𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 2

20.1K 2.1K 1K
                                    

No recuerdo si en algún momento de mi vida dormí en una cama, pero nadie me dijo lo mucho que mi cuerpo podría agradecerme. Me costó levantarme cuando RM llega casi arrojándonos de las camas, EunHa se mantiene cerca de mí mientras caminamos por un pasillo, me parece que este lugar tiene demasiados pasillos, parecía un laberinto. RM nos lleva al lugar donde estuvimos ayer, Rabbit se encuentra detrás de su mesa dejando su arma en ella. Las chicas están rodeando una gran colchoneta cuadrada, Rabbit une sus manos detrás de su espalda y comienza a hablar mientras se acerca.

— Buenos días para todas, veo que aún muchas siguen somnolientas.

Incluyéndome, quiero volver al cuarto y dormir unas horas más.

— No creo que estas chicas duren mucho—una nueva voz masculina hace aparición, es un chico pelirrojo y de sonrisa radiante. Es tan alto como Rabbit, pero no tan musculoso, viste de negro también.

— No las subestimes, J-Hope —advirtió divertido—Tienen talentos escondidos.

— No lo creo—chasquea la lengua cruzándose de brazos, nos ve a cada una con un aire...optimista, sonaba alegre—Tenemos mucho que hacer con ellas.

— Bastante—RM sonrió ladinamente junto a Rabbit.

— Son tres equipos de cinco chicas—comenta el pelinegro—RM, escoge un grupo.

— El que tiene cuatro chicas—señaló el grupo frente a nosotras.

— Bien—asiente— J-Hope, escoge.

— Este.

Y pasa lo que no quería, EunHa que está junto a mí aprieta su mano en mi muñeca, puedo imaginar lo que piensa porque es exactamente lo que estoy pensando.

— No tienes que emocionarte tanto, Grace—dice sacándome de mis pensamientos. Por instinto me pongo derecha y veo al suelo, sé que lo ha dicho para ponerme más nerviosa, pues lo ha logrado—RM, J-Hope y yo estaremos a cargo de un grupo, será una ayuda de ellos para prepararlas más rápido, como vieron ayer, no tengo mucha paciencia con las que se creen listas.

— ¿Lo dice por ti? —susurra EunHa a mi derecha, pero no soy capaz de responder. No quiero llamar la atención del criminal ese.

— Cada día ejercitarán, tendrán defensa personal y veremos cómo manejan un arma—Rabbit sube a la colchoneta mirándonos—Algunas de ustedes tienen experiencia con estas cosas, pero las que no tendrán que esforzarse porque no acepto fallas en mi equipo.

— Cada vez que Rabbit les hable tienen que mantener la frente en alto—escucho decir a J-Hope—¡¿Entendieron? —y de inmediato todas subimos la cabeza mirando al pelinegro del centro.

— RM, tu grupo será el color rojo, J-Hope tu grupo será el verde y el mío...—voltea hacia nosotras—será el negro.

༺═──────────────═༻

Durante varias horas vemos como Rabbit explica cada movimiento a la hora de pelear o defenderse, RM puso en práctica los movimientos acabando con J-Hope, pero ninguno de los dos puede acabar con el pelinegro. El chico es realmente bueno luchando, tanto que me aterra tener que enfrentarlo, cada una de nosotras tuvo que pasar al centro para ser corregidas, Rabbit decía una posición y de inmediato debíamos hacerla, pero muchas nos equivocamos.

Cuando fue mi turno de nuevo noté una sonrisa maliciosa de su parte. Uno de sus hombres le entrega un largo palo delgado y de madera, trago con dificultad sin saber que me hará.

— Cada error que cometas merece un castigo—indicó—Pongan atención—ordena a todas.

Me preparo mentalmente sintiendo mi corazón latir como loco. Rabbit comienza a nombrar posiciones y yo intento recordarlas, las primeras tres las hice, pero a la cuarta me equivoqué recibiendo un golpe en la pierna, aquel jodido palo delgado lastimaba demasiado. Me quejo tambaleándome sintiendo ardor.

