Censurados [[hemmings]]

#1: Pensar está prohibido

Hoy te pusiste más linda por lo que veo (8)

La alarma de Addicted, Maluma comienza a sonar, llamando a mis neuronas para que dejen de ser unas perezosas. Un nuevo día de escuela, aunque suene bastante extraño me gusta la escuela, así puedo ver a Luke que es mi mejor amigo, aún con una sonrisa me alegra todo el día y no lo sabe.

— Hola mañana —digo estirando mis brazos— Hoy será un buen día.

— ¿Por qué tan feliz nena? —dice mi mamá entrando a la habitación— ¿Algo en especial?

— Nada mami, solo estoy feliz porque veré a mis amigos de nuevo —me destapo dejándome ver en mi pijama de Hello Kitty— Y porque estudié mucho para el examen de Biología.

— ¿No será por una sola persona? —susurra riendo un poco— ¿Ah sí? ¿Y qué entra en tu examen?

— Los sistema reproductores, pero así, cosas como las que no vimos antes, ¡estoy lista para el examen, mamá! —exclamo sonrojándome— Y no sigas con lo de que estoy feliz por una sola persona, es simplemente porque me gusta la escuela.

— ¿Puedo grabar eso? Nunca lo había escuchado de nadie —masculla riéndose de mi comentario— Por cierto, apresúrate, si no quieres irte en bus.

— Mamá, me iré en bicicleta con Luke, en realidad creo que nos iremos en moto —digo encogiéndome de hombros— ¿Tú me preparaste la ropa que está aquí?

— Si vas a ver chicos, siempre hay que estar preparada —me guiña un ojo— No es nada que no uses, solo ropa típica bonita tuya.

Converse, una sudadera que me queda larguísima negra que dice Feminism, unos jeans azules y mi gorra azul. Me enfundo en los jeans y sigo con el resto de la ropa después de que mi mamá se vaya. En mi mochila meto algunos cuadernos, libros y mi porquería de estuche de color negro. Así es, amo el color negro.

Pero no soy única y diferente, ¿vale?

— ¡Hasta luego a todos, familia! —exclamo bajando las escaleras, observando a Emily, Jason y mi mamá— ¡Cuídense!

— ¡Camille, ven a desayunar!

— ¡Luke me espera afuera, mamá! —digo agarrando mi bici— ¡Guárdame el desayuno!

Abro la puerta viendo a mi mejor amigo en su bicicleta, tecleando algo en su móvil, riéndose por todos lados. Bastante guapo con su playera de Nirvana, sus pantalones negros y sus vans. Vamos muy parecidos a la escuela, nos gusta ser algo similares.

— Hola socio —digo besando su mejilla— ¿Listo para el examen de Biología?

— ¡¿Qué examen?! —entra en pánico soltando el celular haciendo que se caiga— ¡Mierda!

— Ten —le paso su móvil— El examen de hoy, de los sistemas reproductores.

— ¡Rayos! Camille, tienes que ayudarme, por favor, te lo ruego —dice juntando sus manos— Yo haría lo mismo por ti —hace un par de pucheros preciosos.

— Claro que lo haré tontito, es más, te pasaré todas las respuestas porque mañana me llevarás a la escuela en moto —alza ambas cejas sonriendo divertidamente— ¿Te parece justo? ¿O tengo que usar otro medios como que te saques un cuatro en aquella nota?

— De acuerdo, no tienes que ser tan agresiva —bromea guardando su móvil— ¿Vamos?

— Evidentemente, sino se nos hará tarde —me burlo montando mi bicicleta— ¿Juntos nos venimos de vuelta, cierto? ¿Podemos traer a la nueva...?

— Cam es que... Tengo planes para después de la escuela —admite encogiéndose de hombros— Quizás no lo sepas, pero estoy saliendo con una chica un curso mayor que yo.

¿De qué me perdí el fin de semana?

— Uh, hm, bueno, supongo que me vendré sola —río nerviosamente— ¿Vamos? No quiero perderme la primera clase, es muy buena, amo mi primera clase.

— ¿Qué te toca?

— Matemáticas —digo sin prestarle atención.

— ¡Camille, tú odias las matemáticas! —exclama riéndose a carcajadas— ¿De qué me perdí? ¿Resulta que ahora estás esperando un hijo de Niall Horan o qué?

— Al igual que tú empezaste a salir con esa chica Luke, hasta los mejores amigos tienen secretos —digo avanzando más rápido en la bici— Además, ¡amo las matemáticas! No me hagas caso cuando diga cosas como que odio las materias.

— Como digas, jefa —ríe entre dientes.

Debo admitir que me he molestado, soy una celosa.

"Contrólate bola de grasa, Hemmings no debe saber que estás enamorada él, se arruinaría toda su amistad"

Y por primera vez a las quinientas, mi conciencia tiene la razón. No puedo dejar que sepa que estoy enamorada de él, nada volvería a ser lo mismo.

Jamás.