22

635 67 30
                                    

— Ginés por dios no puedes decir que odias a las palomas solo porque no tienen propósito en la vida, es muy cruel

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Ginés por dios no puedes decir que odias a las palomas solo porque no tienen propósito en la vida, es muy cruel... —dije riendo con un helado en la mano mientras entrabamos a casa.

Desde la noche que habíamos pasado juntos en la que no había pasado nada hasta hoy, una semana después, había entrado en una faceta completamente romántica y enamorada con Ginés.

Salíamos al cine, al parque, a la plaza, de compras, por helado... Éramos increíblemente románticos y melosos, y eso que aún no teníamos sexo, sin duda nos íbamos a volver locos cuando eso pasara.

— lo siento, pero las estúpidas palomas no hacen nada más que defecar sobre el hombro de las personas —alzó los hombros,. Solté una risa y me aferré a su cuello.
— Yo digo que tú eres el tonto —sonreí, Ginés me dió un casto beso en los labios y luego me embarró su helado en los labios para luego lamerlos.
— Sabes deliciosa —susurró, solté una carcajada.
— dios, esa frase puede sacarse de contexto tantas veces —me mordí el labio— mejor veamos Friends, que nos hemos quedado en una parte muy linda. 
— ¿Linda? —alzó la ceja— Joey de está enamorando de Rachel eso es una completa mierda —solté una risa.
— Tú eres un aguafiestas —lo jalé hasta la sala y puse la serie en la televisión mientras que seguía comiendo mi helado ahora encimada de Ginés.
— Sabes que pienso —sonrió— que tú te identificas como Rachel y por esto te gusta esto, porque te gusta tener a los Joeys detrás de ti —puse pausa y me giré a verlo.
— No te voy a negar que me identifico más con Rach que con cualquier otro personaje, pero no es porque me guste tener detrás a los Joeys, de hecho yo quiero quedarme con un Joey —sonreí, él alzó la ceja.
— ¿Y quién es ese hijo de puta? —frunció el entrecejo, solté una risita y me senté sobre sus piernas.
— Tú —murmuré— desde que llegaste aquí pensé que eras como Joey, porque eras un ligón —reí.
— Y quieres quedarte conmigo a pesar de eso? —puso sus manos en mis caderas pegándome más a él.
— Sí, porque has cambiado por mi, igual que Joey cambió por Rach —acaricié su rostro. Ginés unió nuestros labios y me acarició la cintura con una de sus manos mientras que la otra se fue a mi nuca.

En un movimiento ya estaba debajo de él con su cuerpo entre mis piernas mientras que seguíamos besándonos como si no hubiese un mañana.

Mis manos viajaron de arriba a abajo de su torso acariciando todo lo que tenía sobre mi, amaba tanto esto, quería que esto pasara en verdad.

— Te quiero, te quiero muchísimo Elisa, no puedo creerlo, eres lo mejor que me ha pasado —susurró haciéndome sonreir como una pendeja, no podía creer que me estaba diciendo esto.

Me aferré a su espalda mientras que él repartía besos en mi cuello y pecho, esto era como el cielo, sin duda alguna.

Aunque en el cielo, la lujuria es un pecado y más tarde que temprano, nuevamente el timbre de la casa nos interrumpió. Ginés se levantó de prisa con una frustración evidente en su cara, está vez hasta a mí me había frustrado no tener nada.

Ya habían sido muchos días de estar absteniéndonos y de que nos interrumpieran el sexo, Ginés iba a obtener una enfermedad o algo como  siguieran interrumpiendo.

— ¿Puedes abrir? —preguntó, asentí— si preguntan estoy en el baño trabajando en la imaginación cuando pude haber probado la realidad pero no lo hice por su culpa —solté una risita y me encaminé a mi misma hasta la puerta.

— Heeeey —saludaron Barder, Cronos, Pedro y Felix entrando al apartamento, sonreí de lado y cerré la puerta cuando el último de ellos pasó.
— Chicos —dije con un poco de confusión en mi voz.
— pasábamos por aquí y pensamos en venir a ver algo en la televisión y saber que ha pasado entre ustedes —dijo Barder alzando los hombros— aún sigo pensando que puedes dejar a Ginés y venir conmigo Elisa —me guiñó el ojo.

Solté una risa y esta aumento al ver a Ginés saliendo del baño con una mala cara mientras se acomodaba el short.

— o sea que a demás de interrumpir mis posibles polvos vienes a robarte a mi novia? Gracias —dijo con un mal tono y luego rió.
— Uh, mal ahi, nos hubieses informado y no veníamos —respondió el morocho, Ginés le sacó el dedo corazón.

Estaba tan divertida esta escena que quería palomitas y refresco para verla mejor, sin duda un espectáculo.



El día había comenzado bastante loco, para empezar porque una vez más no habíamos podido follar por la noche, los chicos estaban afuera y no quería que se dieran cuenta así que nos controlamos.

Cuando salí de mi habitación mi mirada se fue hasta los cuatro chicos que descansaban en mi sala mientras que yo pensaba en qué cocinar.

Mientras algo se me ocurría deje una nota diciéndoles que iba al supermercado, y salí en esa dirección, quizás mi cerebro fluirá mejor estando allá con tantas cosas por escoger.

En mi camino hacia allá pude notar algunas miradas, me detuvieron un par de veces por alguna fotografía pero nada fuera de lo común.

Noté que un coche venía siguiéndome así que me asustó un poco, a decir verdad, pero no fue hasta que ví bajar del coche a la reportera misma que me había detenido hace mucho tiempo que me relajé un toque, al menos no me iban a robar.

— Elisa, ¿Cómo has estado? —saludó, sonreí un poco y me detuve— ¿Te parece bien si te hacemos algunas preguntas?
— para nada, adelante —respondí con la voz amable que yo solía tomar para todas las entrevistas o lo que sea.
— Hemos escuchado que tú relación con Ginés ha estado muy bien —asentí— incluso se especulaba de un embarazo debido a que no se te ve fuera últimamente —solté una risa.

Del espíritu Santo será, pensé.

— para nada, hemos estado bien y tranquilos sin bebés en camino. —me acomodé el cabello tras las orejas.
— ¿Y qué hay con la chica con la vimos a Ginés saliendo? —mi mente en ese momento de fue, sentí como si esta mujer delante de mi fuese enviada para romperme el corazón una y otra vez, nunca daba buenas noticias, siempre me enteraba de cosas malas.
— es solo una chica con la que se grabará el siguiente clip —dije seria aguantando mis ganas de llorar.

Mierda.

Contrato - Walls (🆃🅴🆁🅼🅸🅽🅰🅳🅰)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora