Te Esperé © |#1| [TRILOGÍA INFIDELIDADES]

CAPÍTULO 34

JANE POV'S

Al despertar me encuentro recostada sobre el pecho de Liam, con nuestras piernas cruzadas, y su brazo sobre mi cintura.

Debe de estar incómodo.

Me muevo para levantarme, pero me pega más a su cuerpo.

—Liam, déjame levantarme, debes de estar incomodo.

—Créeme, para nada lo estoy— contesta en voz baja, volteándose, y enterrando su cara en entre mi hombro, y mi cuello.

—Está bien— me acurruco contra su cuerpo, sintiendo el calor que esté desprende, y volviéndome a quedar dormida.

No sé cuando tiempo más dormí, pero el sentir sus manos jugando con mi cabello me despertó.

—Hola hermosa— saluda con una enorme sonrisa.

Deja un casto beso en mis labios, y sonrío como boba.

—Hola ¿Hace cuanto estás despierto?.

—No tanto, solo unos veinte minutos— responde y le respondo con un leve sonido de garganta.

Se aleja un poco, y agarra algo de la mesita de noche.

—Son las once con treinta minutos, Jane.

Sus palabras me hacen abrir los ojos, los cuales había cerrado con pereza.

—¿Tan tarde?— pregunto aturdida.

Tiro de la sabana que me cubría, agarro mis cosas que yacían en un estante, y me meto al baño.

Con rapidez limpio mi cuerpo, y cara, unos diez minutos es lo que tardo en la ducha.

Me pongo lo mismo que tenía ayer, y agarro uno de los cepillos qué hay sin destapar, cortesía del hotel supongo. Lavo mis dientes, y al rato acomodo mi cabello.

Cuando estaba por salir, la puerta se abre dándole paso a Liam.

Acaricia mi mejilla, mirándome como siempre lo ha hecho, con adoración. No digo nada, y solo le sonrío, para salir del baño y darle su privacidad. Minutos después lo hace el, ya cambiado, y listo para irnos.

—¿Nos vamos?— pregunto, y asiente— Bien entonces.

Agarramos las cosas que trajimos en mano, para salir del lugar, pasamos por la recepción y me despido con un saludo de mano, del chico que trabaja en este puesto, y el cual ha sido muy amable con nosotros en todo momento.

Liam conduce hasta mi departamento, y al llegar a este me despido de él con un vasto beso en los labios. Subo hasta mi morada y dejo mi bolso en uno de los estantes de mi habitación, para luego tumbarme en la cama.

Me siento cansada..

Pero me desperté no hace mucho ¿Eso que? Bueno.

Me dejo llevar, hasta quedar dormida por un buen rato, despierto horas después, y me siento mucho mejor, más descansada la verdad.

Me levanto y me doy un baño rápido, y opto por un pantalón de vestir crema, camisa blanca de mangas largas, y unos tacones con agujas no tan largas del mismo color de la primera prenda mencionada.

Recojo mi cabello en un moño alto, bien ordenado, y en mi rostro opto por un maquillaje sencillo, iré a la empresa por un momento, tengo cosas que ver, no tan urgentes, pero no me gusta acumular trabajo.

Salgo de casa, son las tres con diez minutos, calculo que en unos quince estaré ahí si no hay mucho tráfico.

Y así es, llegue en eso de las tres con veintisiete minutos, algunos de más pero cerca.

Y al estar en esta todos giran a mirarme lo que se me hace un poco vergonzoso, y más al no saber la causa.

—Buenos tardes— menciono, y ello responden a mi saludo.

Al subir a mi área de trabajo, veo a Carlos me acerco a él y da un grito que me asusta.

—¡Tenemos muchas cosas de que hablar!— sin tiempo de responder me arrastra a mi oficina, cerrando la puerta, para luego sentarme en el sofá, y él adopta el lugar frente a mi.

—¿Qué te pasa?.

—Oh por Dios, eres como esas chicas que vuelven, y vuelven con sus ex's.

Sus palabras me dejan pensando, y confundiéndome al mismo tiempo.

—No te entiendo explícate.

—No te hagas, que ya todos sabemos que volviste con Liam— entreabro mi boca, pero ni una palabra sale de esta— Así es, Dios parezco mujer de lo chismoso que soy, pero eres mi mejor amiga, y me entero de las cosas dos años después, te voy a desterrar.

—¡Suave, que todavía no asimilo cómo te enteraste! ¿Cómo lo hiciste?.

—Ay por favor, si no quieren que se sepan las cosas no anden en lugares tan públicos y así, eso ya está en todas las revistas de farándulas ¿No notaste cómo se te quedaban mirando todos? Pero el arenero que se te va a venir encima, bueno se les va a venir, porque según las personas, uno de los dos fue infiel, algo que no es mentira, la gente se mete donde no le importa, así como yo, y pues.. les van a atacar con preguntas, así como yo.

—Eres un tonto.

—No, pero de lo que me quiero enterar es la reacción de tu prima la loca obsesiva, ay papá, sabiendo cómo es, se va a armar la que no te imaginas, esa mujer montaba unos shows, que tenían que sacarla con seguridad de aquí, no sé.. ella cree como que está en un circo o que se yo.

Río con nerviosismo, sus palabras me dan vuelta, la prensa.

No me importa mucho en realidad, pero si no aclaras sus dudas se van a inventar unas miles de cosas, que te hacen quedar como ridiculo, porque según con tu silencio afirmas sus dudas.

Y mi prima pues, ella necesita ir a terapia, no es burla ni juego, ella en verdad lo necesita.

EDITADO