Meant to Be [Jailey]

19

***

— Eso no me lo esperaba de ti Hailey Rhode...

Dijo mi amiga dándome una mirada de complicidad.

Nos encontrábamos en mi cuarto escuchando una que otra canción de Ariana Grande a todo volumen. A nuestro al rededor habían bolsas de frituras y golosinas por abrir, eso y en unos minutos pediríamos una pizza grande para las dos.

No había duda que después de esto Kendall me dijera para ir al gimnasio juntas.

— Basta

— ¿Cómo te sentiste?

— ¿En serio estás preguntándome esto?

Podía sentir mis mejillas arder.

— Hails es normal —empezó — Creo que va a darme algo, estás creciendo

La miré con el ceño fruncido.

— ¿De qué hablas?

Tomó mis manos y se paró parándome a mi también. Caminó conmigo hasta el espejo de mi pared y me colocó frente a esta con ella detrás mío.

— Tan solo... —empezó — Tan solo mírate ¿si? —hice caso a su pedido — No eres la Hailey que nunca había dado su primer beso, que nunca había estado en una relación con alguien o que simplemente nunca había pasado por un encuentro tan caliente como el de ayer —dijo acariciando mi cabello y reí — Ya no eres la pequeña Hails, y amo molestarte con estos temas, lo sabes

— Haces que quiera llorar Kendall

— ¡Ya no eres mi amiga virgen!

Volteé rápidamente a taparle la boca. Habían probabilidades de que mis padres no hayan escuchado aquella confesión por parte de mi amiga.

— Lo siento —susurró cuando quité mi mano

— ¿Sabes qué? —la miré — Olvidemos el tema y solo concentrémonos en nosotras dos ¿okay? Aunque tú tienes que contarme algo que está pendiente

Sus mejillas se ruborizaron.

— Opino lo mismo. Dejemos el tema ahí —caminó a subirle el volumen a la música y abrió unos cuántos bocadillos — Mañana será otro día para contarlo

Crucé mis brazos sobre mi pecho mirándola con una ceja alzada.

Eran las 3:15 de la madrugada y en estos momentos estaba odiando a mi vejiga por querer expulsar todo su contenido. Salí del baño y vi Netflix por un rato. Habíamos puesto una película, la cual lo recuerdo, y Kendall se había quedado dormida hace más de 20 minutos.

Cuando me arropé con las cobijas miré a la ventana de Justin. La pequeña lámpara que tenía iluminaba su cuarto. El se encontraba tocando su guitarra y tenía en sus piernas algo parecido a una libreta.

Decidí mandarle un texto.

¿Ya dije que te ves demasiado sexy tocando la guitarra?

El bufó cogiendo su teléfono. Al instante sonrió y miró de frente encontrándose conmigo.

Justin❤️: No, pero gracias
Justin❤️: ¿Ya dije que te ves muy adorable con tantas cobijas?

Sonreí como una boba y le mandé una foto haciendo un puchero.

Justin❤️: Sip, adorable

Bobo...

Frunció el ceño divertido. No bastaron ni 2 segundos y ya me estaba llamando por teléfono.

— Hey —dijo con voz ronca

— Hey

Ambos nos mirábamos fijamente a través de nuestras ventanas.

— ¿Qué haces despierta?

— Pijamada con Kendall —señalé — Pero ya se quedó dormida así que creo que gané

Rió tras la línea.

— ¿Qué componías?

— Eh... una canción tontita

— Eso lo sé bobo —reí — Me refiero a si es una canción de amor o algo personal...

— Algún día lo sabrás

— ¿Qué ocultas Bieber?

— Hmmm

Se hizo el pensativo y no pude evitar reír, el también hizo lo mismo.

— ¿Salimos mañana? —preguntó — Bueno hoy

Hice una mueca

— Eso quisiera —suspiré — Cierto personaje quiere levantarse temprano para hacer ejercicio y luego no sé que haremos

Hizo un puchero que me causó ternura

— ¿Vienes a mi casa en la noche?

Pregunté haciendo un plan en mi cabeza, y no, no ese tipo de plan. Mis padres estarían así que sería algo tranquilo.

— Acepto —sonrió — ¿A las 7?

— Yup