pero al menos tus intensiones fueron buenas—

luz y oscuridad (MLB)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora