𝚡𝚡Ꭵ𝚟. 𝚌 𝚊 𝚙 𝚒 𝚝 𝚞 𝚕 𝚘

1.9K 213 72
                                    

Deposité el lápiz en la mesa. Estiré mis brazos hacia los lados, moviendo las muñecas en círculos. Me levanté de la silla, serví un vaso de agua y lo tomé tranquila apoyándome en el mesón de la cocina.

Hace ya una semana que había salido del hospital. El doctor me había dado de alta, aconsejándome no hacer algún ejercicio físico de manera brusca, debido a que mi cuerpo estaba aún en proceso de recuperación. Luzu había venido algunos días para revisar mi estado, hablamos y solíamos salir al bosque, algunas veces pescábamos o él me llevaba a su casa y me mostraba las mejoras y decoraciones nuevas que tenía. Claro que, el resto también me visitaba, excepto dos personas. Auron no lo volví a ver luego de salir del hospital, pero según lo que Luzu me decía, estaba teniendo muchas consultas, pero se encontraba bien y feliz al parecer. La molestia por aquel acuerdo que escuche había pasado, sabía que en cualquier momento podría decirlo y zafarme de aquel trato. No habían intentado matarme ni herirte, aun así me mantenía precavida.

Hubiera sido un milagro que haber caído en ese estado hubiera eliminado mi insomnio; pero no lo hizo, así que aquí me encontraba, a las 5:17 am escribiendo los nuevos planes porque no podía dormir. Lavé el vaso y lo guarde. Hice la misma rutina de siempre, tazas, leche, luego calentarlas, luego mezclarlas con el café y por ultimo agregar azúcar.

- Lo siento.- Agarré mi mochila y espada.- Hoy tendré que salir, no podré recibirte, volveré temprano, te lo prometo.- reí sin mostrar los dientes, era un poco estúpido esperar una respuesta. Cerré la puerta y salí.

[...]

El joven castaño caminaba a casa de su amiga, además de querer saber cómo estaba, había hecho un regalo para conmemorar el haber salido de coma y del hospital. Miró su teléfono en busca de la hora, 9:00 am. Mató algún que otro monstruo que estaba en el camino, divisó la casa de la guerrera, sonrió y apuró su trote. Tocó la puerta dos veces con nudillos, espero balanceándose sobre la punta de sus pies; al ver que no contestaban lo volvió a hacer, solía venir a esa hora y siempre le abrían.

Así pasó tres minutos, al llegar al cuarto ya estaba asustado, pensamientos e ideas de lo que pudo haber pasado recorrían su mente, imaginando lo peor. Vió entonces como un cuerpo caminaba hacia él, pensando que era un zombie sacó su espada, pero al poder distinguir quién era se asombró.

___ caminaba cabizbaja, arrastraba una espada de diamante, haciendo que una línea marcara por donde había ido. Masajeó su cien e hizo una mueca de disgusto, aún no lo miraba; fue ahí en que reparó en que tenía machas de sangre oscura. Corrió de inmediato a ella soltando el regalo en suelo.

- ¡Por los dioses! ¿Qué te pasó? ¿Alguien te atacó? ¿Dónde estabas? ¿Estas herida? - Preguntó rápidamente, fue cuando la chica notó su presencia, dando un paso hacia atrás por la sorpresa que le había llegado. Cuando lo reconoció volvió a su posición anterior.-

- Oh, hola Luzu.- Saludó sin mostrar ninguna sonrisa.- Estoy bien, fui... a matar algunos monstruos, es todo.- Dijo sin más, rodeó a su compañero y siguió su camino hacia casa. Luzu la miró en silencio, observo como abría la puerta, miró el regalo por un segundo.- Hala, me han traído un regalo.- Lo tomó con la mano desocupada y lo miró.- ¿Vas a pasar?- Alzó sus cejas y lo miró. Él solo se acercó a la puerta y pasó, dejando que ella las cerrara.- La mañana está un poco fresca ¿No te parece?-

Luzu aún la miraba, su cabello se movía por cada escalón que bajaba, pudo notar las gotas de sudor en su espalda. Vió las manchas de sangre en sus brazos, estaba seca. Entraron a la cocina, ___ dejo su mochila en una esquina y su espada al lado. Estiró su columna llevando sus brazos hacia arriba, movió los dedos como si intentara tocar el techo. Se volteó hacia él.

- Bueno, me doy un baño rápido y hablamos.- Dijo para irse por uno de los pasillos.

