Whatever It Takes

CAPÍTULO 3

–¡NOA! –Gritaron abrazándome.

–Dios mío cuánto os echaba de menos, no os hacéis una idea. –Dije con los ojos llorosos.

–Nosotros también, ¿qué tal todo por España? –Preguntó Alex.

–Eso, ¿la comida es tan genial como dicen? –Preguntó Garrett.

–¿Y la gente de allí qué tal? ¿Te costó mucho adaptarte al idioma? –Dijo Josh.

–A ver tíos aquí vamos a lo importante...¿Las chicas están buenas?

–¡BRYCE! –Le chillamos todos.

–Estúpido no vuelvas a decir eso con mi prima delante. –Contesté pegándole una colleja.

–Tranquila, no somos nada ya lo sabes. –Me dijo ella.

–¡POR AHORA! Yo sé que volveréis, mi corazón y mi instinto de prima me lo dicen.

Ellos rieron ante mi respuesta, aunque sabía perfectamente que ya se la esperaban debido a que siempre había dejado claro lo mucho que adoraba la pareja que harían Allison y Bryce. Nunca habían sido nada pero todos sabíamos que sentían algo el uno por el otro.

–Bueno, quiero que me contéis todos los cotilleos de esta semana ya que no he podido hablar mucho con vosotros con el tema de las maletas, la vuelta aquí y los finales de clase.

–Espera guapa, lo primero es lo primero. ¿Cómo cojones no se te ocurrió decirnos que volvías una semana antes? –Josh me miraba con reproche ya que según habíamos hablado numerosas veces, él iba a venir junto con Alex al aeropuerto a recogerme, querían ser los primeros en verme.

–¡ESO BROWN! ¡Hicimos un pacto! –Dijo Alex enfadado, de broma, obviamente.

–Lo siento mucho pero quería daros una sorpresa. Me hacía ilusión porque siempre me estáis sorprendiendo y yo nunca hago nada de eso. –Les contesté.

–¿Y por qué ellas sí lo sabían? –Preguntó Josh de nuevo. Me salió celoso el mejor amigo.

–Porque cariño, nosotras si sabemos guardar un secreto. –Habló Ness yendo hacia su novio y abrazándolo por la cintura.

–¡OYE! –Dijeron ellos ofendidos, a lo que reí.

–Ness tiene razón, quería daros una sorpresa al menos a la mayoría, tuve que decidir entre ellas y vosotros y sinceramente no es que seáis muy...discretos que digamos.

–Me dueles, pensaba que eras mi mejor amiga. –Bryce se limpió una lágrima falsa.

–Harrison, deja el drama y disfruta de mi increíble presencia. –Le dije en un intento de hacerme la diva. Intento nulo, por supuesto.

–¿Sabes qué? Tienes razón, ven aquí anda. –Me contestó acercándose para abrazarme y después cogerme en brazos–. Vamos a llevar tu "increíble" presencia a otro lado. Bueno...vamos a ponerla en remojo. –Sonrió de forma maligna e inmediatamente capté lo que iba a hacer. Mierda.

–¡Bryce Harrison! ¡Como se te ocurra tirarme a la puta piscina te dejo sin hijos! –Le chillé mientras pataleaba en un intento de que me soltara, el cual no funcionó.

–Venga Noa, no te vendrá mal un chapuzón.

–¡Idiota te lo dijo enserio bájame ya o...!

No pude acabar la frase porque el simio descerebrado que tengo por amigo me tiró con fuerza a la piscina sin dejarme decir nada, mientras que mis amigos se reían de la situación.

Decidí quedarme unos segundos bajo el agua sin respirar para darle un susto.

–Oye chicos, lleva mucho tiempo dentro del agua, ¿seguro que está bien? –Diijo Garrett.