18

128 17 0
                                    

***

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

***

— Sabía que vendrías —dijo a penas abrí la puerta de su habitación

— Cállate y tengamos sexo Bieber —dije mientras me quitaba la polera y bajaba mis shorts

El me miró sorprendido, aún sostenía su masculinidad con su mano, se me ocurrió algo. Me acerqué a el y besé sus labios cálidamente, automáticamente sus manos se posaron en mi trasero y las mías fueron a parar a su glande; mordí su labio inferior separándome de el.

— ¿Q-qué haces? —tartamudeó

— Shhh

Bajé lentamente hasta quedarme de rodillas en el piso, mis manos se pasearon por su cadera hasta sus piernas, llegando finalmente a mi objetivo. Lo tenía frente a mis narices, jadeé de excitación y por lo grande que era.

Lo masturbé con mi mano unas cuántas veces ganándome gemidos de su parte. Sí que lo estaba disfrutando.

— Hailey —susurró

Poco a poco fui metiéndolo en mi boca, no sin antes haber lamido su punta. No cabía todo, pero tenía una gran parte dentro de mi cavidad bucal. Mecí mi cabeza de arriba hacía abajo, sentí como su mano se enredaba en mis cabellos y halaba de ellos.

— Oh nena —gimió —Sigue así no pares

Mis pequeñas manos acariciaron sus pesados y duros testículos. Sentí un poco de líquido pre seminal en mi boca pero aún así seguí chupando.

Lo saqué para lamer desde su dura base hasta su brillosa punta. La mordisqueé un poco haciendo que gimiera alto. Al instante sentí una punzada en mi sexo. Volví a introducirlo dentro de mi boca.

— M-me voy a correr

Anunció luego de unos cuántos minutos, corriéndose en mi boca y salpicando unas cuántas gotas sobe mis pechos.

Jaló de mis brazos colocándome de pie para después colgarme de sus caderas. Dio unos cuántos pasos chocando con la cama y me tiró en esta riendo. Se acomodó quedando sobre mi y besó mis labios de manera desesperada.

— No me esperaba tal acción de Hailey Baldwin

— ¿Sorprendido?

Asintió atrapando mi labio inferior con sus dientes.

Su erección comenzó a crecer nuevamente, chocaba con mi parte baja, donde comencé a tener punzadas otra vez.

Me froté contra el lentamente sintiendo placer. Se percató de lo que estaba haciendo y al instante se separó de mi para buscar el preservativo.

— ¿Lista?

Se deslizó dentro de mi y gemí alto arqueando mi espalda. Bajó su cabeza para estar a la altura de mis senos y poder lamerlos.

Entró y salió de mi lenta pero fuertemente, la palabra placer quedaba corta en estos momentos.

— Mmm Justin —ronroneé

— Mira como me tienes Hailey —jadeó — Estás tan apretada

Me encontraba durmiendo al lado de Justin después de aquel acontecimiento caliente. Abrí mis ojos y todo estaba a oscuras. ¿Será que sus padres ya habían llegado?

Temí por eso, es decir, solo miren como estábamos. La habitación definitivamente olía a sexo.

Giré mi cuerpo y observé el rostro de Justin, era tan lindo hasta cuando dormía, parecía un bebé. Con mis dedos acaricié su rostro, pasando desde sus mejillas hasta sus labios; este se removió incómodo.

— ¿Qué me estás haciendo? —susurré

Decidí entrar al baño para alistarme y volver a casa. Me aterraba que los padres de Justin lleguen y me vean saliendo, ya que irían al cuarto de su hijo y lo encontrarían desnudo; y sabrían lo que hemos estado haciendo.

— Te amo

Besé su frente y cerré la puerta de su habitación.

En mi camino escaleras abajo escuché que la puerta principal se abría. Palidecí. Escuché risas y varias voces en conjunto.

Me mantuve en mi lugar estática dudando si volver arriba o hacer como si nada hubiese pasado. La voz de mi madre se hizo presente. Si, esto definitivamente no estaba pasando.

— Hailey dijo que pasaría por aquí

— Tranquila Kennya, ya sabes como es la juventud de ahora —dijo Pattie — Deben estar arriba

Todos rieron pero mi padre se mantuvo serio. Y en ese preciso instante volteó y miró hacia las escaleras, sus facciones cambiaron en un instante, me regaló una sonrisa. Los demás voltearon también e imitaron su acción.

— Hablando de nuestra querida Hails

— Hola... —dije — A todos

Ellos rieron.

Me perdí ¿dije algún chiste? Aún seguía sin entender por qué mis padres estaban aquí.

— Ay es muy adorable —dijo Jeremy — Entonces ¿qué ordenamos para cenar?

Meant to Be [Jailey]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora