Destinados por el mismo camino, cruzados por el odio y el amor entre ambas manadas, existiendo un pasado oculto y oscuro que los unirá para siempre, en un largo sendero hasta descubrir su verdadera identidad, siendo un alfa y un omega, uno de ellos...
La atención fortalecía cada vez al semental, logrando que el amor creciera más, siendo el omega su pasión definitiva.
El amor de ambos lobos, los llevó a un extremo de su vida, donde seguían acomodando sus vidas juntos, cuando nadie pudiera romper ese lazo de amor 💜que sentían ambos licantropos.
Sus ojos azules brillaban como el cielo azul claro, cada vez que era correspondido por el Omega tierno y dulce.
Sus labios mostró en seguirse llenando de su aroma que impecnaba todo su ser.
El tiempo pasó al ser un día importante para el gran lider.
Su hijo ya tenía el tiempo suficiente de haber crecido, para comprender que llegaría la hora de saber que sería el futuro lider de la manada, cuando sus padres no estuvieran en este mundo.
El Alfa aún con intrépido, demostro que su cachorrito tenía el suficiente carácter para lograrlo.
Era noble y audas, salvaje he inteligente, cualidades que sólo un Alfa podía heredar.
Las enseñanzas de sus padres estaban dando éxito, logrando que su llegada al ser nombrado como el príncipe Alfa, diera pasó a seguir completando su felicidad.
Por un recorrido al mundo en el que lo rodeaba, Jin como un buen padre saliendo junto con su hijo, por la pradera, explicándole el papel que ejercería en un futuro...
—Kim Seung, hoy te coronaras como el príncipe lobo, se que aún es muy pronto para que pienses en tu futuro, pero es muy importante que lo sepas, cuando llegue la hora ejerceras tu propia manada, si no estoy para ese entonces, tomaras mi lugar, se que no es fácil para un Alfa, lograr ser un buen líder, pero con los años lo iras comprendiendo—preocupado el cachorro, hizo un puchero invadiendolo la duda, de solo pensar si algún día le faltaría el amor de sus dos padres.
—Papi, eso nunca pasará, porque un Alfa, promete siempre estar a lado de su familia—imponente ante las palabras positivas de su hijo, le respondió...
—No siempre las cosas salen como uno quiere, yo cuando era un cachorro como tu.... Creía que mi padre siempre estaría a mi lado y no fue así, la muerte se lo llevo muy pronto, mientras tanto disfrutaré de ti, dándote todo mi amor y mi apoyo para que sigas el curso de la vida, ya estás listo para conventirte en un licantropo por eso te traje aquí, en un sitio tranquilo, donde nadie pueda juzgarte, yo te ayudaré a que te concentres, ¡mi pequeño lobito!—el cachorro brincando sobre el pasto, le dio órdenes su padre, al mantenerse consentrado....
—Ahora, cierra tus ojos Seung, consentrate ante tu transformación, eres un lobo salvaje, pero a la vez, un chico humano, quiero conocerte, quiero ver esos ojos, con apariencia de humano—tomando su pata, el cachorro tomo un respiro, llegando la luz llego a su silueta, convirtiendose en licantro.
Su cabello color castaño oscuro quebrado fue su cabello.
Sus ojos oscuros y tiernos miró a su padre.
Su cuerpecito aún pequeño, estando de rodillas.
Con su mochilita por detras de su espalda, tomando un objeto en sus manos.
La belleza de ese pequeño, se reflejaba en el Alfa y el Omega.
Haciendo que sus rasgos, fueran adorables.
Sus cachetitos se notarán rosados, haciendo un puñero con gran ternura.
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