XV

8K 350 0
                                    

Para las que no le salen el capítulo 15.
Aquí está!!!!!



Con cada paso que doy una emoción aumenta. Mi mente no deja de inventar tantos escenarios donde pueda acabar por fin con el monstruo.

Entonces me detengo, el gran florero frente a mí, hace que la culpa por lo que voy a hacer , se suba a mis hombros.

"VAS A ASESINAR A ALGUIEN"

Asiento tratando de darme ánimos e ignoro a la voz insidiosa en mi cabeza y otra grita sin pudor la forma en que mató a todos.
La ira me carcome viva mientras me muevo en silencio temiendo que alguien me escuche.

Demons se escucha a mí lado. Su voz...volteo y mi corazón se detiene para reanudar después su marcha de forma acelerada tanta que temo que pueda ser escuchado por él...

Comienzo a caminar a su dirección de forma cautelosa temiendo que esto sea una mala jugada, como todo lo que se ha vuelto mi vida.

Extiende sus brazos y con solo ese acto me hace creer que es él, las lágrimas nublan mí vista mientras niego lentamente con mi cabeza no creyendo lo que está pasando.

-Ven a mí, galletita-. Dice y está vez, escuchar su voz me lo sigue confirmando pero una parte de mi se niega a creerlo.

"ES ÉL, NUESTRO NIÑO RARO, NUESTRO ADAMSITO".

Y dejo de pensar y las emociones me controlan. Corro hacia él, sus brazos me envuelven y me estrujan con demasiada fuerza como si temiera que llegue a desaparecer cuando es todo lo contrario.

-No lo hagas, cariño-. Dice mientras reparte miles de caricias a mí cabello, a mi rostro, a mis brazos, a mí vientre.

No presto atención a sus palabras por la intensidad de este momento, alzo la mirada y mis ojos chocan con los suyos, deteniendo el tiempo para poder contemplarlos y borrar todas las dudas que tenía, sus ojos verdes con destellos de café hacen que me sienta en casa, segura.

"Cuánto te he extrañado, cariño"- pienso pero no lo digo.

Él me mira como sí fuera lo más hermoso del mundo mientras aparta un mechón de pelo de mi cara.
Abre la boca varias veces tratando de hablar pero se detiene, su rostro refleja la frustración de lo que está sintiendo y no puedo evitar que una sensación cálida se instale en mi pecho al ver ese gesto tan común de él.

-No puedo decírtelo, pero cariño, no lo hagas, no asesines, no hagas caso a lo que te dijo Zeus-. Detallo su voz, el timbre de esta se escucha más suave y armoniosa.

Entonces la fuerza de sus palabras caen en picada en mi. No entiendo nada.
Esto suena casi irreal, no puedo creer que esté aquí y tampoco entiendo que quiso decir.

- ¿A qué te refieres?-. Digo con la voz quebrada por las emociones.

- Zeus tiene un plan para recuperarte y quiere que solo lo recuerdes a él-. Mi mente trabaja rápido tratando de pensar si debo de creerle-. Él mandó a Pan para que te dé tus recuerdos con él, y no los de Endimion él te ama pero la maldición que Zeus le ha puesto lo convierte en eso que no puede controlar-.

- No entiendo, ¿Qué quieres decir con qué no le haga caso a Zeus?-. Pienso en todos estos días y en uno que pude haber estado con él pero no me pasa nada por la mente.

- Se disfrazó de bruja y el vino para arreglarte para el baile. Él fue el que te dió la navaja de plata. Quiere que acabes con Endimion para que él sienta el verdadero dolor que causa la traición del verdadero amor y también apareció en tus sueños haciéndose pasar por mi, quiere que te olvides los nuestro.- fue tan rápido que trato de procesarlo de la misma forma.

No estuvo conmigo en el sueño, fue un estúpido Dios que se hizo pasar por él.

- No te creo-. Susurro mientras me dirijo al gran florero, lo muevo.

- Galletita por favor, escúchame, no lo hagas, tú no eres así. Yo nunca te pediría que mates a alguien-. Trata de acercarse a mí pero solo me concentro en el compartimento bajo del florero.- Mierda-.

Me pongo de pie y lo encaro.

- No tienes que pedirme algo para que yo lo haga. Lo voy hacer para que se haga justicia. Él asesinó a nuestras familias, él te asesinó cariño-. Mi vista se nubla al decirlo pero continuó.- Está amenazando con acabar con nuestro bebé y sabes... Es lo único que me queda para poder sobrevivir y no, no necesito que me digas que debo hacer. Y sí fue Zeus el que me dió por fin la solución para asesinarlo, le estoy eternamente agradecida.-
Y con eso me volteo.

- Está bien galletita, pero te lo advertí aunque digas que es por justicia en realidad es venganza - sus pasos se escuchan más cerca, el nudo en mi garganta arde y mis manos tiemblan al compás de los latidos acelerados de mí corazón.- Te amo, cuídate-.

Besa la parte trasera de mi cabeza. Las ganas que tengo de voltearme son amortiguadas por mi orgullo.

Su pasos se escuchan lejanos hasta que no se escucha nada dejo derrumbarme, mi cuerpo vibra mientras los sollozos son incontenibles.

El sol empieza a filtrarse por la ventana y me concentro en lo que vine hacer. Abro el compartimento y lo veo, el frasco color azul está en mis manos y la satisfacción hace que una corriente me recorra de pies a cabeza.

Una sonrisa enorme se ha dibujado en mi rostro. No quiero hacer otra cosa más que bailar, cantar de alegría, esto es lo que he estado esperando sin darme cuenta, esto es lo que he estado soñando.

Tarareo demons mientras me dirijo a las escaleras. Mis pasos son lentos y la sonrisa en mi rostro parece que no nadie podrá borrarla, aquel que haya dicho que la venganza es un plato dulce, tiene toda la razón.
Trato de no pensar en la loca visita de Adam mientras sacó todos los ingredientes de los que voy a hacer pero me es imposible.

- Luna ¿Qué hace?- dicen a mis espaldas lo que provoca un respingo de mí parte.

Volteo y la asustadiza Lydia se encuentra en el umbral de la puerta. Me siento infraganti.

- Voy hacerle el desayuno a tu alpha-. Digo mientras lavo unas frutas.
Escucha sus pasos acelerados hasta mí pero trato de no prestarle importancia.

-Luna, déjeme, yo lo hago.- dice mientras coje el cuchillo de mis manos.
Pero la empujo levemente mientras sonrío.

-Vete, por favor, yo lo voy a hacer, no necesito tu ayuda.- mi voz suena con dejé de fastidio mientras la apunto el cuchillo.

Ella retrocede y se va por donde vino después de darme un asentamiento.

(::::)
Después de terminar de hacer todo el desayuno, vertí todo el frasco en el vaso de jugo y lo revolví.

Coloco todo en una bandeja junto con una rosa roja, la sostengo con cuidado y me encamino hacia su habitación.

Varias canciones fueron tarareadas por mí en todo momento.

Voy subiendo las escaleras y veo al monstruo al pie de esta, mi sonrisa sigue deslumbrante pero él se encuentra serio, demasiado serio.

- ¿Qué sucede, cariño? - me atrevo a preguntar.

"Adam le dijo. Huye"

- Tu sabes lo que sucede.- su voz sonó más tenebrosa que nunca.

Mis manos tiemblan y me hacen balancear la bandeja pero la sonrisa no flaquea.
Nos descubrieron, debemos huir. Nos va asesinar...

-Eres un monstruo.-  la palabras salieron de mi junto una risa, mientras las lágrimas llenas de impotencia me nublan la vista.

Mi Luna (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora