Capítulo 27

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Pov Camila.

-Entonces...- las palabras mueren en los labios de Dinah mientras observaba su computador. - ¿qué opinas de éste?

Le miro desde mi posición, justo para ver el apartamento que me mostraba en la pantalla de su laptop. Desde que le confirmé mi deseo por comprar un apartamento para vivir, ella y Verónica han estado buscándome uno cómo si sus vidas dependiesen de ello.

No me molestaba, lo encontraba lindo y me agradaba que se preocupasen así por mi, pero cada vez que encontraba uno que me gustaba, le buscaban defectos.

- Ese luce elegante y moderno. Me gusta...se ve espacioso además... - comencé antes de ser interrumpida por el grito de indignación de Dinah.

- ¿Bromeas? Está del otro lado de la ciudad y lo siento Mila, pero tú y yo sabemos que no podemos vivir a más de 10 minutos la una de la otra. Así que... lo descartamos. - declara dejándome perpleja, miré a Verónica en busca de ayuda y la aludida se encogió de hombros.

- La zona no me convence, los barrios residenciales son la preferencia de los delincuentes. - menciona apoyando a Dinah y regalándome una pequeña sonrisa.

- ¡wow! ¿Es en serio? Ya sé de qué lado estás. - dije, evidentemente ella y Dinah estaban confabulando en algo.

Volví mi atención a la cocina, desde de Verónica estaba aquí me había encargado de cocinar. estoy segura no son los platillos más gourmet que haya probado pero siempre me dice que son deliciosos y si la hago sentir bien, vale la pena el intento.

Los tutoriales en youtube son efectivos, las pastas no se me han vuelto a pegar y si le añades algo de verduras, se considera "sano". Como mencioné, no son platillos gourmet pero nos ayudan a no morir de hambre. Paso a pasito ¿no?

Sentí una presencia junto a mi e inmediatamente supe de quien se trataba, sonreí ladinamente y le miré.

- ¿Si, señorita? ¿se le ofrece algo?- pregunté juguetona, Verónica copió mi sonrisa y se recargó en la isleta, su pie estaba mejor. De hecho ya no estaba la bota ortopédica pero aún tenia cuidado al apoyarlo.

- Quiero ser de utilidad, me siento mal sin hacer nada. Mi pie está mejor y no me dejas ni siquiera ayudarte a hacer la cama. - dice a modo de queja, cruzándose de brazos. - déjame...mmm... - dice observando por el lugar buscando que hacer.- déjame a cargo de ésta olla...

- ¿Estás segura?- pregunté entrecerrando mis ojos- es una olla muy especial, de hecho contiene nuestro almuerzo. Observarla y encargarse de ella requiere concentración y dedicación...

Hablaba con una sonrisa burlona, revolviendo el contenido de la sartén puesto que había preparado un salsa casera con diferentes tipos de vegetales.

- Lo tengo, creo que es un trabajo que puedo y debo realizar, es mi misión en esta vida.- su tono serio y mirada determinante fue lo que me hizo soltar una carcajada.

- boba..- dije con la más amplia sonrisa-

-Tu empezaste...- responde y ambas escuchamos el bufido de Dinah que nos hizo mirar en su dirección.

- Diooooos, ambas son tan nerds. les juro, un minuto más de sus conversaciones sin sentido y mis oídos sangrarán- la polinesia se levanta y se lleva la laptop consigo.- Mañana harás la primera visita a tu potencial apartamento.

Me advierte antes de salir del lugar, me volteé hacía Verónica al mismo tiempo que ella se volteaba hacía mi.

- Ese "potencial apartamento" ¿es el que está aquí, tres pisos arriba? - pregunté entrecerrando los ojos.

i'm a fool.Where stories live. Discover now