El hilo que tira de las marionetas

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Tenten quería despertar lo más pronto posible de aquella pesadilla en la que todavía se encontraba atada de manos y pies, segundos después de que fue separada de Sasuke, Tenten vio como al entrar a la enorme mansión a la que llegaron se lo llevaron a rastras aún inconsciente, Tenten gimió y luchó por liberarse e ir hacia esa dirección pero aún con todas sus fuerzas los humanos la retuvieron.

-Sasori-sama bienvenido- una chica de cabellos rubios vestida de mucama se inclinó respetuosamente al hablar- el macho será puesto en las celdas del sótano como ordenó- la chica observó a Tenten por unos segundos y después se inclinó de nuevo al hablar hacía Sasori- perdone mi atrevimiento al preguntar, ¿ella será puesta en una celda también?

Sasori volteó con una mirada inexpresiva hacía Tenten, ésta le gruñó por debajo de su mordaza y forzó de nuevo las cadenas sin éxito.

-Desprende un asqueroso olor a salvaje- Sasori avanzó ignorando a Tenten subiendo por las escaleras principales de la mansión sin terminar de hablar- bañala, prepara una habitación con los ajustes especiales para retenerla y avísame cuando hayas terminado.

-Pero... Sasori-sama ella podría ser agresiva si le quitamos las cadenas con inhibidores de magia- la chica le mencionó preocupa- sería un desastre, podría provocar muertes.

- Ese es tu problema- Sasori volteó de reojo hacía la mucama y ella tembló al ver la expresión irritada de su amo- si logra escapar los ejecutaré a ti y a todo sirviente que se encuentre en esta mansión y que no haya logrado retenerla.

La rubia se inclinó ante la orden del chico quién desapareció subiendo las escaleras ya sin mencionar nada, ella volteó y frunció el ceño hacia Tenten por un momento, después subió la mirada hacia los sirvientes que la retenían.

-Ya escucharon a Sasori-sama, llevemosla al baño de huéspedes del ala sur- la rubia avanzó y los humanos que la retenían jalaron de sus cadenas obligándola a avanzar.

Tenten observó el lugar mientras era llevada a la fuerza, todo era impecable, desde los pisos hasta el techo, no existía una evidencia de polvo a simple vista, todo brillaba en reflejo al voltearlo a ver, la castaña notó que también los humanos que servían al chico pelirrojo vestían perfectamente alineados, sin ninguna imperfección en sus ropas, peinados o rostros.

Eso la atemorizó de inmediato, nada podía o parecer así de perfecto si no se vieran obligados a cada momento por mantenerlo de esa manera.

Llegaron a la habitación y la rubia que los había recibido en un principio se acercó a ella, Tenten no dejó que asi fuera, se retorció y gruñó amenazante, la humana retrocedió suspirando cansada.

-Por favor no lo hagas más difícil- la rubia volvió a acercarse a ella y Tenten hizo la misma amenaza, de inmediato la rubia hizo una señal con su mano hacia los humanos que retenían sus cadenas, la aprisionaron contra el suelo sin permitirse moverse, Tenten observó cómo la humana se acercó ahora con un cuchillo pequeño en la mano y empezó a romper sus ropas, los ojos azules viajaron para encontrarse con los de Tenten llenos de furia- te daré un consejo, tienes que calmarte un poco, no lograrás nada al pelear, al final la voluntad de él sobrepasa todo lo que pienses o decidas hacer, ahora le perteneces como le pertenecemos nosotros también.

Cuando la chica acabo de romper sus ropas de inmediato la metieron en una especie de contenedor de agua reteniendola contra su voluntad varias chicas humanas incluyendo la rubia tallaron su cuerpo suavemente con espumas y trapos, en cierto punto Tenten dejó de luchar, tomó parte del consejo y lo transformó en su pensamiento, debía clamarse para así poder aprovechar la oportunidad para rescatar a Sasuke y escapar.

Cuando llegó la hora de vestirla Tenten entrecerró los ojos retando a la rubia frente a ella que sostenía un vestido color azul pastel.

-Sostenganla bien, primero quitaremos una cadena y después la otra- y así lo hicieron, fue demasiado rápido y Tenten apenas tuvo tiempo pero logró empujar a uno de los humanos haciéndolo retroceder en ese momento la chica rubia sacó de sus faldas una aguja y la apretó en Tenten en el cuello- tenías que hacerlo difícil, ¿verdad?

El Reflejo De Tu AlmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora