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Disclaimer: los personajes no me pertenecen.

5.

Caminaban por los pasillos de Hogwarts mientras Minerva le explicaba cosas. La mayoría, si no todo lo sabía, pero disfrutaba de la forma en que lo contaba.

-Bienvenida a las mazmorras, territorio de serpientes.

Hermione se esforzó por mantener su cara neutral, pero el sarcasmo y ligero rechazo con el que había dicho "serpientes" le había hecho bastante gracia. Aunque McGonagall siempre había sido estricta con el respeto entre casas, su orgullo Gryffindor salía a relucir con bastante facilidad.

-Siempre ha habido rivalidad entre Gryffindor y Slytherin, tienen aquí su sala común - explicó al ver que su compañera se quedaba callada, interpretando que no lo había entendido bien.

-Comprendo, si viven en un sitio tan siniestro como este no me extraña que se les agrie el ánimo.

Minerva puso una sonrisa de orgullo y entendió por qué el Sombrero le había puesto en Gryffindor.

-Aparte de eso aquí también está el aula de Pociones. Ya conocerás a Slughorn, es un pelín... especial.

Puso una mueca de desagrado al mentar al profesor que Hermione imitó mentalmente al recordar las tendencias del susodicho. Se alegró de ver que su futura profesora le tenía la misma adversión.

-¿En qué sentido?

-Pues... vamos a hablar claro, es favorotista, tiene un club "selecto" con sus alumnos "estrella".

-¿Puedo deducir por tu tono que no estás entre ellos?

-No, pero no me molesta no estar, lo que me molesta es la propia existencia de ello.

-Ya ves, menuda mafia.

Minerva río ligeramente ante su comentario. Tenía la sensación de que se iban a llevar bien.

-Vamos, salgamos de aquí antes de que alguno de sus subditos nos escuche. Te voy a llevar al mejor sitio de todo el colegio...

Y para sorpresa de Hermione, aunque debía de haberlo esperado, se encontró frente al campo de Quidditch.

-En realidad comparte puesto con la biblioteca, pero esa ya la conoces - le dijo mientras caminaba sobre la espesa hierba del campo -. ¿Te gusta el Quidditch?

Hermione se encogió de hombros. Después de tantos años con Harry, Ron, los gemelos y Ginny le había cogido el gusto.

-Me gusta verlo, sobre todo si juega gente que conozco. Pero no juego.

-Vaya, bueno, entonces espero verte en las gradas animando a Gryffindor eh.

-Si te tienen como capitana no os hago mucha falta - le dijo de forma distraída mientras miraba hacia los aros.

-¿Cómo sabes que soy la capitana?

Hermione regresó la vista a la tierra, golpeandose mentalmente por su torpeza.

-Ah... solo era un comentario, ya sabes, condicional... en el caso de que te tengan como capitana entonces no os haría mucha falta...

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