Se acercó a la silla y se sentó. La actitud que tenía su amiga le parecía diferente, más relajada, menos bromista, con una mirada neutra y sin una sonrisa, sin duda le parecía rara, no le disgustaba, pero se preguntó porque había cambiado. Escuchó a lo lejos como el agua empezaba a caer en el baño. Miró las dos tazas que había notado antes, como siempre, estaban llenas de café; eso pensó la primera vez que las vio, al fijarse mejor notó como una de ellas tenía menos que la otra, y era extraño, siempre estaba la misma cantidad.

Oyó como algo se caía y alguien maldecía, supuso que era ___. Volteó a ver la espada, la agarró y la revisó; se veía un poco gastada, pero el brillo que emanaba de ella era claramente de algún encantamiento, no sabía que su amiga tenía mesa de encantamientos. El tic tac del reloj llenaba la habitación, el silencio predominaba en el lugar.

Luzu vió por un instante como ___ cruzaba hasta su cuarto, estaba envuelta en una toalla. A los minutos salió, llevaba una sudadera junto con unos shorts. Recogió las tazas, miró por unos segundos la que estaba más bebida, suspiró y desechó el líquido, las lavó y dejó secando.

-¿Cómo estás?- Preguntó, sonrió, pero no mostró sus dientes al hacerlo.

- Estoy bien...- Dijo un poco perdido.- ¿Tú lo estás? Estabas bañada en sangre y...- La miró aún sin creer que hace unos minutos tenía manchas de sangre por doquier.

Ella movió la mano quitándole importancia y negó.- Si, sí, estoy bien, tranquilo.- Agarró el regalo y lo depósito en la mesa. Quitó el listón y abrió la caja.- ¡Hala!- De ella sacó unos diamantes y comida.- Que guay tío ¿Has sido tú?- Lo miró con ojos con un poco de emoción.-

- Si, fui yo. Venía para conmemorar de que has salido del hospital y que estas bien...-

Él castaño se sintió un poco desplazado de la situación. Había venido por razones de celebración, pero lo primero que se encontraba era a su amiga llena de sangre.

- Ostia...- Susurró ella; había sacado un pequeño collar, tenía una luna como decoración.- ¿Me ayudas?- Preguntó, él asintió. Ella se dio la vuelta y le tendió el collar. Luzu pasó sus brazos al rededor del cuello de la contraria y buscó encajar el cierre. Cuando lo hizo se separó de ella.- Gracias.- Recogió la caja y la cinta de decoración y las puso en su cuarto.- Ven.- Tomó la mano de Luzu y lo guió a la salida, sabiendo que él conocía donde se encontraba. Salieron y sintieron una fuerte ventisca de viento. El Sol todavía no pegaba completamente en la casa de ___.-

Luzu vió cómo su mano era entrelazada por la de su contraria, sintió un cosquilleo en el pecho, como si alguien le hiciera cosquillas en el corazón. Vió la mirada tranquila de ella, una parte de si le alegraba que estuviera bien, que no le afectara del todo el estado en el que había estado, su sonrisa parecía diferente, no lograba captar si era algo bueno o malo. Aún así otra parte se preocupaba de que podría pasar si ella no se llegara a defender bien de los enemigos, si se lastimaba y nadie estaba ahí, si gritaba por ayuda; el miedo no tardó en opacar el cosquilleo en su pecho. Se le ocurrió una idea, pero no sabía si ella estaría de acuerdo o aceptaría.

《¿Y si se quedaba un tiempo
en alguna de las casas
de ellos?》

◈ ━━━━━━━ ⸙  ━━━━━━━ ◈

¡Welp! ¿Luzu quiere estar con la protagonista? 🤭. ¡Al fin estamos más cerca de las interacciones! Por cierto, las votaciones de empate cerrarán en 5 minutos. Así que... no se si sucederá... pero si en algún momento hago preguntas y respuestas

⟶ 𝘩 𝘦 𝘳 𝘦 ⟵ 𝘥𝘦𝘫𝘦𝘯 𝘢𝘲𝘶í 𝘴𝘶𝘴 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘢𝘴 ¿?

Este es el probable fin del maratón. Si llego a subir otro capítulo será un milagro 😂.

𝘱 𝘥:𝘯𝘰 𝘰𝘭𝘷𝘪𝘥𝘦𝘯 𝘷𝘰𝘵𝘢𝘳 𝘺 𝘱𝘰𝘯𝘦𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘦𝘴  𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪ó 𝘵𝘰𝘥𝘰,¡𝘢𝘥𝘪𝘰𝘴!

∴━━━✿━━━━━━✿━━━∴

⟲ 𝙛 𝙤 𝙧 𝙜 𝙚 𝙩 ⟳ 𝕜𝕒𝕣𝕞𝕒𝕝𝕒𝕟𝕕 𝕪 𝕥𝕦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora