Después de un trágico asesinato que vio Sakura; su vida cambió, durante un tiempo se ha mantenido en silencio por temor pero, ¿Puede cambiar? Vivir con alguien con quien jamás pensaste que vivirías, conocer nuevas cosas que jamás antes habías vivido...
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Sakura y sasuke seguían caminando los alrededores de la feria, la pelirosa iba en silencio observando cómo el Uchiha la perseguía, no podía decir ni una palabra porque había bastante gente al rededor, ya le molestaba demasiado la persecución que le estaban dando, freno su paso y volteo a mirarlo molesta.
—¿Te cansaste de caminar? Te informo que yo tengo los tickets para los juegos. —Reía mostrando los tickets. —Señálame a donde quieres ir y subiéremos juntos. J-U-N-T-O-S.
Sakura lo miro molesta dándole un empujo del cual no hizo más que reírse y reírse por todos los intentos fallidos de la chica.
—Sasuke-Kun, ¿Qué haces aquí hoy? —Ambos voltearon hacia la persona que hablaban, ninguno pudo poner una buena cara al ver a la pelirroja a unos cuantos pasos de ellos. —No me di cuenta de tu mala compañía, ¿quieres subir a un juego conmigo? —Lo tomó del brazo mirando a pelirosa muy mal
—Lo siento Karin, estoy en una cita con Sakura y ya quedamos en subir a la rueda de la fortuna, quizás algún otro día. —Soltó suavemente el agarre en que lo tenía la pelirroja. —Que te diviertas, Karin. Sakura, nos vamos —Tomó a la pelirosa de la mano y comenzó a caminar hacia la fila de la rueda de la fortuna.
Para su suerte no estaba tan llena así que subieron lo más pronto a una de las tantas cabinas mientras se iba llevando y dando vueltas por los aires.
—No tenías que decirle que estamos en una cita, ambos vinimos con amigos. —Dijo
—Nuestros amigos se perdieron y estamos solo nosotros, eso cuenta con una cita.
—Pues no me gusta mi cita. —Habló
—Solo distraerte viendo al rededor, tenemos una gran vista de toda la feria ya son dos vueltas.
Y tenía razón, la vista era magnífica no solo por cómo se veían todas las personas como hormigas sino los al rededores de donde estaba puesta la feria, a pesar de compartir el momento con el Uchiha, la pelirosa se encontraba extasiada por lo hermoso que era todo, el Uchiha solo la veía sonreír con la luz opaca de la luna viéndola con ternura.
—Si fueras más expresiva los demás notarían lo tierna que te ves.
—¿Me estas alagando? Si es así, gracias. Tú no te ves nada mal. Lo diré solo una vez. Sasuke Uchiha, eres apuesto. —Confesó
—Me agrada escucharte decirlo, aunque ya lo sabía. —Dijo con una sonrisa triunfante
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