Capitulo 15

169 22 7
                                    

La mujer cuelga el teléfono y no puede evitar que aquella lagrima delatara su dolor, estaba sufriendo, bastante mas de lo que se hubiera imaginado, era su hijo al que iba a encerrar ahí, ni siquiera en sus peores momento hubiera pensado que llegaría hacer algo así, pero era necesario, era por su bien, o al menos eran esas las palabras que no se paraba de repetir, una y otra vez, para hacérselas creer a si misma y así poder llegarse a sentir un poco mejor. Sube y con cuidado pasa la llave por la cerradura intentado hacer el menor ruido posible para que este no pudiera escucharla del otro lado, pone el oído detrás de la puerta, siente un murmullo, como si estuviera hablando por teléfono. Se guarda las llaves en el bolsillo del pantalón y regresa abajo, no quiere estar cerca cuando este se de cuenta y empiece a gritar.

Horas después de terminar todo el trabajo que le fue posible, Ryan salió de la oficina directo a su casa, cuando llegó, Allen aun no había regresado, así que eso le dio ventaja para con rapidez hacer su maleta, pero muy rápido que intentó ser, minutos mas tardes Allen entraría en casa, lejos de esconderse o hacer como que no estaba haciendo nada, Ryan no se detuvo y siguió haciendo las maletas algo que enseguida llamo la atención de su pareja.

- ¿Qué es lo que estas haciendo? - le pregunto preocupado mientras lo observaba de pie en la puerta.

- me voy - respondió seco, no hubo un hola, ni un beso de bienvenida.

- ¿a donde? - pregunto un poco nervioso.

- a Wilmington, te dije que lo haría.

- oye, espera, espera - le dice entrando en la habitación - ¿estas hablando en serio? no me dijiste nada esta mañana, ¿fue por la discusión de hoy? - pregunta con los ojos enrojecidos.

- ¡si! - contesta furioso - es por eso si, porque no aguanto mas, porque no soporto mas esto

- ¿estas tirando nuestro matrimonio a la basura? - pregunta casi llorando.

Ryan se para en seco, y termina tirando la ropa sobre la cama sentándose justo al lado de su maleta, apoya los codos sobre las rodillas y se tapa la cara con las manos.

- ya no aguanto mas - le dijo - ya no aguanto - suspiró.

- ¡ey! - corre Allen hasta el y se arrodilla frente a el destapando su rostro, con lagrimas en sus ojos, mirándolo fijo - no puedo perderte, ¿lo entiendes? se que no he echo las cosas bien, es todo culpa mía, por favor te pido que me perdones, yo no quería que esto pasara, no te vayas por favor.

- no hagas esto por favor - se suelta de sus manos - no es por ti, soy yo, no estoy bien - le confiesa - no estoy a gusto como debería, no - hace una pausa, porque a pesar de todo aquel hombre que estaba en frente suyo era su esposo, al mismo que había prometido amarlo hasta el fin de sus días y lo ultimo que quería era hacerle daño.

- ¿es por el? - le pregunta.

- ¡no por dios! - exclama - ¡claro que no es por el! - lo mira a los ojos - nuestros problemas estaban ahí mucho antes que el llegara, por supuesto que no es por el.

- escúchame - lo vuelve a tomar de las manos, las mismas que besa una y otra vez - puedo entender que tengas una aventura - le dice en medio de su desespero - se que he estado muy apartado, que te he tenido muy abandonado, pero por favor

- ¡por el amor de dios Allen! - se suelta de sus manos y se levanta continuando echando la ropa dentro de la maleta - no digas eso por dios

- ¿me has dejado de querer? - le pregunta volviendo hacer que el chico frene sus movimientos - ¿es eso?

Ryan se vuelve a detener, tiene la cabeza baja, no responde, no dice nada, no actúa, cierra la maleta de golpe, da igual si no lleva lo suficiente, lo que le quede podrá comprarlo, lo que quiere es irse, irse antes de que sea demasiado tarde. Toma la bolsa con las manos, recoge el pasaporte de la mesa de noche a su lado, echa el cargador del móvil en el bolso de mano y se dirige hasta la puerta.

El chico de la calle de Atrás 2Where stories live. Discover now