c a s s e t t e # 4

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“ Quizá no pensé muy bien la cosas ”

. . . . 

— ¡ Le volare los malditos sesos ! - aquel hombre acercó su arma a la cabellera castaña de Seiya; inmediatamente los demás bajaron sus armas intentando sacar a su compañero de esa situación.

— Wow wow ¡Suéltalo viejo! ¿Que quieres de nosotros? - Jabu avanzo unos pasos intentando negociar; pero otra arma fue apuntada a él, está vez era una mujer pero parecía tener miedo de tener esa arma en manos y dispararle.
— Todo lo que traen en esas mochilas o el chiquillo se muere - ordenó, era un hombre de cabellos obscuros, piel blanca y ojos turquesa pero sin brillo alguno y estaba acompañando de otra mujer de la misma tez y cabellos obscuros con tonos lavanda y púrpura al igual que sus ojos ambos traían ropas de color negro.

— ¡ No ! ¡ Nosotros trabajamos duro para traer esto a casa ! - Shokō exclamó causando que Ikki le cubriera la boca; el click del seguro sono alertando a los tres muchachos; el moreno cerro sus ojos nervioso esperando la entrada de una bala.
El gruñido y quejidos de dolor de los infectados siguiendo el olor de la sangre de uno de los desconocidos al parecer, el hombre estaba herido.

— mierda ya nos detectaron. . . - Ikki tomo su escopeta dispuesto a matar al desconocido pero no quería que lo último que le quedaba de su antigua familia muriera en las manos de un idiota.
— podemos negociarlo pero no aquí, suéltalo y síganos si quieren vivir. . . - El mayor extendió su brazo ansioso invitándolos a huir juntos; la lluvia empeoró atrayendo más niebla lo cual sería imposible saber de dónde los emboscarian.
La mujer desconocida corrió para tomar la mano de Ikki dispuesta a escapar con ellos pero el otro azabache seguía con la amenaza. — ¡Hades, vallamos con ellos! - Suplico la de ojos lavanda, ganándose un gruñido por el mayor que terminó cedendio soltando a Seiya quien inmediatamente corrió para alcanzar alos demás.

Los infectados empezaron a seguir los apresurados pasos de los jóvenes, las pisadas resonaban al chocar con los charcos de agua; al aproximarse a la entrada lanzaron primero las mochilas con provisiones. Después entraron las dos mujeres del grupo, seguidos de dos de los varones. Y por último los dos que se aseguraron de alejar a los infectados de ahí lanzando cosas a la nada para crear ruido.

— ¡¡ Dios mío volvieron !! - Esmeralda estaba haciendo la guardia de la entrada secundaría cuando los vio entrar. Emocionada los ayudo pero se quedó congelada al ver nuevos rostros.

— A Shaka no le gustará esto. - advirtió mirando hostilmente a los dos azabaches.

. . . . [ l o a d i n g ]

— ¡ No, claro que no ! ¡ Más personas significa que la comida durará menos ! -  El rubio cabecilla de la familia intervino en la reunión de emergencia. La cual estaban presentes los nuevos inquilinos.
— Ayudaremos en lo posible para conseguir mas. . . - la muchacha de cabellos carbos con toques púrpura abogó para conseguir la confianza de los dueños del refugio, estaba eternamente agradecida por qué los dejarán entrar ahi.
— O solo si nos dan un poco nos largamos. - El tal Hades hablo secamente ganándose miradas amenazantes.

— ¡No! - Shaka negó inmediatamente — Hades, por favor; ya no tenemos a dónde ir. . . Lo último que Minos dijo fue que nuestro hogar fue destruido. . - Le recordó mientras retenía las lágrimas.

— ¡ Haré lo que ustedes digan pero déjenme quedarme con ustedes ! - Inmediatamente recibió un abrazo por parte de Mii; quien se compadeció por la señorita, Shaka empezó a reconsiderar su decisión.
— Claro, pueden quedarse, los dos. Si ayudan a mantenernos mutuamente con vida. Son bienvenidos a nuestra familia - la rubia invito ganándose una sonrisa de los relajación por parte de los intrusos.

— Soy Hades Heinstein y ella es mi hermana menor Pandora Heinstein - se presentó para ser recibido por los demás. Aunque Hades era solo su apodo. . .

Seiya solo veía algo irritado pero sin demostrarlo, ese tipo hace unos momentos le iba a reventar la cabeza a disparos. Sintió una manos en sus pequeños hombros. Era Ikki.
— ¿ No te hizo nada ? - susurro discretamente. El castaño se soltó indiferente intentando demostrar que lo estaba y que no tenía intenciones de hablar con el.

¿Por qué lo odiaba tanto? Mu se pregunto internamente al ver la escena, hace cinco años eran muy unidos. Solo algunos lo sabían muy bien.

La noche llegó y algunos de los muchachos se encontraba acomodando los alimento en la cocina, otros hacían su guardia y las muchachas terminaban de atender a Shaina.
Entre esas cosas el peluche que Shokō rescató fue recibido por los ojos de Ikki quien se encontraba en la cocina con Pandora, Esmeralda y Mu.

En las habitaciones Hades cureoseaba entre las cosas que decoraban un poco la pieza, Mii estaba ahi con el junto con Seiya acomodando las camas, ahora abría un cambio de lugares en las camas por los nuevos integrantes de la familia.
En cuanto el azabache miro algo en un tipo tocador se acercó para tomarlo sin cuidado alguno.

Un viejo y dañado telescopio.

El telescopio de Shiryu.

— ¡No lo toques! ¡Suéltalo! - aquel muchacho de ojos rojizos le arrebató el artefacto y lo aferró a su pecho. La rubia se detuvo para pedirle a el mayor que salieran de ahí. Por primera vez Mii vio una emoción reflejada en el delicado rostro de Seiya; una de miedo y tristeza.

— ¿Que le pasa? ¿Por qué tanto escándalo por un viejo telescopio? - cuestionó Hades, la de ojos azules suspiro pesadamente. — Era de su antigua pareja o algo así nos explico Ikki. Es lo único que pudo rescatar de ella o el, no sabes más sobre el o eso. - explico tristemente.

Todos volvieron a sus habitaciones para dormir, Pandora se la había pasado bien conviviendo con más mujeres y por fin tener un lugar donde dormir en paz.
Pero su hermano tenía otros planes.

Se encontraba de pie enfrente de la cama del aquel castaño observándolo fijamente. Pero en realidad el era el que estaba siendo observado por otra feroz mirada. . .

Los verdes ojos de Ikki lo miraban amenazadoramente en la obscuridad.

. . . .

Perdón por el hiatus! Intentaré actualizar más seguido!

One last time || Ikki x SeiyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora