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Tenía que calmarme, sí, definitivamente tenía que calmarme.

Me desconocía a mí misma en estos momentos, estaba más que furiosa, solo quería romper todo lo que se me cruzaba en frente. Digamos que el calor del ambiente tampoco ayudaba.

Ya había caminado dos cuadras y media, aún tenía esa sensación amarga en el pecho.

A lo lejos vi un Starbucks abierto, lo cual me pareció un poco raro porque ya era más de media noche, igual decidí ir allá ya que parecía que en cualquier momento se desataría una llovizna veraniega.

En realidad no me apetecía nadie así que le pedí a aquella barista que me dejara tomar asiento en una mesa alejada a lo cual accedió.

¿Alo? —contesté mi celular al primer timbre

¿A dónde fuiste? —me reprochó mi amiga — Si no fuera por Fredo ya le habría puesto pausa a la fiesta para buscarte

A casa

¿Por qué? Dime que no es por Justin

Me mantuve en silencio porque...en parte si era por el.

¿Te dijo algo?

Una lágrima se resbaló por mi mejilla y yo simplemente la limpié con el dorso de mi mano libre, a la vez me apoyé en ella.

¡Hailey!

Sollocé y miles de lágrimas seguían cayendo sin parar. Suspiré.

Estaba buscándote en la planta de arriba —comencé — Pero creí que estabas en el cuarto de tus padres guardando aquella vajilla, entonces entré sin tocar —exhalé fuertemente — Justin estaba follándose a alguien más

Mierda... yo sí que lo mato

Kendall no

Ella no me contestó y colgó el teléfono.

Me levanté y salí del establecimiento, las gotas de lluvia apenas caían. Crucé la gran calle mirando a ambos lados y seguí el camino a casa.

Tenía esa sensación que alguien estaba siguiéndome y creo que volteé mi cabeza como cinco veces en todo el camino, pero no había nadie detrás. Gracias a Dios que llegué a casa.

Ya en el porche, justo antes de girar la perilla para entrar, por el rabillo del ojo vi que Justin también estaba llegando a la suya. ¿Y si el estaba siguiéndome? No, tal vez era coincidencia o algo por el estilo.

Ninguno de los dos se movía, hasta que di el primer paso. Giré la perilla y entré a mi casa sin decir palabra alguna.

Dos semanas después...

Bien, era oficial. Justin y yo habíamos roto.

Estaba más que segura que todos ya lo especulaban desde la fiesta que dio Kendall, o tal vez pensaron que me había montado los cuernos en ese momento. Cómo sea...

No sabía nada de el, absolutamente nada. Bloqueé su número, dejé de seguirlo en Instagram, ya no nos veíamos en el campus y hasta dejamos de coincidir en los eventos sociales. No obstante, nuestros padres quiénes se enteraron del asunto al instante, no dejaron de lado la amistad de años que tenían y eso estaba bien.

Me encontraba saliendo del campus para dirigirme a mi casa pero alguien gritó mi nombre a lo lejos.

— ¡Hailey Baldwin!

Volteé encontrándome con Cameron, alguien que no veía desde hace mucho. Corrió hasta quedar en frente mío.

— ¿Qué hay Cameron Martin?

— Me enteré de lo sucedido —dijo con pena — Espero no te moleste que lo mencione en estos momentos

Me encogí de hombros restándole importancia.

— ¿Cómo te encuentras?

— Pues... a decir verdad mucho mejor que antes

— ¿Ah si? —encarnó una ceja divertido

— Yup

— ¿Tal vez estuviste viendo a alguien nuevo...?

— ¡Ja! Para nada

Estuvimos hablando un buen rato en el aparcamiento del campus y entre broma y broma, Cameron literalmente me hacía llorar de la risa. Tal vez había olvidado lo bueno que era hablar con el y me sentía hasta mal por haberlo ignorado cuando comenzó todo con Justin.

— ¡... hablo en serio Hailey, tienes que verla!

— Lo haré, lo prom-

Fui interrumpida cuando vi que Cameron miraba a un punto fijo detrás mío. Justin estaba mirándonos fijamente desde su auto que hasta daba miedo.

— T-tengo que irme —dijo Cameron

— Espera ¿a dónde?

Fruncí el ceño totalmente confundida.

— Recordé que tengo que recoger a Sofia de pilates

Se acercó a darme un beso en la mejilla y se fue sin más. Eso fue extraño.

Entré a mi auto, cerré y bloqueé la puerta para luego poner All The Stars de SZA a todo volumen sin molestias. Por el retrovisor me di cuenta que el auto de Justin ya no se encontraba en la misma área, probablemente se dio cuenta que estaba perdiendo su tiempo. Bueno, siempre lo hace.

Meant to Be [Jailey]Where stories live. Discover now