Después de las interminables trece horas de vuelo, por fin aterrizaron en el aeropuerto de Bologna. Ambas hermanas estaban cansadas por el vuelo, pero tenían que ir hasta la fábrica y cumplir con sus obligaciones.
En el aeropuerto un señor canoso, no mayor a cincuenta años, las esperaba sosteniendo un cartel con su apellido.
Las hermanas se acercaron y le sonrieron al desconocido.
- ¿Ustedes son Maitena y Malena Bauer? - Preguntó en inglés con un marcado acento italiano.
Las mellizas asintieron en respuesta y se presentaron formalmente. El señor se presentó como Pietro Barone y les dijo que lo siguieran.
Salieron del aeropuerto y Pietro las guió hacia un Ferrari Roma gris, después de guardar el equipaje, se dispuso a manejar hasta Maranello.
Durante el trayecto sólo cruzaron algunas palabras con Pietro, parecía amable, pero no indagaron mucho.
Después de casi tres horas, llegaron a la fábrica, donde las recibió una mujer no mayor a los treinta años
- Bienvenidas, soy Amanda, y voy a ser la encargada de guiarlas por la fábrica - Dijo amablemente mientras les daba una tarjeta para entrar y salir del edificio a cada una - Son muy parecidas, supongo que son mellizas. Espero poder identificarlas - Dijo la mujer seguido de una carcajada
- Si, somos mellizas - Dijo Malena entre risas.
- Vamos a tratar de no vestirnos iguales para que puedan diferenciarnos - Bromeó esta vez Maitena tratando de calmar su risa.
Era bastante normal que las confundieran, por eso Maitena siempre prefería llevar el pelo más corto que su hermana.
Después de recorrer la fábrica, volvieron a la recepción, donde un hombre se acercó a Amanda y le dijo algo al oído.
La mujer asintió y se giró hacia las hermanas
- Bien, los pilotos ya están aquí. Es hora de que los conozcan - Dijo con una sonrisa
Las hermanas compartieron una mirada y siguieron a la mujer por un pasillo.
Estaban muy nerviosas, querían dar una buena impresión y no creían que con un vuelo de trece horas encima pudieran hacerlo.
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ZIELSVERWANTEN
FanfictionMaitena nunca creyó que con su nuevo trabajo iba a tener muchas aventuras en su vida. En su mente sólo tenía una meta, centrarse en su trabajo y hacerlo bien, hasta que se cruzó con un par de ojos que la harían dudar de hasta su propio nombre. ¿Pod...
