⁹ ❝¿Cómo me veo?❞ [2/2]

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Multimedia:
• "Domesticated animals" — Queens of the Stone Age.
•  1Shara1  ((♡))
Tipo: Slice of life.
Advertencia: Ninguna.
Clasificación: G (General).
de palabras: 2052 (two-shot).
Publicación: 11/O8/2O2O.

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¿Cómo me veo?

Nunca creyó que sería empujado a una situación como esa. No recordaba la última vez en que siquiera tuvo en manos más de dos prendas distintas, mucho menos encontrarse consigo mismo en un cubículo de metro cuadrado frente a un espejo de cuerpo completo. Meditaba qué hacer entre prenda y prenda, mirándose con creciente desagrado y extrañamiento, no le gustaba lo que veía, no le gustaba a quién veía. Los minutos pasaban lentos, perezosos, o acaso su mente trabajaba tan rápido que la sola existencia de estos lo apabullaba. Garou no se caracterizaba precisamente por ser un joven muy confiado de su imagen, y si bien se alivió de verse entero días antes, su paciencia frente a su propio reflejo tenía un límite demasiado acotado. No lo soportaba.

—¿Cómo te quedaron las remeras?

Mal.

—Bien. El talle... El talle está bien.

—¡Yay! Le diré a mi hermano Badd que las llevaremos.

—No —exclamó por inercia, los párpados bien abiertos frente al vidrio. Tomó aire, ahora debía explicaciones. Se quitó la que tenía puesta y dio media vuelta para tenderla a través de la cortina, volvió a su posición inicial una vez que dio el pase—. Me alcanza con una sola. —Podía ver las botitas de la niña aún del otro lado, no era suficiente para convencerla. —En serio, no necesito más... Yo... volveré otro día por mis propios medios. ¿Sí?

Qué tonto sonó aquello, más aun al recordar que Zenko era tan obstinada que debía negociar con ella.

—Entonces llevamos dos.

Eso, o se había dado cuenta que mentía.

Apretó los labios y se vistió. Una prenda menos, ahora faltaba el resto. Se dejó mostrar a sí mismo lo apesadumbrado que estaba, los hombros laxos al igual que los labios, ocelos cansados de la misma imagen, el albino que tenía en frente le observaba con lástima. ¿En qué momento se dejó mandar así, por un par de personas? Faltaba que la niña le dijese échate, date la vuelta. Dame la pata.

"No soy un puto animal", gruñó.

Pese a todo pronóstico, entre la presión de buscar algo que le gustase, nacía en el joven –o más bien, renacía– un pequeño capricho. A sus costados las placas de madera estaban prácticamente forradas de posters de modelos, y artistas, todos luciendo estilos distintos, amén de tentar a los clientes con algún outfit en especial. Sin embargo, solía haber un patrón entre los que lograban captar su atención, un gusto particular y muy bien guardado para sí mismo. No recordaba si se probó alguna antes, lo más probable fuera que no, pues no sólo no confiaba en que fuese capaz de lucirla, sino que tampoco se dio el tiempo a desarrollar ningún gusto en especial. Mientras más desapegado estuviese de los objetos materiales y su relación con estos, menos empatía generaría con aquel cuerpo humano del que siempre renegó. Mas ya no quedaba nada que lo atase tan férreamente a los razonamientos que conformaron su cosmovisión hasta el momento, y ante la inexistencia de una certidumbre con respecto a su futuro, tal vez... sólo tal vez...

「 𝐡𝐨𝐦𝐞𝐥𝐞𝐬𝐬 」Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon