El NIÑERO (Historia adaptada) Almaia

capitulo 58

Narra alfred:

Abrí los ojos y vi amaia dormir, se veía tan hermosa, le di delicadamente un beso en la mejilla, luego la abracé suavemente,  me levanté de la cama y pude ver por la ventana que había una terrible tormenta así que  cogi el celular de amaia; apague su alarma, salí de su habitación y cerré la puerta lentamente, baje las escaleras corriendo y vi a xus en la cocina.
- mamá - dije... amaia no pude ir al colegio con este clima.
-Alfred -dijo mi madre preocupada.  Opino lo mismo, llamaré a la madre de amaia e insistire en que se quede en casa. Genial ten le dije entregando el celular de amaia.
Creo que mejor uso mi celular, no quiero ser algo confianzuda - dijo  disgustada
- como quieras, el número 99018479
- dije apresurandome ¿Por qué tanta prisa? Dijo marcando el número de la madre de amaia.

Narra xusita:

Como quieras el número es 99018479
- dije apresurandome
¿por qué tanta prisa?  Dije marcando el número de la madre de amaia. Ya estaba marcando el número cuando sonó el celular , sonó y sonó
¿ya?  Dijo alfred apresurado.
Tranquilo hijo '- Dije.. aún no contesta
¿Hola? Escuche al otro lado del teléfono
Hola soy la madre de alfred, mucho gusto
- Hola xusita ¿cierto?
Así es,  alfred y yo estamos preocupados por que hay un clima terrible y creemos que sería mejor que amaia se quede en casa, no te preocupes nosotros la cuidaremos hasta que la tormenta pare.
Si este clima cada día esta peor muchas gracias xusita, te debo una. Dijo la mamá de amaia feliz.
No te preocupes estará como en casa, cuídate mucho, un beso. Dije en el auricular del celular.
Esta bien dijo la mamá de amaia
- gracias nuevamente, hasta luego.
¡adiós!  - Dije contenta corte la llamada y puse el celular sobre la mesa, me senté en la silla más cercana y sonreí
¿Y bien?  Dijo alfred curioso -¿que dijo?  - obviamente dijo que se podía quedar. Alfred sonrió.- pero continúe
Tendrás que ir a comprar más tarde unas cosas para la comida, no hay nada que ofrecerle a amaia.
Claro que si dijo el emocionado. Me dio un beso en la mejilla y se fue felíz a darse una ducha.
No te olvides de apagar la terma le recordé a alfred.
- claro grito feliz

Narra alfred:

