¿En Verdad Eres Tu?

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Estaba amaneciendo cuando volvimos a la isla con los demás, las cosas estaban más tranquilas, aunque desde que la sangre bajó por mi nariz he estado algo preocupada, se supone que eso no debería pasar.

Le contamos a Angg lo que sucedió, él estaba contento después de todo no matamos a nadie. Katara necesitaba confrontar al asesino de su madre, para dejar de proyectar su rabia en cada persona que hacía fuego control, me alegra que ya no odie a Zuko.

- Señorita Izumi tenemos que hablar.

- Príncipe Zuko - hice una reverencia - qué es lo que desea?

- Me explicarías eso de la sangre control? - lo miré extrañada - Cuándo esto termine lo más probable es que deba asumir el lugar de padre - dijo con un tono extraño, no se veía contento - y quisiera saber más sobre una técnica tan peligrosa.

- Verás, al parecer solo los maestros agua pueden hacer sangre control, moviendo el agua de tu sangre para controlar el cuerpo de su víctima - hice una pausa para apoyarme en una piedra - Me encargue de quitarle los poderes a sea anciana, aunque arriesgué peligrosamente mi vida.

- Qué pasó durante esa pelea? - estaba muy serio.

- Logré resistirme a su control - estaba muy sorprendido - pero forzar así mi cuerpo me hizo vomitar sangre, para que ella no me controlara.

- Ven acá - me tomó una mano y me apegó a su pecho - Sé que haces ese tipo de cosas para cuidar de quiénes te importan, te conozco lo suficientemente bien como para saberlo, pero tienes que dejar de forzar tu cuerpo así, si no paras, no vivirás mucho en este mundo y sé que lo que voy a decir sonará algo egoísta, por favor no lo mal interpretes - sonaba tan sincero- tardé mucho tiempo en entender que mi destino estaba amarrado al tuyo, no quiero que nos separemos otra vez.

- Está bien, tendré cuidado - dije para darle una lamida en la cara, el solo rió - te prometo que siempre estaré a tu lado.

- Ya terminaron su melosa charla? - preguntó Toph junto a nosotros - necesitamos ir a un lugar donde estemos menos expuestos, aquí no tardarán en encontrarnos.

- Toph tiene razón - está vez habló Suki - debemos encontrar a donde ir.

- Entonces a donde vamos? Acepto sugerencias. - dijo Angg animado.

Zuko y yo intercambiamos miradas cómplices y nos ofrecimos a guiar al grupo a un lugar sorpresa, Ozai nunca buscaría ahí, estaríamos seguros.

- En serio nos ocultaremos del señor del fuego en su casa de playa? - preguntó Toph incrédula.

- Mi padre no viene aquí desde que éramos una familia funcional - qué recuerdos de esta isla, siempre veníamos a ver amor entre dragones.

- Aquí estaremos seguros, pero de todas modos será mejor que nos pongamos nuestros disfraces - dije buscando mi ropa, aún tenía el vestido que robamos.

La isla Ember era un lugar mágico quizá nos ayude a ver dentro de nuestros corazones. Es increíble cómo cambian las cosas, hace algunos años todo era diferente, estábamos aquí Ursa, Iroh, Lu Ten, Ozai, Azula, Zuko y yo, jugando en la playa y riendo, como una familia normal.

- En que piensas? - preguntó Katara sacandome  de mis pensamientos.

- En una vida pasada - dije sonriendo tranquila - solía venir aquí con Zuko y su familia, a pasar el verano aquí.

- Suenan a lindos recuerdos, quieres volver a ese tiempo?

- No, estoy feliz con quiénes estoy ahora - ella me sonrió - aquellos tiempos aunque maravillosos, están cada vez más lejos en el pasado.

- CHICOS VENGAN TODOS - nos interrumpió Sokka, quien venía de la mano con Suki, todos llegaron preocupados, pensamos que nos habían descubierto - harán una obra sobre nosotros, tenemos que ir a verla.

- En serio nos llamaste asi por una obra, casi nos matas de un susto - Toph le golpeó el brazo.

- Vamos Será divertido - dijo sobandose.

- Sokka tiene razón deberíamos ir, nos servirá para relajarnos. - Angg sonaba emocionado.

Fuimos a ver la dichosa obra, en realidad era bastante graciosa, el encargado de investigar sobre nosotros no lo hizo tan mal. Recrearon muchas de nuestras aventuras, aunque esta obra planteaba que yo y Sokka teníamos algo más que una amistad.

Mientras estamos en el entretiempo de la obra Zuko comenzó a preguntar qué hay entre yo y Sokka.

- Zuko es obvio que el director dejó volar su imaginación respecto a mi relación con Sokka - en verdad de podrá celoso por algo así?

- Izumi tiene razón, es sólo una obra- trató de animarlo Angg , resulta que en la obra mi personaje y el de Sokka se habían jurado amor eterno en los Túneles de Ba Sing See.

- El director ni siquiera sabe de que lado tienes la cicatriz - le ánimo Katara - incluso personificó a Toph como hombre.

Esto ya estaba acabando con mi paciencia - Zuko entre yo y Sokka jamás hubo algo que no sea una amistad - dije exasperada - a demás tú estabas ese día en el túnel.

- Tienes razón - habló totalmente animado, qué le pasa? Su humor cambio muy rápido- fue la ves que Sokka intento besarte y tú lo rechazaste.

- Izumi te rechazo?- preguntó Toph riendo - como me hubiera gustado presenciar eso, el Olímpico rechazo de Sokka - todos reímos, menos Suki que me miraba con cara de te voy a matar aquí mismo, Já como si su mirada me intimidara.

Estábamos conversando cuando avisaron que el entretiempo de la obra había terminado, así que volvimos a entrar Suki venía detrás de mí.

- Sé que pretendes niña, no te hagas la santa - dijo Suki tómame de la muñeca sigilosamente. Pero que de demonios le pasa? Acaso quiere enfrentarme?

- Cuida tu lengua Suki - le sonreí de una manera aterradora - no soy tu enemiga y no quieres que lo sea - la miré para formar una llama cerca de su rostro en señal de advertencia.

Al terminar ese pequeño incidente me senté junto a Zuko y Katara para terminar de ver la obra. Resulta que al final de la obra todo morimos y el señor del fuego baila sobre nuestras tumbas, todo muy normal.

- Tienen razón chicos no hay que tomar encuenta esa obra, es malísima - dijo Zuko mientras saliamos del lugar todos reímos ante su comentario.

- Te lo dije Zuzu esa obra no se apega a la realidad - nos dimos un corto beso y volvimos a casa. Cuando llegamos comimos algo y fuimos a dormir.

Estaba soltando mi pelo cuando Zuko se paró apoyándose en el marco de la puerta, no me había dado cuenta de lo guapo que se veía, estaba sin polera podía ver su marcado cuerpo.

- Izumi deja de mirarme así - dijo cruzándose de brazos.

- Yo? Mejor tú deja de mirarme.

- No, creo que nunca te había visto con un vestido, debo aprovechar la vista - una risa espontánea salió de mi - te ves hermosa.

- No digas esas cosas que me pongo como un tomate - el rió mientras se acostaba - dormirás sin polera?

- Por supuesto, hace calor - dijo relajado - o te molesta?

- No es nada- negué con la cabeza, el frunció el ceño  y me miró a los ojos.

- Izu sabes que no te presionaré, te esperaré el tiempo que sea necesario porque entiendo todo lo que has pasado - le miré con una mezcla de emociones - ven, acuéstate.

- Gracias por entenderme - me abrazó y besó mi frente, en esa misma posición nos dormimos.