— El cerebro funciona mejor cuando estamos bajo presión—dice jugando con el palo—De nuevo.

Una vez más pasa lo mismo, Rabbit me golpea en la espalda haciendo que me queje, toco donde me golpea segundos antes y lo miro furiosa.

— Intenta quitármelo—sonríe divertido estirando el palo hacia mí. La adrenalina y la ira me dominan, alcanzo la punta del palo con mis manos e intento jalar para quitárselo, pero Rabbit jala del palo jalándome con él, choco con su pecho tambaleándome un poco, golpea mi estómago quitándome el aliento, caigo de rodillas y seguido de eso un golpe en mi nariz me deja inconsciente.

༺═──────────────═༻

Despierto en la habitación adolorida, toco mi cabeza mientras me incorporo lentamente, me levanto de la cama tambaleándome y abrazando mi abdomen con mi brazo, llego al baño usando el retrete y una vez que me veo al espejo para limpiar mis manos me llevo la sorpresa de verme con la nariz roja e hinchada, recuerdo que Rabbit me dio una paliza sin esforzarse mucho y siento vergüenza conmigo misma. Por un momento me sentí segura de que podía destruirlo, supongo que di la batalla ganada muy pronto.

Cuando salgo del baño el cuarto no está solo.

— ¿Vienes a darme otra paliza? —toqué apenas mi nariz haciendo una mueca de dolor.

— Las chicas están almorzando en el comedor, allí comerán de ahora en adelante—informa muy serio, pero sin dejar de verme—Ve a comer, comenzarán a ejercitarse en la tarde.

Odio lo que voy a decir, pero tengo que hacerlo.

— No sé llegar al comedor.

Idiota.

— Por algo vine a buscarte, ¿No crees? —levanta una de sus cejas— ¿Seguirás quejándote como una mocosa o volverás a mirarme como lo hiciste en el entrenamiento?

¿No tiene siquiera conciencia por haber golpeado a una chica? Lo miro queriendo asesinarlo allí, yo no pertenecía a ese mundo y él me obligaba a entrar.

— No tengo hambre.

— ¿Quieres asesinarme? —adivina y me sorprendo. ¿Está leyendo mi mente o soy muy obvia? Rabbit saca de su espalda su pistola, le quita el seguro y me la entrega, mis manos tiemblan sin evitarlo, aquella arma se siente muy grande entre mis dedos—Adelante, puedes dispararme, Grace.

Sus ojos me invitan a hacerlo, me está retando, levanto los brazos sosteniendo el arma, intento que mis manos no tiemblen, pero estoy nerviosa, nunca he disparado, nunca he tenido una pistola en mis manos. La imagen de la chica muerta con el hoyo en la cabeza viene a mi mente aterrándome más, no quiero sangre inocente en mis manos.

— No puedo.

— Claro que sí, dispárame por tenerte aquí como prisionera, dispárame o te convertiré en una asesina como yo—sonríe uniendo sus manos detrás de su espalda—Dispárame ahora o te arrepentirás de ello.

Mis manos siguen temblando, aprieto los dientes y tenso mi mandíbula, quiero apretar el gatillo, pero no puedo, me frustra, me desespera, arrugo la nariz por hacer una mueca y me quejo de dolor al recordar que está maltratada. Termino por soltar la pistola arrojándola a mi cama, Rabbit sonríe tomándola de regreso.

— Lo siento.

— ¿Quieres que termine de romperte la nariz? —amenazó—Nunca te disculpes con nadie. Si no puedes disparar discúlpate contigo por permitirte ser buena—guarda su pistola caminando a la puerta—Si quieres sobrevivir en este mundo debes perder la cordura para mantenerte cuerdo, la próxima vez que te disculpes te dispararé en el corazón, ¿Queda claro?

Más que claro.

— Sí.

— Sí

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Periculum • [JJK] COMPLETAWhere stories live. Discover now