Capitulo 11

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Celine había llegado antes de trabajar, Luke no estaba en casa, entonces recuerda que el chico le había dicho que saldría a encontrarse con un amigo, quizás el mismo con el que estaba tan enganchado al ordenador, después de ponerse cómoda comienza con sus quehaceres en el hogar, entra a la habitación del joven en busca de ropa sucia, la cama estaba sin hacer y aquel lugar olía fatal, abre la ventana para ventilar un poco, el ordenador seguía donde mismo ayer lo había dejado, ella no quiere hacerlo, pero a pesar de que su hijo había mejorado bastante, tenía miedo de que aquella historia del amigo no sea mas que una tapadera para seguir haciendo lo que le daba la gana, lo piensa un par de veces antes de hacerlo, sería violar su intimidad, traicionar su confianza, sin embargo su preocupación puede más y se sienta tomando el portátil con las manos y apoyándolo sobre su pierna, no hay clave de seguridad, ¿Qué puede esconder de malo alguien que no le pone clave de seguridad a su ordenador? aquella pregunta que se hizo debería de bastar para volverlo a dejar en su lugar, si en verdad escondiera algo no lo hubiera dejado así, a simple vista, pero no, ni con eso logra detenerse, así que entra en el historial de búsqueda de su hijo en Google, y ¡voila! entonces empezó a leer todas esas palabras extrañas de las que nunca había escuchado hablar, ¿Qué era todo aquello? ¿Quiénes eran todas esas personas que contaban experiencias extrañas en una pagina de internet? siente que se le erizan todos los pelos del cuerpo, cierra de golpe la tapa del ordenador y lo vuelve a dejar en su lugar, lo mira desde lejos mientras se aleja como si de un fantasma se tratara, esta aterrada, ¿Qué había sido aquello? ya no tiene ganas de limpiar, ni de cocinar, no quiere hacer nada.

Así que baja nerviosa por las escaleras de la casa y toma con rapidez su teléfono móvil, espera unos pocos segundos, antes de llamar a su ex marido Peter, piensa que a lo mejor este esta ocupado con su nueva mujer y su nuevo hijo, pero no puede con aquello ella sola, así que después de meditar por unos minutos marca enseguida su numero de teléfono.

- Peter por dios necesito que vengas - dijo con verdadera voz de miedo.

- ¿esta todo bien Celine? te noto un poco nerviosa - le pregunto preocupado.

- se trata de nuestro hijo, es necesario que sepas algo.

El hombro tomo su auto enseguida y pocos minutos después estaciono el auto frente a la casa.

- he descubierto algo - le dice con voz nerviosa mientras lo acompaña por el pasillo donde estaba la habitación de su hijo - cuando paso aquello el otro día estuve mirando por su habitación, te juro que revise hasta en el ultimo rincón y no encontré absolutamente nada que demostrara que nuestro hijo se hubiera estado drogando, no encontré nada, ni una aguja, nada, miré en su teléfono móvil, no habían llamadas echas a nadie ese día, ningún contacto preocupante, ¿te acuerdas de lo que nos dijo el doctor?

   El hombre se detiene en seco y la mira fijo.

- ¿a donde quieres llegar con esta conversación? no entiendo que quieres decir.

- pensándolo fríamente, en todas esas veces que nuestro hijo ha utilizado drogas, nunca se había puesto así, el se a puesto violento, si, pero nunca había llegado al punto de convertirse en otra persona, de no reconocerse ni siquiera a si mismo, cuando lo encontré así en su habitación solo había pasado una hora desde la ultima vez que lo había visto y estaba acostado en su cama, estaba durmiendo - hace silencio y vuelve a retomar la conversación - Después de los últimos acontecimientos tengo por costumbre de entrar en su cuarto a cada rato.

- Celine - el hombre pone cara desencajada, no entiende lo que la mujer quiere dar a entender - ¿por que mejor no vas directo al grano?

- Mira - la mujer le da el ordenador al hombre, justo en la paginas del historial de búsqueda de Google.

El chico de la calle de Atrás 2Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang