#39

930 98 18
                                    

Capítulo 39| No espero que nadie entienda lo que siento

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Capítulo 39| No espero que nadie entienda lo que siento.

Noah Lowell.

Me encuentro esperando pacientemente a Catalina estacionado frente de su casa. Mirando por la ventana el resto de nieve que caía de los árboles y lo acumulado que está a los lados de la acera.

Llevo aproximadamente diez minutos esperando a que Catalina se digne a salir de su casa. Odio esperar y esa es la maldita verdad, pero sí esperar significa que voy a poder estar con ella unos minutos, entonces esperare lo que sea necesario.

Luke me insistió en que viniera a buscar a su novia para llevarla a casa. Las veces anteriores que me lo había pedido daba cualquier excusa para no venir y recogerla, puede que le mienta a todo el mundo pero es imposible para mí no dejar de pensar en Catalina Russell cuando el mayor tiempo se la pasa en mi casa cuidando de mi hermano.

La relación entre notros dos ha mejorado bastante desde la última vez, charlamos más, salimos los tres a dar un paseo por la ciudad o llevamos a Luke a la playa donde se ha convertido su lugar favorito para apreciar el atardecer. Pero sí, me duele ver como ella lo mira con tanto amor y le regala ciento de sonrisas hermosas que me hubiese gustado ser yo quien la apreciara.

Pero entendí que el único modo de medir lo que yo sentía por ella fue cuando perdí lo poco que había logrado acercarme, si hubiera sabido que Catalina no iba a escogerme a mi hubiese disfrutado mucho más nuestro último beso.

<< La trataste como la mierda, ¿Cómo esperabas que te escogiera?>>

Y es por eso que personas como yo no merecen que le sucedan cosas bonitas. Y Catalina es algo que no se puede explicar con palabras o tal vez soy yo quien no encuentra las palabras para describir lo que siento por ella.

Mis ojos se dirigen a entrada principal, Catalina cierra la reja y se corre para subirse al Jeep. Ya a dentro se quita el gorro de lana y me mira con una sonrisa.

- Llevo quince minutos esperándote, Russell.

- Sé que tarde mucho pero valió la pena.- Me asegura.

Alcé una ceja.

- No lo creo.- Antes de que me ponerme en marcha ella estira su mano colocándola sobre mi brazo y vuelvo a mirarla.- ¿Se te ha olvidado algo?

Apartó su mano y saco de su bolso una caja del tamaño de su mano color plateado.

- Sé que ya han pasado tres meses desde navidad pero olvide darte tu regalo, Noah.- Extendió la cajita y yo la miré.

No me hagas esto, Russell.

- Catalina...

- Por favor, acéptalo.- Insistió, cogí la caja.- No es la gran cosa pero espero te guste.

Me deshago de la cinta azul y quitó la tapa, en su interior hay un cargador portátil universal personalizado y una cajetilla de cigarrillos de color negro con la primera letra de mi nombre y apellido.

Stay With Me.Where stories live. Discover now