Fangs & Claws ♡ °[𝑃𝐽𝑀]°

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Con un potente golpe en la mesa, hizo saltar del susto a todos los presentes, su mirada ahora dorada como el oro y brillante como el sol, anunciaba que su bestia estaba más que hirviendo en rabia. Era irónico que a pesar de su pequeño tamaño, la chica que ahora era la Alfa de la manada más fuerte y pronto sería la Protectora de ésta, emanara tanto poder y difundiera tanto miedo a los presentes.

—¿Me estás diciendo que solamente aparecieron y no hiciste nada al respecto? —Habló con la mandíbula apretada contenido las ganas que tenía de arrancarle la cabeza a la Omega frente suyo.

—Alfa por favor... No tengo entrenamiento y no sé como pelear, mi bestia se congeló y no pude hacer nada, yo... —Otro golpe en la mesa volvió a sonar haciendo que todas los lobos de los guardias presentes se hicieran pequeños con tanta furia creciente en la Alfa.

—Guarda silencio... Si no quieres que mi bestia te arranque la lengua... —Advierte. —No puedo creer que mi hermano haya aceptado a una Omega proveniente de otra manada que ni si quiera se dio el tiempo de investigar. —Habló refiriéndose a lo que había descubierto gracias a las hojas de informe sobre la chica llamada IU.

No podía controlar la rabia que sentía al saber lo tonto que había sido su hermano mayor al aceptar ha una desterrada que ni si quiera conocían bien, podría ser una espía, una traidora contra su raza, no lo sabían, y aún así la aceptó, ella seguramente tenía mucho que ver con la muerte de Hoseok y posiblemente la de su hermano.

—Alfa, le aseguro que yo no soy capaz de traicionar a mi raza, soy fiel y le juro que me encargaré de entrenar a mi bestia pero por favor no me destierre de aquí, son la única manada que me ha recibido. —Suplica IU en lágrimas haciendo que algunos guardias presentes sintieran pena por ella, inclusive el hermano menor de la Alfa.

La Alfa, Akali, y su loba, debatieron sobre el problema unos segundos hasta llegar a una conclusión, no podían dejarla libre por ahí, tampoco podrían dejarla en este estado, así que lo más lógico y menos peligroso para la manada era el encierro en las celdas de plata dónde se encontraba el viejo abuelo de los Jeon.

—Lleven a esta... Omega, a las celdas de plata, no saldrá de ahí hasta que descubra bien lo que ocurrió. —Ordenó con seriedad y sus ojos dorados dejaron de hacer presencia dando a entender a los presentes que su bestia se había calmado.

Todos los guerreros presentes salieron de la sala de reuniones dejando solamente a la Alfa y su hermano menor, el cuál en cuánto miró a su mayor cansada y lanzarse casi a su silla mullida negra que pertenece a la misma, se acercó con cautela.

—Noona... —La llamó y ella le miró mostrando así su faceta cansada y irritada. —¿Qué haremos con el tema del ataque? Los guerreros estarán esperando fuera para recibir tus ordenes. —Pregunta aún siendo cauteloso y hablando tranquilo, no quería volver a alterarla.

—Iré a ver a los vampiros en la frontera, debo hablar con el príncipe, si éste desea no ser amistoso, Akiba se encargará de acabarlo de una vez por todas. —Sentenció para colocarse de pie y estirar sus extremidades sintiendo como sus huesos tronaban.

—¿Iremos a ver a los vampiros? ¿A JiMin Hyung? —Pregunta Jungkook sorprendido. Su Alfa le miró mal por el nombramiento de aquella persona y gruñó algo bajo.

—No lo llames así, él no es cercano a ti o algo por el estilo. —Espetó seria. —Y tú no irás, es peligroso que vayas. —Con eso ella dió por terminada la conversación al caminar a la salida, pero no pensaba que su menor iba a insistir tanto, rogando que lo llevase.

—¡POR FAVOR NOONA! —Insiste haciendo su rostro de cachorro estando frente ella. De inmediato giró su vista a otro lado y negó con la cabeza, a pesar de tantos años el mocoso aún tenía aquel poder sobre sus mayores al hacer su rostro de cachorro aplastado.