Corrí todas las escaleras lo más rápido posible hasta llegar al baño. Encendí la terma  y fui e  busca de una toalla y uñas sandalias en mi cuarto, abrí la puerta lentamente vi amaia seguía durmiendo, puse su celular al Costado suyo lo más silencioso que pude, me quedé contemplandola dormir, es tan bella durmiendo, me acerqué lentamente a amaia y uni mis labios con los suyos, felizmente no la desperté solo sonrió y siguió durmiendo, me di vuelta recogi mi toalla y me puse las sandalias, cerré la puerta del dormitorio lentamente, fui una puerta a la derecha y la abrí deprisa, una vez dentro del baño cerré la puerta y puse seguro, abrí la puerta de la ducha; luego abrí la Manesilla del agua caliente , me deshice de mis prendas  y a la ducha, me relaje unos minutos, después sali me cubri con la toalla, camine hacia la puerta del baño,  la abrí y después camine hacia mi dormitorio, abrí la puerta lentamente saque los boxers un pantalón gris, un polo rojo y un saco mas una chalina me cambié lo más rápido posible. Voltee y amaia seguía dormida, me acerqué a verla.
Te amo amaia - acaricie su mejilla y luego salí del dormitorio silenciosamente.
Baje a toda velocidad las escaleras, llegue a la cocina y vi el gran desayuno que mi madre habia preparado
-¡ehh no toques eso!  Me regaño mi madre. No todo esa para ti, recuerda que no eres el único. Reí
- claro.- dije- estoy apurado quiero
Comprar las cosas para la comida antes que amaia despierte. Esta bien- dijo xus confundida - ¡pero No te atragantes! - me regaño - mastica bien
Yo sólo seguí comiendo rápido ya que tenía que comprar las cosas y volver antes de que amaia volviera, queria sorprenderla. Ya habia terminado de comer un vaso de jugo de naranja y pan de jamón y queso, me paré lo más rápido de la mesa y fui en busca de mis llaves.
- adiós mamá - dije gritando mientras abría la puerta para salir.
- chau hijo, anda con cuidado, gritó mi madre afectuosa
Cerré la puerta y me dirigí hacia mi auto, abrí la puerta y me di cuenta que tenía que tener mucho cuidado, pues todo estaba lleno de agua. Entre en mi carro, introduje  la llave y empecé a conducir, no podía dejar de pensar en amaia, me hacía tanta falta su  presencia, su voz, su aroma, su mirada. Como recién nos habíamos reconciliado estaba pensando en prepararle una sorpresa, llegue a ver un semáforo, me detuve al ver la luz roja, agarre mi celular y empecé a ver los miles de mensajes que le había mandado, de pronto me puse a recordar nuestra hermosa relación
Me dio un sentimiento de nostalgia. Depronto escuche muchas bocinas, era que el semáforo ya estaba en verde y no habia avanzado. Ups comencé a dirigir mi mirada al frente y a conducir nuevamente, vi que la tienda de la que hablaba mama ya estaba a la vista
Estacione el auto en el primer lugar que vi lo mas rápido posible, baje de este y entre al supermercado, seleccione los artículos que mamá me había dicho que necesitaba, cosas como pollo algunas verduras. Me dirigí hacia la caja registradora, saque un billete de 50 euros y espere mi cambio tan pronto la compra estuvo, fui lo más rápido que pude de nuevo al auto, entre, prendi y empecé a conducir, mantenía la vista al frente hasta que escuche que mi celular empezo a sonar. Inmediatamente pensé en amaia no dude en agarrar el celular revisar, tan pronto quise dirigir mi mirada al frente, casi me desmayo. Me había chocado contra un  camión, fue casi instantáneo yo solo dirigí mi mirada y ya me encontraba con los ojos cerrados por el brusco impacto podía sentir como unos pedazos de Luna se habían quedado atascados en mi rostro y cuello. Ya desmayado soñaba que amaia y yo estábamos juntos en una isla? Ella me decía que era hermoso y yo a ella que es perfecto, después íbamos a un río los dos nos bañabamos, comenzamos a hacernos caricias y a sentir la anatomía del otro, y a encajar nuestra anatomía como dos piezas de rompecabezas, pude  a ver soñado mas solo que escuchaba la sirena de la ambulancia, al parece era grave bueno me habia desmayado y sangrando con pedazos de vidrio clavados en mi cuerpo.

Narra xusita:

- jugo - sonrió y camino detrás de mi hacia la cocina...depronto el teléfono comenzó a sonar
- Ya vuelvo amaia, mira el jugo sirvete mientras yo contesto el teléfono.
- claro dijo amaia recibiendo la jarra de jugo
¿Hola? Pregunte en el  teléfono
Hola!  ¿Es la familia García? pregunto un señor preocupado
Si ¿ quién habla?  Pregunté curiosa - soy el policía Gálvez,  Es usted la madre del joven  ¿alfred? Pregunto inquieto.

- si soy yo ¡que paso!  pregunté preocupada
Su  hijo tuvo un accidente ha sido trasladado al hospital central, en urgencias -me quedé paralizada por unos instantes, colgué la llamada y empecé a soltar lágrima por lágrima

Narra amaia:

¿Que pasó  xus?  ¿por  que lloras? Pregunté inquieta.
Alfred tuvo un accidente esta en urgencias, debo ir al hospital central. Tú quédate y diled a roi y a Raúl, dijo haciendo una falsa sonrisa ¡¿Qué paso qué?! Comenzaron a caer gotas y gotas de llanto. Tú tranquila amaia. Dijo xus tratando de consolarme , pero era imposible- bueno ya me voy,  sólo respira que no pasará nada - Dijo agarrando las llaves de su auto, pues Alfredo estaba en el garaje ordenando.
No podía creer alfred en este mismo instante estaba en urgencias de lo peor, en segundos me volví un mar de lágrimas. Escuché el sonido de una puerta abrirse era Raúl y Roi, bajaron las escaleras corriendo para llegar a la cocina y desayunar una vez abajo.
Raul- Roi -Dije seria. Que  sucede dijo confundido roi.
Alfred esta en el hospital tuvo un accidente - Dije soltando una lágrima ¡¿que paso?! Roi trató de consolarme abrazandome.
- No lo sé coman rápido que tenemos que ir a  verlo - Raúl y Roi accedieron solo tomaron un poco de jugo. Decidí que lo mejor sería llamar a miki para que me llevará a ver alfred junto a roi y Raúl .
-¡Hola!  Escuche al otro lado del teléfono
Miki.. dije triste. Necesito contarte algo suplique.
Alfred tuvo un accidente y esta en el hospital - cada vez de hacían más difíciles aguantar las ganas de llorar.