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Capítulo 32: Libro II: Comedia y tragedia

Capítulo 12:

Harry y Lockhart salieron de la chimenea cerca del Malfoy y dejaron que el elfo doméstico de aspecto abandonado usara su cepillo para desempolvar las cenizas de sus túnicas.

Con una punzada de culpa, Harry recordó su promesa de encontrar una manera de darles a los elfos domésticos la opción de ser libres que se había hecho a sí mismo hace mucho tiempo. "Después de que la escuela cierre", se prometió a sí mismo, y dejó que el elfo los guiara por la escalera de piedra hasta el salón de baile.

La habitación no podría haber sido más diferente a como era la última vez que Harry estuvo aquí. No había antorchas iluminando el pasillo, en cambio, la iluminación provenía de lo que parecían ser cientos de mariposas de varios colores que brillaban intensamente y revoloteaban cerca del nivel del techo. En lugar de serpentinas, del techo colgaban enredaderas decorativas, y la mayoría de los invitados se veían absolutamente ridículos, su atuendo formal chocaba con los accesorios con temas de animales que lucían.

Pero lo más notable es que muchas jaulas de vidrio grandes se alineaban en las paredes, llenas de criaturas de todos los tamaños y colores. Uno contenía un enorme kneazle y otro un montón de crup. Un grupo de escarbatos se movía inquieto dentro de uno, y un orangután se sentó masticando su manzana dentro de otro. Toda la habitación parecía un zoológico demasiado elegante.

Sin embargo, antes de que Harry pudiera ver bien todas las jaulas, vio a su anfitrión y se tensó. Lucius Malfoy se acercó a saludarlos.

"Sr. Potter. Sr. Lockhart. Me alegra que pueda asistir esta noche." El sutil, casi inaudible tono de respeto que mantuvo la voz del hombre cuando pronunció el nombre de Harry le confirmó a Harry que el Obliviate todavía sostenía al hombre y que estaba a salvo aquí por ahora.

"¡Lucius! Qué baile tan maravilloso has armado. Casi tan bueno como el Balón que una vez planeé para una colonia Veela en Francia. Cosas buenas, cosas buenas", dijo Lockhart mientras tomaba alegremente la mano del hombre y la estrechaba vigorosamente, antes vio algo y se animó como un suricato, "¿Es el ministro? Oh cielos. Perdóname, buen hombre, pero debo ir a saludarlo".

Mientras veían a Lockart agarrarse de su sombrero y correr hacia la multitud hacia el Ministro de Magia, Harry, forzando un tono amistoso, preguntó: "¿Conoce usted muy bien al Profesor Lockhart, Sr. Malfoy?"

El rostro de Lucius parecía atascado en una expresión de asombro y diversión, "Todo lo contrario. Nunca antes había conocido al hombre en persona. ¿Siempre es tan excitable?"

"Más o menos."

Lucius abandonó el tema del profesor de Defensa y se volvió hacia Harry. "Entonces, ¿cómo le ha ido, Sr. Potter? Un negocio terrible, con los estudiantes petrificados de izquierda a derecha. Debe ser muy difícil vivir en el castillo ahora".

"Lo he estado haciendo bien. Hay días malos, pero qué se puede hacer sino superarlos", dijo Harry, antes de preguntar, "Ha habido rumores sobre el cierre de la escuela ... bueno, supongo que ya no son rumores. . Uno sólo puede preguntarse cuánto durará el cierre. Usted está en la junta escolar, ¿no es así, Sr. Malfoy? Apuesto a que sabe cuánto durará ".

"Usted sobreestima mi alcance, Sr. Potter," dijo Lucius afablemente, "Soy simplemente un miembro de la junta. La decisión de cerrar la escuela fue tomada por el Ministerio".

"Oh, deje de ser humilde Sr. Malfoy," dijo Harry, poniendo una sonrisa maliciosa en su rostro, "Apuesto a que sabría si una mosca se posara sobre la persona equivocada en el Ministerio".

Lucius se rió entre dientes, "Eres pertinaz. He escuchado del departamento de Educación y los Aurores; te escuché ; que podría estar cerrado por unos meses. No lo sabrán exactamente hasta que entren y vean lo que hay que hacer. . "