⟲ 𝙛 𝙤 𝙧 𝙜 𝙚 𝙩 ⟳ 𝕜𝕒𝕣𝕞𝕒𝕝𝕒𝕟𝕕 𝕪 𝕥𝕦

𝚡𝚟.𝚌 𝚊 𝚙 𝚒 𝚝 𝚞 𝚕 𝚘

Abri los ojos de golpe. Me senté en la cama con la respiración agitada, oi como algo caía y me asusté, pero cuando vi que era el cuadro, el  cual ahora se encontraba en el suelo, me calme un poco. Toque mi frente y seque el sudor con mi muñeca. Puse las manos en mis ojos cubriendomelos

"¿Por qué ahora?"

Me quedé en esa posición un rato, me volví a acostar con intención de dormir, pero lo único que pude hacer fue pensar en el sueño, que por cierto se repitía una y otra vez. Me levante y me senté en el borde de la cama, apreté con los puños la sábana y suspiré. Cambie mi ropa y salí de mi habitación. Camine por la cocina sin saber muy bien que buscaba; terminé bajando a la sala de cofres y sacar la libreta, me senté en el suelo  y al instante me retracte por lo frío que estaba, salí entonces y me senté en una de las sillas de la mesa. Puse la libreta sobre la superficie y empecé a revisar los apuntes, cambiando algunas cosas, borrando, escribiendo y hasta corrigiendo errores que tenia.

"No hay nada que puedas mejorar"

No sabía si sentirme feliz de que todo estuviese en orden, o preocuparme de que lo estuviese, generalmente cuando algo tan preparado esta bien por mucho tiempo es porque algo va a suceder. Moví el lápiz entre mis dedos tratando de analizar si había algo que no me hubiera fijado o notado, apenas noté que me estaba mordiendo la uña del pulgar. Apoye mi cabeza en la silla y mire aburrida al techo, pensando en otra cosa que podría hacer.  Senti como si mi cuerpo se moviera solo cuando me dirigí a la despensa, saque los ingredientes, los mezcle y termine poniendo una taza con café en la mesa, agarre la taza con las manos sin importar que el calor traspasará la taza y chocara con mi piel. Cuando las despegue vi una fina capa de color rojo en ellas, la agite y tome un sorbo, estaba dulce.

- Es extraño que no estés aquí.- Mire a la silla enfrente mío como si hubiera alguien ahí.- Solíamos tomar café al despertar.- Tome un sorbo y trague sintiendo el calor recorrer mi garganta.- Al principio no me gustaba el café, pero tu me decías que un café en la mañana siempre te ayuda.- Movi la taza en círculos, una parte de mi esperaba que él respondiera con algún chiste malo.-

Termine el contendido y lo puse en el lavaplatos. Por un momento me dirigí a la mina, pero luego me detuve, lo pensé mejor y me dirigí a la puerta, asegurandome de tener equipada mi espada, no era la que Luzu me había dado, claro que no, era de diamante y tenía algún encantamiento.

"Seria una locura que supieran que antes de llegar ya tenía la espada"

Abri la puerta, mire hacia atrás, viendo una mesa vacía en la cual nadie estaba sentado, una cocina tan limpia que parecía no haberse utilizado nunca, y el corredor que llevaba a las habitaciones. Cerré con cuidado de no hacer ningún ruido y me dirigí al bosque.

"Esos monstruos están chetadisimos, lo sabes ¿no?"

《Claro que lo sé, por algo voy a por ellos.》

[...]

El joven castaño se removió en la cama incómodo, el colchón era suave, la almohada esponjosa; pero ni con más comodidad podría dormir. Las palabras de la dueña del lugar resonaban en su mente haciendo que las dudas se acumularan, siendo como un martillo en su interior, rompiendo toda confianza sobre sus actos oscuros.

Se levantó, no podía más. Toco el frío suelo con sus pies, mordió su labio inferior aguantando el quejido acerca de la temperatura del suelo. Abrio la puerta y visualizo el largo pasillo, que si bien no era tan extenso como se veía en aquella oscuridad, sentía como si algún monstruo estuviera apunto de salir de allí. Continuo caminando hasta que escucho como algo impactaba contra el suelo. ¿Había chocado con algo? Penso con nervios, no podían saber que el estaba recorriendo el lugar. Se quedó quieto en donde estaba y al paso de unos minutos se oyó como una puerta se abría y se cerraba lentamente. Vio como una luz emanaba de la cocina y se acercó lo suficiente para no ser visto, aún asi podía oír la voz que hablaba, cuando la reconoció sus ojos se abrieron con bastante sorpresa.

"Es extraño que no estés aquí"

Esas fueron las palabras que dijo ___, por un momento Fargan penso que lo habían notado, pero al oír que no espero su respuesta para continuar se alivió, aún así la duda sobre a quien le hablaba y si había alguien más en la habitación no tardó en aparecer.

"Solíamos tomar café al despertar."

Su ceño se frunció ¿De qué estaba hablado? Se preguntó, quizás había alguien en la cocina pero estaba comunicándose por notas, o quizás estaba hablando por teléfono ¿___ tenía pareja? Por alguna razón preguntarse eso no le sento bien, pero lo paso totalmente por alto

"Al principio no me gustaba el café, pero tu me decías que un café en la mañana siempre te ayuda."

El castaño estaba extremadamente perdido en aquella situación, sintió el agradable olor de café recién hecho, supuso de que era el café del que hablaba ___. Cuando notó que ya no se escuchaban voces sintió miedo pensando de que había sido descubierto, pero se tranquilizó al oír como la peli-negra abría el grifo y lavaba algo. Luego escucho como abría lentamente la puerta y apagaba la luz del lugar, hasta que finalmente la puerta se cerró. Quería buscar aquella prueba que tanto le preocupaba, pero la curiosidad de saber que hacía despierta ____ a esta hora y a donde se dirigía le carcomía la mente, además de la posible persona con quien hablaba. Cerro los ojos fuertemente aún parado en el pasillo, pero al final decidió ir. Justo cuando la sombra de la chica entraba en el bosque, las puertas automáticas se cerraron. El joven miró hacia las puertas y vio como una de las plumas de su chaqueta se había atorado, agradeció el hecho de que las puertas tuviera un tiempo de cierre, pero maldijo aquella pluma atorada, trato de abrir la puerta pero tenía escáner de retina, quizo darse un golpe mental por tratar de abrir una puerta de ese estilo. Con fuerza sacó la pluma y la dejó caer en su transcurso al bosque, cuidándose de no ser visto por los monstruos y de no hacer ruido. Camino lo suficiente para ver desde lejos a la peli-negra, hasta que de un momento a otra la perdió de vista, miro a todos lados, incluso miro hacia la dirección contraria, pero no la encontró. Se subió sin mucho cuidado a un árbol y vio algo que le atemorizó por completo.

《Ella estaba rodeada
por una horda de monstruos.》

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¡Welp! Este capitulo fue un poco raro de escribir, me inspiré en una canción al principio y me inspiré en otra al final. Aún así creo que se logró captar la especie de aura fría y rara que va a ir teniendo la protagonista.

𝘱 𝘥:𝘯𝘰 𝘰𝘭𝘷𝘪𝘥𝘦𝘯 𝘷𝘰𝘵𝘢𝘳 𝘺 𝘱𝘰𝘯𝘦𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘦𝘴  𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪ó 𝘵𝘰𝘥𝘰,¡𝘢𝘥𝘪𝘰𝘴!

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