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Habían pasado exactamente tres semanas y media desde que Foxy, Golden, Freddy y Fred se habían ido al burlesque. Tenía que admitir que las cosas habían mejorado un poco: Bonnie y yo nos llevábamos muy bien como 'amigos' y cuando teníamos suficiente tiempo nos dedicábamos a hablar sobre anécdotas divertidas o vergonzosas, de hecho, también me había enterado sobre su novio Bon y sobre como se habían conocido y, sinceramente, esta anécdota era una verdadera historia de amor. También me había dado la oportunidad de conocer mejor a Mamá Mai, quien al principio me asustó un poco demostrando demasiado cariño, pero luego fui conociéndola mejor poco a poco hasta el grado de pasar las tardes aprendiendo un poco de tejido o cocina con ella.
Claro que, aun así, extrañaba mi vida pasada en Londres con mi viejo hogar, viejos amigos, viejos pasatiempos, vieja escuela. Aunque, necesitaba dejar de ser tan sentimental en todo, y eso es lo que estaba haciendo: tratando de ser un poco más fuerte y fría.

Mai: ___, cariño ¿Puedes colocar los cubiertos y platos en la mesa, por favor, y llamar a Bonnie para que venga a desayunar?-preguntó Mamá Mai con las mejillas encendidas de haber estado tanto tiempo en la sartén-
___: Claro-respondí de buena gana mientras me paraba del sofá y cerraba la revista de tejido que me había regalado Mamá Mai-

Tenía que admitirlo, la casa de Mamá Mai era prácticamente un palacio: tenía tres pisos en los cuales habían aproximadamente cuatro cuartos en cada uno. En la planta baja se encontraban la cocina, la enorme sala, el gigantesco comedor y la sala de televisión, o como Bonnie y yo lo llamábamos: 'el mini-cine'. En el segundo piso, donde yo dormía, habían cuatro cuartos con baño incluido, en uno dormía Mamá Mai y en otro yo, los que sobraban eran, según Bonnie, de Golden, Foxy, Fred y Freddy. Y por último en la planta alta...bueno, en realidad no sé muy bien que hay ahí porque jamás eh subido.

___: ¡Bonnie!-grité cuando ya estaba en el segundo piso-¡Mamá Mai dice que vayas a desayunar!

Pero lo único que me respondió fue el vacío silencio. Normalmente, Bonnie siempre está en el segundo piso metido en el cuarto de Foxy jugando con sus vídeo juegos, pero esta vez no había ni rastro de donde pudiera estar. Como si mágicamente hubiera desaparecido. Volví a gritar una vez más su nombre, pero nuevamente nadie respondió. Al final, me decidí por subir hasta el tercer piso para buscarlo, si no, Mamá Mai se enfadaría por no haber encontrado Bonnie, no se enfadaría conmigo, pero aun así se que se estresaría un poco y prefiero ahorrarme todo eso.

___: Bonnie, si lo que estás haciendo es esconderte por ahí para asustarme, te juro que no es gracioso-reproché cuando iba a la mitad de las escaleras-

Al llegar al tercer piso no me sorprendí ni un poco. La verdad, el piso era exactamente idéntico al segundo: con los mismos focos, el mismo color de pintura, los mismos muebles, mismos pasillos y hasta el mismo aroma a rosas. Bueno, habían algunas excepciones como las puertas de los dormitorios: en una estaba escrito con crayola azul el nombre de Freddy y hasta abajo se podía apreciar escrito en letras diminutivas las palabras 'gay' y 'Foxy estuvo aquí'. Reí en mi interior por aquella ocurrencia.
Seguí caminando por los amarillos pasillos hasta toparme con un peculiar cuarto. A diferencia de los otros, estos no tenían ni rallones o escritos en la puerta. Esta era una puerta de mármol fino con toques rústicos y caros, en los bordes se encontraban pequeños ángeles tallados a la perfección y en el centro una gran trompeta en la cual tenía escrito en letras sumamente pequeñas la frase ''sigue tu camino, sigue tus sueños, sigue tu destino'' Y automáticamente algo dentro de mí se movió, como si la chispa de hace tres semanas y media hubiera regresado incitándome a entrar.
Y así lo hice.
Entré con mucho cuidado y lo que vieron mis ojos simplemente no lo creyeron. Había una linda guitarra, una de esas antiguas y costosas que ya casi no se vendían... ahi se encontraba una silla; la silla estaba llena de mugre y bichos muertos, se podía ver que hacía años que nadie entraba a aquel lugar. Las cortinas blancas estaban misteriosamente limpias, pero aun así tapaban todas las ventanas impidiéndole paso al sol. Para cualquier persona se podría pensar que aquel lugar era tétrico, aburrido y sin vida, pero para mí, era un lugar sin igual.
Me acerqué a la guitarra y con las yemas de mis dedos roce mástil, luego la tome para tocar una nota melodiosa que inundó mis oídos. Tuve que cerrar los ojos para apreciar aquel momento.

