capítulo 38

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Esa tarde, naruto guardó todas sus cosas en el baul y espero el momento para utilizar el hiraishin...

—es hora—murmuró. Abrió la jaula de Kurama—. Nos vemos allá

Cuando Kurama desapareció de su campo de visión, desapareció del orfanato en un rayo amarillo. Naruto apareció de pie en la sala de los señores Weasley, y tan rápido como apareció, sintió unos brazos rechonchos abrazarlo

—naruto, cielo ¡qué bien que estás aquí!—dijo una voz que reconoció como la señora Weasley—¿como has estado?, ¿has comido bien?

—si, señora Weasley—dijo naruto. La señora Weasley se separó de naruto. Rápidamente Ginny lo abrazó con fuerza y naruto con una pequeña sonrisa, le devolvió el abrazo

—¿como has estado?—le susurró al oído

—bien, te he extrañado

—yo también

Ginny se separó y Ron se acercó a naruto con una sonrisa de oreja a oreja. Se dieron un abrazo

—que bueno verte, naruto—dijo Fred Weasley, sonriendo

—fabuloso—dijo George

—señor Weasley—dijo naruto, dirigió su mirada al señor Weasley

—que alegría verte, naruto. Solo falta Harry y estaremos todos completos para los mundiales

—¿y Hermione?—pregunto naruto a Ron

—en el cuarto. No llego hace mucho

En ese momento, Hermione bajo corriendo por las escaleras, y le dio un fuerte abrazo

—¿como has estado?—le pregunto naruto, separándose del abrazo

—de maravilla. Estoy emocionada por el mundial de quidditch. ¿Y tu?

Naruto asintió. De hecho, todos parecían emocionados por el mundial. La noche pasó entre risas hasta altas horas de la noche y poco a poco cada uno se fueron retirando a sus habitaciones

Naruto, Hermione, Ron y Ginny (esta última dormida y con la cabeza apoyada en el hombro de naruto) eran los únicos que quedaban en la sala de los Weasley

Naruto espero a que todos se fueran para hablarles a Ron y a Hermione sobre la cicatriz y el terrible dolor que sufrió en la noche anterior

—¿crees...crees que Quien-ustedes-saben estaba cerca?—preguntó Ron, más pálido de lo normal

—no seas tonto, Ron—dijo Hermione, aunque en su tono se notaba inseguridad —. Quien-tu-sabes no andaría en una ciudad muggle

—entonces... ¿porqué?

—no lo sé, Ron—dijo naruto

—¿por que no le escribes a Dumbledore?—sugirió Hermione, tal como naruto había imaginado

—le he escrito a Sirius...—dijo en voz baja— pero aquí, y en este momento, no podemos hablar sobre Sirius. Alguien puede bajar en cualquier momento...

Ron y Hermione asintieron

—¿que hacemos, la despertamos?—preguntó Ron señalando a Ginny

—la llevaré a su cuarto—dijo naruto, cogiendo como a una princesa a Ginny

Naruto, cargando a Ginny, Ron y Hermione subieron las escaleras. Naruto entró a la habitación de Ginny con Hermione detrás de él, dejando pasar a Ron a su cuarto

Naruto se acerco a la cama de Ginny tratando de evitar ver algo indeseado en la habitación. Pero cuando trato de dejarla en la cama, Ginny lo agarró del cuello y lo jalo para dentro

El HerederoWhere stories live. Discover now