Capitulo 4

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Días antes, Wilmington, Estados Unidos:

- volví a tenerlo - Max estaba sentado en la camilla al lado de su psicólogo, después de lo sucedido hacia ya varios años, tuvo la necesidad de necesitar su ayuda de vez en cuando.

- ¿te refieres a los sueños? ¿han vuelto?

- si - esta acostado con la vista puesta sobre el techo y sus manos entrelazadas sobre su cuerpo.

- ¿Qué viste esta vez?

- oscuridad, era como si estuviera ciego, pero podía escuchar pasos, gente hablar a lo lejos, murmullos, era un sitio de madera, pude saberlo por el sonido de los pasos sobre el piso, y también por el olor.

- ¿conoces algún sitio así?

- no, nunca fui de ir al campo, así que no, no conozco ningún sitio así.

- ¿fue eso lo único que viste?

- no, después vi una ciudad, una ciudad distinta, estoy seguro que no era aquí, era lejos, en una calle vacía, había una casa...

- ¿una casa? Y ¿pudiste ver a alguien? ¿Cree quedar has podido ver algo semejante en otro lado?

- no, estoy seguro que no - hace un breve silencio - si - responde concentrado, como si lograra ver de nuevo en su cabeza todas aquellas imágenes - vi a un chico, algo más joven que yo.

- un chico - menciona el hombre - es un avance Max, en tus otros sueños no pudiste ver a nadie.

- no era un sueño doctor, no era un sueño - recalca.

- ¿podrías describirlo? ¿Te acuerdas bien de el? - vuelve a preguntar.

- si, pude verlo bien - tiene dudas si debería decir el resto, sin embargo necesita contarlo - y también creo que el también a mi.

- Max - el hombre se quita las gafas de ver y clava la mirada en el chico - es solo en sueño, ¿estas diciendo que ese joven pudo verte?

- si - el chico se reincorpora sobre la cama - es lo que le estoy diciendo, pudo verme, o sentirme tal vez, pero sus ojos ... - hace silencio, como si de nuevo estuviera viviendo aquel momento - parecía atormentado, asustado, estaba fuera de si - vuelve hacer silencio - tengo miedo doctor - gira la cabeza hacia el hombre que sujetaba una libreta y un boli donde escribía todo el rato - creo que a vuelto a suceder.

- ¿ha suceder el que? - le pregunta intrigado.

- he vuelto a salir de mi cuerpo, inconscientemente, pero lo he vuelto hacer.

Londres, en la actualidad.

Era el momento de tomar aquel café que tanto extrañaba junto con su amiga, cada dos días Tiffany y Ryan habían optado por la costumbre de sentarse a tomar un café mientras apoyaban el ordenador sobre la mesa y hacían una videollamada a través de Skype.

- ¡es la mejor noticia que me has podido dar en todo este tiempo! - exclama alegre, de repente aquella noticia lo había echo olvidar lo que estaba sucediendo con Max. Ella baja la mirada entristecida - Tiffany - menciona el su nombre con la mirada fija puesta en ella, no estaba ahí, pero ella podía sentirlo - va a estar bien - le asegura intentándole dar ánimos a su amiga - va a regresar, y vais a tener a ese bebe juntos, os lo merecéis.

- tengo - se limpia las lagrimas para poder seguir hablando - tengo tanto miedo de que eso no suceda.

- no - le responde el enseguida - no por dios no digas eso, ni siquiera lo pienses, el va a regresar contigo, y todo va a volver a ser como antes, o incluso mejor, porque vais a tener un hijo que es lo que lleváis tanto tiempo deseando.

El chico de la calle de Atrás 2Where stories live. Discover now