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capítulo 38: La factura del Karma.

Koro-sensei: vamos karasuma, Nagisa nos necesita */se pone de pie una vez fue liberado, camina al inconciente Omega\* debemos protegerlos.

Kar asuma: pues nosotros moriremos si tocamos a Nagisa */ayuda a koro-sensei a caminar\*

Koro-sensei: estoy acostumbrado a ello, vamos.

Al intentar cargar a Nagisa siente la mirada penetrante del Alfa pelirojo, era una mirada cargada de deseó de muerte, los podría matar mas de mil veces en una mirada, no le dijo nada y nisiquiera le miro, solo se limitó a poner a salvo al omega ojiazul en un lugar seguro.

Márquez: que aura tan potente, digna de un Alfa puro, sumándole el echo de que tomaste por esposa a uno de los mejores omegas, sin olvidar que le diste unos hijos, Nagisa, Shiota Nagisa.

Karma: para que veas maldito anciano */su voz suena ronca y profunda\*

Karma se puso en posición de ataque, clavo su mirada afilada en el romano y en menos de un parpadeo, el pelirrojo se defendía de un ataque mientras su puño estaba conectado en el rostro de Márquez y así muchos golpes más fueron lanzados, con una clara victoria del demonio rojo.

Por cada zona en que peleaban, el suelo sufría grandes daños, claramente no soportaba la fuerza de esos dos altas, a Marquez no le estaba gustando eso, el sufría muchos daños, todo parecía ir muy fácil, así que karma detuvo su ataque.

Márquez: ¿porque te detuviste? */limpia la sangre de su boca\* ¿no querías matarme?

Karma: es raro que tu no estés atacando */se mantiene serio\* claro que planeas algo.

Marquez: tan listo Akabane, pero no tanto, ya que siempre dejas al descubierto tus debilidades.

Karma: ¿que carajos estas diciendo?, deja de hablar y ataca.

Mientras ellos peleaban, Nagisa se reponia del golpe y al no sentir al bebé, abrió sus ojos de golpe, al mismo tiempo de se intentaba levantar, karasuma lo detuvo para que no se esforzará mucho, al mirar al pequeño en brazos de koro-sensei, se puso en guardia y el beta sobre le miraba con ternura, como un padre a su hijo.

Koro-sensei: tranquilo, el esta bien, lo protegiendo bien */le extiende al bebé\* aquí está el pequeño.

Karasuma: afuera las cosas se están poniendo muy intensas */se pone al lado de koro-sensei\* ...Karma esta perdiendo.

Koro-sensei: ¿es broma?, dime que bromeas.

Karasuma: ¿tengo cara de bromear?, tenemos que ayudarle, apesar de que es peligroso para nosotros, tenemos que ayudarle.

Nagisa: yo lo haré */recibe una calida sonrisa de su pequeño Ame\* no se por que pero, algo en mi me hace querer correr hacia sus brazos.

Koro-sensei: Nagisa, no es...

Karasuma: creo... Creo que es lo mejor, ambos son indispensable el uno para el otro.

Koro-sensei: no, no lo dejaré, es peligroso, él no puede...

Nagisa: por favor, cuida de mi pequeño */le entrega al bebé, mientras le arropa bien\* espera por nosotros mi trozo de alma.

Nagisa dio un beso en la frente del retoño, sonrió con ternura y salió de su escondite, liberando toda su sed de sangre al ver al pelirrojo con heridas y la bota del romano en el rostro ajeno, le estaba restregando en el piso, estaba por acabarlo con un golpe, él peli azul tomó impulso entre los escombros para realizar una fuerte patada de hacha.

Muy apenas Márquez logró bloquearlo, fue impulsado algo retirado de karma, rápidamente se protegio con una muralla de hielo, mira al ojo cobre, tomando su mano le analizaba para descartar alguna herida de gravedad, al no verlas, suspira aliviado, le acaricia la mejilla mientras se llena de su delicioso y adictivo aroma.