CAP. 7.

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-¡Mamá no! ¡Le han encerrado y yo me niego a que esto acabe así! 

-¡Harry baja el tono de voz cuando hablas conmigo! 

El despacho de la señora Anne era grande, todo de madera oscura y lleno de libros y archivos que realmente parecían tentadores. 

Me encontraba sentado en una cómoda silla enfrente de ella, separados por el largo escritorio con Harry de pie a mi lado, Tina cerca de la puerta, Liam vigilando cada movimiento y Mark a mi otro lado, sentado de igual manera que yo. 

-¿¡Pero no te das cuenta de que estás siendo súper injusta!? ¡Mamá le ha encerrado y a saber por cuánto tiempo quería dejarlo ahí! ¡Si Tina no llega a aparecer posiblemente aún seguiría en la misma posición! 

-¡No me digas lo que tengo que hacer!- Dijo pausadamente y mirándolo con demasiada seriedad- Quiero oír la versión de Mark. 

-¡¿Cómo puedes ser así?! ¡Casi lo mata mamá de...!

-¡Harry basta! ¡Vete fuera! 

Bajé la mirada sabiendo que si él salía de esa sala, mi despido estaría a la vuelta de la esquina pero que si se quedaba, él me defendería a muerte sin saber muy bien el motivo. 

-No me pienso ir fuera cuando tu intención claramente es despedir a Louis, ¡a Louis mamá! Tú fuiste la que me pidió a alguien como él y cuando lo consigo haces lo posible para que su tiempo aquí esté contado y, ¿Realmente quieres eso? ¡¿Quieres volver a como era antes?! 

Ella se levantó rápidamente de la silla, pegando un fuerte golpe en la mesa que nos hizo retroceder a todos un poco. Su vista furiosa se fijó en Harry y le señaló con enfado sin preocuparse por el escándalo que estaban haciendo los dos. 

-O te callas, o te vas. 

Harry permaneció en silencio y fue señal suficiente para que Anne volviera a sentarse en su sitio con una aparente calma que obviamente no le correspondía, mirando ahora a Mark con tranquilidad. 

-Cuando quieras Mark. 

-Bueno señora, el señorito Tomlinson había llegado aproximadamente 20 minutos tarde de su jornada laboral y…

-Liam habló con él justo a la hora que entró, incluso 5 minutos antes de que empezara su contrato.

-¡Harry!- Chilló Anne mirando a su hijo ahora, que se dió la vuelta respirando profundo. 

Mark continuó hablando y yo no podía hacer otra cosa que escuchar como Harry le iba cortando cada cierto tiempo, preguntándole qué hacía ahí en vez de trabajar o si estaba más pendiente de mí que en la implicación de esa familia. 

Me sentía como si hubiera contratado a un abogado, el mejor de todos que ni siquiera dejaba otras opciones que tener que decir la verdad, aunque ahí estaba siendo complicado. 

Anne se enfurecía cada vez que Harry intentaba abrir la boca. Le amenazó como cinco veces más con echarlo y al final se rindió cuando se dió cuenta de que Harry no lo haría por mucho que ella quisiera. 

Cuando Mark acabó de explicar su parte, con mucha dificultad debido a las mentiras y a las interrupciones, Anne suspiró profundo mientras apoyaba los codos en la mesa y lo observaba. 

-Mark, ¿Tú estás dispuesto a seguir trabajando en esta casa? 

-Sí señora, siempre que se tomen medidas contra él. 

-¿Pero contra él de qué? Si se deberían tomar medidas sería contra tí y tus mentiras y tus

-¡Harry!- Dijo ya Anne con cansancio- Basta ya. 

Una orden || Larry Donde viven las historias. Descúbrelo ahora