Irremediablemente Tú y Yo

9. Begin again.

"I watched it begin again"

—Taylor Swift (2021). Red Taylor's Version.

ADRIEN

Maldita sea.

Maldita sea.

Maldita seas Avery Williams.

Mis pisadas resuenan en el pavimento de la acera de mi residencia mientras me dirijo a mi auto.

Lo desbloqueo y me meto en él cerrando con un portazo.

"Se cuidarme sola"

Debería dejar que ella se las arreglara por cuenta propia, pero imaginarla sola a las 2 de la mañana no me hace más que maldecir, porque podré ser un ser despreciable para muchos, pero debería ser un tremendo hijo de puta como para dejar a mi prima sola y expuesta a tantos peligros.

Recuesto mi frente sobre el volante y tomo un largo suspiro. Avery siempre ha sido del tipo al que le encanta colmarme la paciencia y si tan solo no fuera familiar mío ya la habría mandado a encerrar en un manicomio.

—Lo que me haces hacer, niñata tonta —suspiro y levanto el rostro.

Ruedo los ojos con hastío y no pierdo el tiempo en encender el auto y dirigirme al lugar de la rubia que también es como un grano en el culo.

Apenas abro la puerta del lugar las pocas personas que aún se encuentran de pie se quedan como estatuas mirándome. Ni siquiera me detengo a examinarlas cuando mis ojos se topan directamente con la castaña que me mira con ojos temerosos y suplicantes.

—Adrien —ahoga un jadeo de alivio.

Me sorprendo al encontrarla en perfecto estado, dentro de lo que cabe. No es hasta que se hace a un lado y detrás de ella, sobre la barra, yace una chica que tiene los brazos extendidos sobre la superficie plana.

En otras circunstancias me hubiera puesto a reír, sin embargo, no me hace ni un poco de gracia saber que tendré que arrastrar conmigo a alguien que probablemente haya caído en un coma etílico.

Tomo el puente de mi nariz con los dedos y miro al techo, esperando que todo sea un sueño y despierte sobre la cómoda cama de la que Avery me obligó a salir. Pero no sucede.

—A un lado —quito de mi camino a un idiota que casi tropieza conmigo de lo borracho que va—. ¿Qué demonios hacen aquí? —pregunto una vez llego a ellas.

—Pero que guapo vas —mi prima se recarga a lado de su amiga y se encoje de hombros, ignorando mi pregunta.

—Vete al demonio —la ignoro y me acerco a la otra castaña, tomando su mano derecha y después moviendo mis dedos hasta su cuello.

Al menos sigue viva.

—Ahora entiendo por qué tus padres decidieron mandarte lejos de aquí.

Oigo su exclamación, pero la ignoro, porque sé que si no lo hago comenzaremos una batalla que ninguno estará dispuesto a perder, y estar aquí ya es lo suficientemente malo como para empeorarlo.

—Roberts —muevo su mano, pero no reacciona.

—Está hasta el culo de borracha —Avery confirma lo que está más que claro.

—Créeme que si no me lo dices no me doy cuenta.

—Metete tu sarcasmo por el culo.

—Lo único que vas a meterte por el culo son tus majaderías, si quieres que te ayude con ella.