##: Era de mi abuelo-oí una voz masculina detrás mío-

Bonnie, y estaba recargado en el marco de la puerta con expresión neutra.

___: L...lo siento, no debí entrar-tartamudeé nerviosa-es solo que te buscaba y, bueno, me topé con este lugar y...lo lamento, no volverá a ocurrir

Bajé la cabeza avergonzada por mi acto ¿Como me había atrevido a entrar a aquel lugar? Si prácticamente tenía escrito en la puerta 'Propiedad privada' Además, aquella no era mi casa y no tenía derecho a esculcar. Mierda, ahora toda la confianza que había logrado con Mamá Mai y Bonnie se ha ido por el caño. Bien ahí ___, las haz ca**** de nuevo.
Bonnie rió divertido.

Bonnie: Tranquila, ___-dijo Bonnie entrando a la habitación para depositar sus grandes manos en mis hombros-todo está bien. De hecho, me alegro de que hayas entrado, hace años que no me atrevía a poner un pie en este cuarto. Es un poco...

Pero el calló cerrando los ojos. Lo entendía, sabía lo que diría y lo que sentía.

Bonnie: ¿Tocas?-preguntó cambiando de tema mientras señalaba la guitarra-

Vi la guitarra y un sentimiento me invadió todo el cuerpo haciéndome recordar el pasado.

___: Solía hacerlo

Narra Fred

Golpeé el buro del motel con rabia haciendo estremecer todo a su alrededor.

Fred: ¡Vas a decirme porque Owyn mandó a hacerle daño si no quieres que te despedace en este momento!-grité lleno de rabia-

Freddy apuntaba al sujeto con una pistola que habíamos robado de un sujeto la noche anterior en un bar mientras buscábamos información sobre Owyn y sus seguidores.

**: ¿Y terminar como mi compañero?-preguntó el sujeto-prefiero que ustedes me maten a que Owyn me trate como un pedazo de mierda.

Jamás me había sentido tan impotente. Tenía en frente de mí a una de las personas que había lastimado a ___ y ahora podía hacer lo que quisiera con el; hacerlo sufrir hasta que rogara piedad, que claro no se la daría, o torturarlo hasta que dijera que se arrepentía haber lastimado a ___. No sé, lo que ocurriera primero, pero eso si, hoy cobraría venganza.

Golden: Solo mátalo-dijo Golden a Freddy y este preparó la pistola-

Pero antes de que yo pudiera interferir el sujeto gritó.

**: ¡Esperen! puedo decirles algo útil-gritó y yo asentí para que continuara-Owyn la quiere, pero porque quiere cobrar venganza con su familia de algo pasado que no mencionó ¡Yo solo hago mi trabajo! Pero eso si, sé que no piensa matarla muy pronto, primero quiere verla sufrir ante todo el mundo y después poder asesinarla en frente de sus seres queridos. El es un hombre muy sádico y no se detendrá hasta conseguirla. Esa chica...esa chica se ha convertido en su principal caza en este momento, nunca se detendrá.

Entonces, yo agarré la pistola y la disparé en su cabeza haciendo que litros y litros de sangre chorrearan por la alfombra del motel.

Narra ___

___: ¿Entonces me enseñarán a tocar la guitarra de nuevo?-pregunté entusiasmada mientras desayunábamos-

Mamá Mai se había enterado de que yo había estado en el cuarto de música con Bonnie, y en vez de enojarse, se había ofrecido a enseñarme canto y guitarra todos los días por las tardes después del tejido. Y, sinceramente, esa había sido la mejor noticia que había recibido en mucho tiempo.

Mai: Claro, cariño-respondió Mamá Mai untándole mantequilla a su pan-yo puedo enseñarte canto y Bonnie guitarra ¿Verdad que si, Bonnie? Será muy...

Pero algo la interrumpió. Alguien tocaba la puerta. Rápido Mamá Mai se paró de la silla hacia la entrada dejándonos solos a Bonnie y a mí en la mesa. Al segundo ella volvió con un enorme y gordo sobre en la mano.

Mai: ¡Adivinen quien ha enviado una postal!-chilló Mamá Mai y antes de que alguno de los dos pudiera adivinar Mamá Mai volvió a chillar de emoción-¡Exacto! Los chicos y...oh vaya, ___, Fred te ha enviado una personalmente para ti

Oh, mierda. Pensé.
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Fred le mando una carta a ___, que dira!?

Secuestrada Fred y tuWhere stories live. Discover now