Te Esperé © |#1| [TRILOGÍA INFIDELIDADES]

CAPÍTULO 17

JANE POV'S

Sus labios se mueven sobre los míos, de una manera que no sabría explicar, sigo el beso, y sus manos acunan mi rostro, y lo profundiza. Cuando nos hace falta el aire, dejamos de besarnos, mi mirada cae en sus labios, los cuales yacen rojos y un poco hinchados. Miro sus ojos y el mira los mios.

De repente me llega el recuerdo de Liam.

—No— digo e intento apartarme, más el no me lo permite.

—Olvidalo, date otra oportunidad, usame si quieres, pero déjalo ir— musita y acaricia mi mejilla.

—¿Si te estas escuchando?— él asiente.

—No me importa, solo no te aferres a alguien que te daño, mi lady—  acerca su rostro al mio.

Sus labios acarician mis labios, es como si ambos lo quisiéramos, pero ninguno se atreve, estampo mis labios sobre los suyo, el parece sorprendido por una fracción de segundos, pero me sigue el beso gustoso.

Adrianna, que estas asiendo.

Mis manos se enredan en su cabello, sacandole uno que otros jadeos, toma mi cintura y me acerca más a su cuerpo. Cuando ya nos hace falta el aire, pega mi cabeza a su pecho, y acaricia mi cabello dejándome sorprendida por unos momentos.

—Vamonos de aquí— digo contra su pecho.

Él asiente y tira de mi mano, salimos de ese lugar, para dirigirnos a la playa, cuando estamos en esta, caminamos en silencio, y su mano se entrelaza con la mía, miro su gesto, y no digo nada, solo me dedico a caminar, en silencio escuchando las olas del mar, y sintiendo la arena que acarician mis pies, que ahora yacen descalzos.

Una media hora fue lo que duramos, en la playa, y de la misma manera regresamos al hotel, en silencio, y no uno incomodo, más bien todo lo contrario.

Entramos a la habitacion, dejo caer mis tacones en una esquina y salgo al balcon, el aire acaricia mi piel, y mi cabello vuela, por la fuerza de este. Es una noche fria, de eso estoy consiente.

Escucho los pasos de Nathan pero no me inmuto en lo más mínimo, sus manos se posan en la barandilla, rodeando mi cuerpo con sus manos, pegando mi espalda a su torso, y recostando su barbilla en mi hombro.

Por unos momentos me noto nerviosa.

—Se que estas herida, se todo lo que viviste, y que tienes todo eso guardado dentro de ti, no te das la oportunidad de hablar sobre eso, y te esta consumiendo, no te encierres dejate fluir— musita sobre mi oido.

Mis lagrimas caen al momento, mi corazón se agita, y siento un nudo en mi garganta.

Él me gira, y con sus pulgares limpia mis lágrimas, lo miro a los ojos, y me sonrie con ternura.

—Estoy aquí, para ti— murmura y mi respiración se corta unos instantes.

—Solo tenemos un mes de conocernos Nathan..

—Eso que importa, puedes enamorar a cualquiera en menos de un día si te lo propones.

Da un casto beso, en mis labios, y sonrie como niño chiquito. Sin pensarlo dos veces estampo sus labios con los míos, el sigue mi beso, es uno lento, con dulzura, sin presión, como si tuviese miedo de que no fuera real, y quisiera disfrutar cada segundos.

Me levanta en sus brazos, da unos pasos, para luego depositarme en la cama, pasa de mi boca a mi cuello, deja besos en mis hombros y mejillas, haciéndome estremecer completamente.

—No sé— hace una pausa, mientras respira con rapidez— Como el puedo, dañarte a ti, que eres máss que perfecta, dejándote dudando de ti misma, quiero aclararte, y que te quede claro, que vales demasiado como para sufrir y encerrarte por alguien que no te merece nena.

Sus palabras, solo hacen que mi corazón se agite y quiera llorar con fuerza. Acaricia mi mejilla, y me mira fijamente.

—Eres perfecta Adrianna— musita para luego besarme.

Le sigo el beso, y siento sus caricias en mis piernas desnudas, sus besos en diferentes partes de mi rostro.

Poco a poco se va deshaciendo de nuestra ropa, hasta quedar ambos en ropa interior. Estamos hincados en la cama, sus besos bajan a mis hombros, y de a poco retira mi sosten, me giro y beso sus labios, este me tumba quedando encima mio, sin aplastarme, pegando nuestros pechos.

Nos deshacemos de las telas, que estorbaban quedando ahora  piel con piel, la sabana cubre nuestra desnudez, y sus caricias me sacan de si por momentos.

Nathan se acomoda entre mis piernas y de a poco va entrando en mi, me aferro a sus brazos, y cierro mis ojos, siento un poco de dolor, solo un poco.

Besa mi cuello distrayendome de este, se mueve con delicadeza, y varios gemidos salen de mis labios, sus movimientos se hacen rápidos, pero sin llegar a lastimarme, gemidos salen de mis labios y de los suyos, llevándome a otro planeta.

Acelera sus embestidas, y cierro los ojos, muerdo mis labios intentando retener un gemido, que no logro detener, un cosquilleo recorre mi entre pierna, y mis paredes vaginales se contraen, haciendome tener un orgasmo que me deja anonada por unos momentos, embiste con mas rapidez, da unas ocho embestidas más, y siento como se corre dentro de mi.

Nuestras respiraciones son rapidaz, miro sus ojos y el los mios, sin poder detenerlo sonrio y el me devuelve su sonrisa.

Sale de mi y gira mi cuerpo, haciendo que quede acostada sobre su torso, con mi cabeza sobre su pecho, y entrelaza nuestras piernas, siento como acaricia mi espalda y cabello, hasta que me quedo dormida.

EDITADO