Love Me Or Leave Me

XXXIII.

Capítulo 33 - La única para ti

"Me vuelvo más cariñoso todos los días, me pierdo en el tiempo solo pensando en tu rostro. Solo Dios sabe por qué me ha llevado tanto tiempo dejar ir mis dudas, eres la única que quiero." -Adele.

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Después de regresar al bungalow después del recorrido, acordamos que el reinicio debería ser gradual, sin prisa. Todavía teníamos seis días en Moorea.

Y, en seis días y haciendo las cosas de la manera correcta, nuestro reinicio tendría una buena base para apoyarnos si algo sucediera más tarde.

Por supuesto, no podía esperar para acostarme con Jade y pasar todas las noches después de esa primera noche con ella. Pero había venido allí primero para mostrarle que no necesitaba tener miedo de mí, que no volvería a lastimar su hermoso corazón incluso si me pusieran un arma en la cabeza.

No renunciaría a mi plan inicial solo porque el universo decidió ser generoso conmigo al sacar a María de la vida de Jade.

No. Dejaría que ocurrieran cosas ahora que sabía que ella también estaba dispuesta a irse.

Y cuando llegara el momento de tocar ese cuerpo caliente, sería una ganancia.

Al día siguiente amaneció hermoso, cálido y completamente soleado. Era el 31 de diciembre, la víspera de Año Nuevo.

Pregunté en la recepción del hotel y dijeron que el turno se celebraría en la gran piscina infinita colectiva que estaba en tierra, en los márgenes de los edificios administrativos. Habrá una fiesta centrada en la cultura local, con bailes y bebidas típicas, y también un breve espectáculo de fuegos artificiales para visitantes extranjeros.

Nada demasiado llamativo, como solía ser en las grandes ciudades.

Estaba emocionada por la fiesta. Sería pacífico, tranquilo y alegre, tal como me había sentido desde la noche anterior.

El día anterior, sin embargo, comenzaría temprano para nosotras. La fiesta sería la guinda del pastel, bien entrada el día.

Por el momento, tendríamos un paseo en moto de agua por la zona y haríamos un picnic en una pequeña isla apartada lejos de Moorea, donde los viajeros fueron llevados en ocasiones como estas.

Jade y yo salimos muy temprano para comprar comida local para nuestro picnic. Cuando regresamos, los guías ya nos estaban esperando en el hotel.

Jade llevaba un traje de baño azul oscuro con aberturas a los lados y un escote bien cortado. Su cabello estaba atado en un moño suelto y sus muslos estaban cubiertos con pantalones cortos de mezclilla abiertos en la parte delantera.

Ese sería el tipo de atuendo que usaría para un paseo en moto acuática, por mi parte tal vez cambiar el traje de baño por un bikini sexy, pero con todas las marcas y hematomas, tuve que conformarme con ir con un traje de baño completo, que escondí cada centímetro de mi cuerpo.

Jade, que me estaba esperando al salir del bungalow, apretó los dientes cuando me vio marcharme.

"Incluso me gustas con esto." Dije con una sonrisa divertida, deseando tanto que ella abandonara esa expresión agónica que siempre hacía cuando recordaba mi viaje con Alex. "Destaca mis curvas."

Abrió la boca seriamente para decir algo, pero luego se detuvo y reflexionó. Ella sabía que mi intención era olvidar todo durante la semana que estaríamos en Moorea. Y le pregunté, le rogué, que también lo olvidara, al menos durante esos días de paraíso.