•OMNIA• Steve Rogers [CANCELADA]

•48•

Natasha y Nai llegaron al centro comercial, "necesitaban" ropa para la fiesta que Tony estaba organizándole a la chica de cabello azul.

—¡Estoy emocionada!— Grito Nai y las personas se le quedaron viendo raro.

—Yo igual, siento que mañana ocurrirán muchas cosas interesantes — Dijo Nat recordando su conversación con Steve.

Entraron a una boutique, y comenzaron a ver los vestidos que había.

Nai comenzó a tomar varios vestidos, la mayoría negros.

—¿Te vas a medir todos esos?— Pregunto la pelirroja sorprendida por la cantidad de vestidos que traía.

—Yo no, tu si— Nai le entrego los vestidos a Nat y la tomo del brazo llevándola a un probador.

—No me voy a medir todos— Aclaro Romanoff, en eso llego una mujer rubia que trabaja ahí.

—Mmm, ¿Necesitan ayuda?— Pregunto la mujer mirándolas con superioridad.

—No, estamos bien— Dijo Nai tomando los vestidos que Nat le iba devolviendo.

—¿Quieren que les muestre vestidos que se ajusten a su presupuesto?— Nat alzo una ceja y miro a la rubia.

—No gracias— Contestó la pelirroja ayudándole a Nai a acomodar los vestidos.

—Si bueno, no creo que puedan comprar algo de esta tienda— Dijo la mujer con una sonrisa burlona.

Nat y Nai se miraron entre si, sonrieron y terminaron de acomodar todos los vestidos.

—Tienes razón, no creo que podamos comprar vestidos con este precio— Dijo Nat mientras salían de la boutique, en eso otra mujer se les acerco.

—¡Oh Dios Mio!, ¿me puedo tomar una foto con ustedes?— La mujer rubia miro confundida la escena.

—¡Claro!— Contestó Nai.

Se tomaron la foto con la mujer y después se fueron de ahí, entraron a una boutique mucho mas cara.

Se midieron varios vestidos hasta que al final Nai se quedo con uno negro corto y Natasha uno rojo semi largo.

Salieron del lugar y pasaron junto a la primera boutique a la que habían entrado, la mujer estaba en la entrada acomodando algunos accesorios.

Nat se acercó al vidrio y dio tres golpecitos, la mujer les presto atención.

—¡No sabes cuanta razón tenias!, jamas podríamos haber comprado vestidos tan baratos— Nat pego las bolsas contra el vidrio y la mujer se quedo con la boca abierta. — Adiós cariño — Nat le mando un beso y se fueron de ahí, la mujer solo se puso roja de enojo.

Iban en el auto y Nai solo tenía dos cosas en la cabeza, que estaría haciendo Rogers en esos momentos y que tenia hambre.

—Sabes te luciste— Dijo Nai pasándose de atrás al asiento del copiloto.

—Se lo merecía— Nat miro la hora, ya eran las seis. —Oh mierda, Enid va a matarme—

—¿Por que?—

—Tenia que enviarle unos archivos, me dijo que no lo olvidara— Nat acelero.

—Y lo olvidaste— Dijo lo obvio Nai.

Llegaron a la torre y Nat se fue deprisa a su habitación para enviarle los archivos a Enid, Nai bajo las bolsas con todo lo que habían comprado.

Como no podía cargar todo uso sus poderes para hacer levitar las bolsas, entro al elevador.

—Jarvis piso ocho—

—Claro señorita— El elevador comenzó a moverse, las puertas se abrieron y Nai salio del elevador con las bolsas sobre su cabeza.

Entro a su habitación y se tiro en la cama, en eso su móvil empezó a sonar, miro la pantalla, era Wade.

—¿Que quieres?— Preguntó Nai.

—Comadreja quiere que te diga que aposté un riñón a que hoy venias y le patearías el trasero a todos aquí— Contesto Wade.

—¿Y que gano yo?— Nai se empezó a quitar los zapatos.

—Si ganas te quedas con el cinco por ciento de las ganancias— La chica fruncio el ceño.

—Encerio Wilson, ¿quien es la que va a pelear?— Wade suspiro.

—Esta bien, el veinte por ciento— Nai soltó una carcajada.

—Sabes iré, pero solo a patearte tu lindo trasero— Wade chillo de alegría.

—¡Gracias!, te amo, ven a las doce— Nai colgo.

Salio de su habitación y fue a la cocina, no había comida.

—Ayer estaba lleno— Dijo para si misma, en eso llego Tony.

Stark abrió el refri, estaba vacío y faltaba su pizza, se giro sobre sus talones y miro con los ojos entrecerrados a Nai.

—Naiobe Zurc, ¿te comiste mi pizza?— La chica fruncio el ceño y negó con la cabeza.

—No, pero vi que Thor anoche se estaba comiendo una, probablemente fue la tuya— Tony abrió la boca y soltó un bufido.

—Ese Beach Boy—

—Deberías vengarte de el— Mencionó Nai con una sonrisa maliciosa —Ah y pide comida, tengo hambre—

—Tu siempre tienes hambre— Bufo Tony.

—Si, si bueno, ahora pide mi hermosa y deliciosa comida—

—Agh, no se donde te cabe tanta comida Pulga—