Sólo dime si tu quieres...

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Alex la tomó en brazos y anclada con las piernas en su cintura y los brazos en el cuello para subirla a su cuarto y preparar la tina para ambas..

La morena después de dejar el agua corriendo y hechar cuanta cosa encontró para hacer espuma se va a la habitación, Piper como ya estaba desnuda, esperó pacientemente sentada en la cama, cuando la morena se empezó a sacar la ropa.

Piper : Alex... - la morena levantó la vista después de sacar sus zapatillas - puedo - dijo avergonzada.

Alex : Que cosa princesa - la miraba con duda.

Piper : Sacarte la ropa - dijo y miró los ojos verdes que tenía enfrente y se levantó de la cama  - pero sólo mírame la cara -  dijo cuando la morena se mordió el labio y bajaba la mirada al resto de su cuerpo.

Alex : Esta bien -  dijo levantando la vista y acercándose a la rubia.

Piper comienza por la camiseta, un poco torpe y demasiado tímida, pero ahí estaba su galletita para ayudarla, la rubia no podía dejar de mirar los cambios en la mirada de Alex, verde intenso y luego un verde oscuro brillante, para terminar por dar paso a un casi negro que dejó a la rubia sin habla, porque lograba ver su reflejo en los ojos de la morena, que a esta altura ya la veía con lujuria y con la lengua se mojaba el labio cada dos segundos.

Piper : Ok... Veamos que puedo hacer... camiseta fuera, ahora viene el brasier... Dios que vergüenza.... aguanta Chapman no seas cobarde, es Alex nada malo puede pasar - pensaba mientras llebaba sus manos despacio a la espalda de la morena para sacar el broche y por fin liberar los senos de la morena.

Alex : No tienes que hacerlo si no quie... - 

Piper : Shhhhh.... - la calló con un beso, mientras sus manos por fin soltaron el broche.

La rubia llevó los breteles hacia a delante y los dejó caer por los brazos, mientras seguían besándose, Alex trató de agarrar la cintura de Piper pero esta no se lo permitió y dijo que se quedara quieta o si no dormirian en cuartos separados.

La rubia se atrevió a bajar con besos por el cuello, besos castos, temerosos tenía tomadas las caderas de Alex y las manos le temblaban, bajó por entre los senos disfrutando del olor particular que tenía la morena, pero no se atrevió a probar los senos, quería ir de a poco, llegó al ombligo y quedó de rodillas, su cara ardía, estaba roja como un tomate, pero ya estaba ahí y no echaría pie atrás, comenzó por sacar el botón y bajar el cierre del jeans, todo lo que Piper hacia lo hacia con extremo cuidado, algo que además de calentar de sobremanera a Alex ya la estaba desesperando, pero se obligó a ser paciente y disfrutar al máximo todo, por que sería la primera vez de la mujer que amaba y ella necesitaba conectarse con su interior para lograr hacer el amor con cada fibra del cuerpo.

Cuando los jeans empezaron a bajar la morena suspiraba, la rubia le hubiese gustado verle la cara, pero se sentía cohibida aún, recordó lo que sintió cuando Alex le besó, lamió y mordió los muslos e hizo lo mismo para que Alex sintiera algo parecido.

Lo que Piper no tenía en cuenta era que Alex ya estaba más que prendida de sólo verla llegar al climax en la cocina y no necesitaba mucho más, en realidad estaba siendo una tortura para la morena sentir el aliento de la rubia cerca de su sexo, además de que cada vez que pensaba que sería el momento Piper hacia cualquier otra cosa menos llegar a ese lugar al cual no cualquiera tenía acceso.

Alex : Dios¡¡¡... Princesa - dijo cuando Piper lamió su ingle, trataba de buscar algo para afirmarse, por que las piernas se le debilitaban, pero estaban en el centro de la habitación y no había nada a su alrededor y cualquier movimiento podría sacar a la rubia de la burbuja y lo que menos quería la morena era sacarla de ese trance maravilloso que la hacía disfrutar más que nada a ella.

Gracias a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora