Fangs of mercury (Gohan en DxD) [Terminado]

Prologo

Hola... mi nombre es Son Gohan.

¿Qué os puedo contar de mí?

Pues no puedo contar nada.

¿Por qué?

Bueno... no me acuerdo de nada, no es que no quiera contaros, es que se me hace imposible recordar antes, salvo... por una cosa, recuerdo los eventos, que más daño me han hecho.

Ahora no sé dónde estoy, creo que he encarnado en otro mundo, porque, aunque tenga esos dolorosos eventos grabados en mi mente, puedo decir que este no es mi mundo, no pertenezco a este.

Aquí, en este nuevo mundo, puedo decir que por lo menos es medio normal.

Aunque no de la mejor manera, creo yo.

Estoy en orfanato infantil, que lo controlan unas monjas, son muy buenas y muy amables conmigo.

Hay otros niños conmigo y la verdad es que todos son muy buenos, es completa paz y sabéis... eso me agrada.

Siento la paz dentro de mí, ahora tengo paz dentro de mí y eso es lo que creo que me falta, lo que me falto.

(Presente: Lombardía, Francia, Narracion en tercera persona):

Podemos ver a un pequeño muchacho de unos 4 o 5 años de cabellos negros y ojos del mismo color jugando en un jardín interior tranquilamente, todo parecía normal cuando el pequeño escucho un ruido cerca, era como si alguien o algo se estuvieran acercando.

Él era Son Gohan.

El pequeño niño solo se giró para ver y dio un grito se miedo porque no sabía que era.

Era como un pequeño lagarto de color gris de unos llamativos ojos color azules muy brillantes, era como una cría de un lagarto pero con alas, tenía la mitad de la estatura de esos momentos de Gohan, y en su boca tenia agarrado como un collar con la forma de la flor de lis que estaba hueca.

Gohan solo se mantenía alejado de ese lagarto con cierto miedo, pero parecía no querer hacerle daño, es más, parecía el monstruo más asustado de Gohan que este de él.

Gohan se acercó lentamente a donde la criatura, pero esta se alejaba, desconfiando del muchacho.

El pequeño de ojos oscuros solo se puso de rodillas para demostrarle a la criatura que no le iba a hacer nada.

Al ver esto, la criatura se acercó al muchacho y lo empezó a olfatearlo, para después, dejar el collar en el suelo, ver al chico y empezar a lamerle el rostro, ahora parecía más confiado.

Pero de pronto las dos monjas aparecieron y se alarmaron al ver esto.

— ¡¿Qué hace un dragón en este lugar?! — diría una de las monjas asustadas por ver al dragón.

— ¡Gohan! ¡Aléjate de ese ser, te puede hacer daño! — dijo la otra monja.

El dragón al ver esto, se asustó, alejándose de Gohan mientras volvía a tomar el collar de la flor de lis.

—Pero no me ha hecho daño, él tiene más miedo de nosotros que vosotras de el— diría Gohan intentando tranquilizar a la bestia y a las dos mujeres.

El dragón intento ocultarse detrás de Gohan con temor, las monjas se dieron cuenta de que tenía razón Gohan, de que el dragón les tenía más miedo a ellas que al contrario.

Las mujeres dejaron de comportarse tan agresivamente y se quedaron viendo lo que pasaba.

Gohan miro hacia atrás para ver al dragón, que al ver todo simplemente dejo de tener miedo, dejo otra vez el collar en el suelo y se acurruco al lado de Gohan, como si fuera un gato.

Gohan al ver al dragón así, se alegró, al igual que las dos monjas, que se tranquilizaron al ver al pequeño bien, por lo que se fueron de allí.

—Entonces... ¿Cómo te llamo? — dijo Gohan mientras veía al dragón y con cierta duda.

El muchacho estuvo pensando por unos momentos unos nombres hasta que se le ocurrió uno en especial.

—Ya tengo uno, Silve, ¿Qué te parece?— diría el muchacho de cabellos negros con una ligera sonrisa.

El pequeño dragón dio un pequeño rugido alegre, cosa que indicaba que le gustaba ese nombre.

Gohan también se alegró por esto.

En eso Gohan vio el collar que estaba en el suelo y lo tomo del suelo.

— ¿Puedo tenerlo? — pregunto Gohan al dragón mientras le mostraba el collar al dragón.

El pequeño dragón solo asintió, parecía no impórtale esto y Gohan se puso el collar.

—Es muy bonito— dijo Gohan con una ligera sonrisa mientras miraba al dragoncito.

El dragón se alegró mucho por esto y empezó a jugar con Gohan.

Mientras tanto, las monjas estaban hablando entre ellas.

— ¿Es buena idea dejar a Gohan cuando cumpla 11 años con el padre Fred? — diría una de las monjas preocupada por el pequeño de cabellos negros.

—No tenemos de otra hermana Lourdes, tuvimos un trato hace tiempo y tenemos que cumplirlo, hemos esquivado desde ese trato por mucho tiempo y debemos de cumplirlo— dijo la otra monja con cierta tristeza en su voz.

—Por lo menos tendremos que contarle sobre los seres sobrenaturales, ¿no hermana Carmen? — diría Lourdes mirando a Carmen.

—En eso tienes razón Lourdes, tenemos que contarle a Gohan sobre los seres sobrenaturales, porque creo que algo malo pasara y necesitara saberlo— dijo Carmen con seriedad

—Y hermana... ¿Soy la única que sentía raro ese collar que llevaba el dragón? —

Carmen solo miro raro a Lourdes.

— ¿A qué te refieres? — pregunto Carmen.

Lourdes solo miro a Carmen, y esta miro por la ventana, donde estaba Gohan, al igual que después hizo Carmen.

—Me refiero a que ese dragón como el collar de la flor de lis creo que son sacred gears, no creo que sea del tipo Juggernaut, no... es distinto, tiene un poder extraño pero es distinto, ese collar es una sacred geard, tengo ese presentimiento, pero no se cual es el poder que podría tener en específico esa sacred gear— diría Lourdes algo preocupada.

—Así que tú opinas que ese dragón gris es una sacred geard de tipo libre, o sea... que es libre de mandato ajeno si no es benefactor de su poder, puede escoger libremente a su usuario y estar con ese usuario cuanto quiera— diría Carmen con algo de sorpresa.

Las dos monjas solo se quedaron en silencio.

—Me encargare de investigarlo, ¿De acuerdo hermana? No quiero saber que es malo para Gohan— dijo Lourdes con calma.

Y simplemente Carmen asintió con la cabeza y simplemente Lourdes se fue de alli.