「 𝐡𝐨𝐦𝐞𝐥𝐞𝐬𝐬 」

⁵ × ❝Lado A❞ ×

Multimedia: Yusuke Murata.
Tipo: General.
Advertencia: Ninguna.
Clasificación: G (general).
N° de palabras: 2297 (one-shot).
Publicación: O3/O8/2O19.

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Lado A

El salón de juntas principal estaba lleno. Metal Bat escuchaba en una esquina apartada lo que se discutía, con dificultad y un bostezo atascado en su garganta. Nunca se había aburrido tanto en una reunión. Nadie se levantaba la voz ni hablaba sin permiso, también notó que casi ningún compañero de Clase S se encontraba allí, entre el tumulto de héroes convocados distinguió a Child Emperor por aquí y a Zombieman con King por allá. La atmósfera tan lúgubre que rodeaba a los altos mandos se expandía conforme avanzaban los temas, sin dudas algo no andaba bien pese a la victoria contra la Asociación de Monstruos.

Tal vez, como en otras ocasiones, terminaría por enterarse de todo afuera de esa pragmática sala.

—Hasta ahora hemos evaluado los daños en la Ciudad Z, Ciudad S y Ciudad C, donde se registraron las actividades más graves los últimos días —explicaba un agotado Sitch, mientras aparecían las estadísticas en el monitor central—. La primera está completamente comprometida e inhabitable, aún no decidimos qué hacer; se está reconstruyendo de a poco el sector comercial de la segunda y usamos parte de los fondos para los damnificados; en la tercera ya nos informaron las autoridades que se encargarán ellos. Ahora bien, con respecto a nuestras instalaciones, hemos hecho algunas reformas tanto en la edificación como en el código de conducta de los héroes Clase S y A que viven aquí, dado que será también un complejo departamental privado...

Los párpados se entrecerraron y amenazaban con rendirlo al sopor. No se le ocurrió mejor cosa que estampar su cabeza contra la pared, lo más disimulado posible. Apenas sí se dieron cuenta quienes se hallaban a su lado, a unos metros de distancia; eran héroes Clase A y por alguna razón que no se molestó en comprender siempre lo evitaban. Los ignoró, no serían tan estúpidos como para mandarlo al frente.

Así como eligió asistir porque era opcional para él, eligió retirarse antes de terminar. Nada de lo escuchado le concernía, y dio por sentado que el resto tampoco. Fingió no haber notado que un par de ojos lo seguían hasta la salida, y con ello decidió que se quedaría en la sala de espera hasta que se aburriese por completo o acabase la audiencia. Lo que suceda primero.

Allí se encontró con Watchdog Man, quien afirmó que sólo se había presentado para cobrar los méritos por la exitosa guardia en la Ciudad Q. Sus compañeros eran tan excéntricos como misteriosos, no le desagradaba pero no es que se moría por conocerlos mejor realmente. Se limitó a esperar.

Por suerte los héroes y ejecutivos abandonaron la sala principal antes de que el sueño lo dejase fuera de juego ahí mismo, en los mullidos sillones. No había dormido bien en la noche y haber salido de su confinamiento un rato lo relajó más de la cuenta. Sabía que ese fisgón se le acercaría cuando saliera y, pasase lo que pasase, estaba preparado para encarar a quien sea.

—¡Metal Bat, hola! No sabía que vendrías.

No contó con que se trataría del niño prodigio. Se puso en pie para caminar a su lado, ya que parecía apurado. Su semblante cambió por inercia, no podía evitar ablandarse con él, incluso lo alegró verlo. El pequeño héroe llevaba un yeso en su bracito izquierdo y curitas en las rodillas, parecía no importarle en absoluto. La particularidad crucial fue aquella expresión tan cansada y tensa, apretaba los labios como a punto de estallar.