90 días de gratitud

DÍA 72. AMABILIDAD

La amabilidad es un amor maduro, es una actitud afectuosa, cariñosa, fundada en el respeto, lo cual es fundamental para la relación con los demás. El ser amable se traduce en actos de dar a los demás, así como ser considerado, de alegrarse de los progresos, de aceptar las creencias y diferencias, es escuchar con una sonrisa y hablar con el brillo de los ojos.

Se puede saldar una deuda con dinero y quedar a paz y salvo, pero con las personas amables habrá una deuda siempre que pagar. El alma se complace en sentir paz, tranquilidad y satisfacción al comportarse amablemente, porque nace de un sentimiento racional y de la capacidad de dar a los demás lo que se merecen, además porque es la manera como quisiéramos ser tratados.

Había una pareja que era feliz aunque de escasos recursos. Un día una desgracia inesperada cayó sobre ellos, la esposa contrajo una enfermedad desconocida la cual se hizo crónica. Al ver a su esposa sufriendo, el esposo se sentía frustrado Y angustiado porque no tenía dinero para el tratamiento médico y no podía comprar medicamentos.

Con lo que tenía pudo comprar una raíz de ginseng en una tienda y al regresar a casa le dijo a su esposa 'que un hombre se me apareció en sueños y me mostró dónde estaba el ginseng diciendo que te mejoraría si lo comías.' Por eso, por favor cómelo y recupera tus fuerzas. La esposa comió, el esposo que estaba a su lado mirando se sintió agradecido con ella por haber creído.

Sorprendentemente su esposa comenzó a recuperarse de su enfermedad, finalmente su salud se restauró. Entonces, el esposo que se sentía culpable por haber mentido le dijo la verdad a su esposa.

Cariño tengo que decirte que la verdad tuve que mentirte porque no tenía dinero para el tratamiento médico, por favor... perdóname.

Ella se conmovió por el sincero amor que le tenía y lo abrazó le dijo: lo que he comido y me dio la salud es tu amor. Cuando el esposo la escuchó decir esto comprendió que lo que había hecho por ella no había sido en vano y se alegró mucho. Lo que permitió que la pareja mantuviera su hermoso amor, fue la amabilidad inherente a su amor, la amabilidad es una de las características del amor. Necesitamos aprender el amor y la amabilidad de Dios inherente de su amor y difundir la fragancia de amor en el mundo entero, a través de la amabilidad.

ACCIÓN DE GRATITUD ASÍ DE SIMPLE

Primero. Bendice a las personas que escogiste el día 70, puedes decirles algo como lo siguiente: Hoy doy gracias Dios, por ser tu fuente de la Luz perfecta, por todo el dinero que has recibido a lo largo de tu vida, por toda la ropa que te has puesto, por el transporte que utilizas y por todas las sillas donde te has sentado.

También, por cada puesta de sol que con tus ojos aprecias y cada día soleado que has vivido y por cada noche que te invita a dormir y a descansar; por el abecedario que te aprendiste para vocalizar palabras y poder comunicarte asertivamente con los demás, lo mismo que las tablas de multiplicar, que te han servido para dividir, multiplicar, sumar y restar.

Que Dios te el dominio propio para ser amable en los momentos que te intente dominar la ira.

Segundo. Hasta terminar el entrenamiento de gratitud repite lo siguiente:

El poder de la gratitud es un milagro que recorre todo mi cuerpo; es Dios quién me llena de su poder y gracia. En Él mi fe aumenta y crezco espiritualmente. Los resultados extraordinarios ocurren diariamente en mi vida. Este es un momento de mayor necesidad en mi vida donde mi corazón dirijo a la gratitud y mi conciencia al contacto con Dios. Me lleno de fe de aquello que no puedo ver; actúo con fe pidiendo a Dios lo que necesito porque Él es mi fuente infinita de abundancia.

Hoy es un excelente día, mis pensamientos y vibraciones son poderosos y esto me hace sentir mejor que ayer, veo fácilmente la abundancia a mi alrededor, agradezco cada éxito que llega a mi vida y lo que necesito la vida me provee; la gente me ayuda y me da su respeto.

La Frase del día:

La ingratitud es la hija del orgullo. Miguel de Cervantes

Un pensamiento de gratitud:

En esta vida hay que seguir por encima de los miedos y de las debilidades; creer que lo imposible se vuelve posible. Confía en Dios quien como un gigante nos lleva en sus hombros abriendo caminos de victoria y esperanza.