My Little Princess [Dramione]

Capítulo 1

En un reino muy lejano, vive una encantadora, hermosa e inteligente princesa. Por ser muy carismática, una malvada bruja la maldijo.

"A partir de ahora, ninguno de los que te guste te corresponderá"

¡Tristemente, la maldición realmente funcionó!

Aunque esta princesa era generosa, hermosa e inteligente, nadie que le gustara le correspondería

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Un hombre vestido con un traje color azul grisáceo entró rápidamente a una espaciosa habitación pintada de gris con blanco y con unas pequeñas partes decoradas en rosado Dicho cuarto tenía varias lámparas adornándolo. En una cama estilo princesa, de color blanco, se encontraba una hermosa joven castaña durmiendo plácidamente.

— ¡Señorita! ¡Señorita! Su madre está a punto de llegar.

La castaña dio una pequeña pirueta y quedó sentada en la cama — ¡Oh, no! ¡Rápido, ayúdenme a cambiarme! — exclamó y se levantó rápidamente para dirigirse hacia su tocador.

— ¡Ayuden a la señorita a cambiarse de ropa! — en ese instante entraron a la habitación seis trabajadores domésticos en dos en dos, los cuales sostenían vestidos, bolsas y zapatos.

— ¡Rápido! Dense prisa y denme ropa — habló la chica mientras trataba de maquillarse rápidamente con su polvo facial.

Ella era Hermione Granger, la única heredera del grupo Dolly. A ojos de los extranjeros, su familia tenía riquezas más allá de lo creíble. A la edad en la que la mayoría de las niñas juegan con muñecas Barbie, sus regalos de cumpleaños consistían en bolsos y joyería. Cada vez que sale, hay un chofer que la lleva. Y en su casa, hay doncellas que le sirven.

Nunca sabiendo realmente qué tareas realizaba, sacaba notas que eran pasables. Pero cuando ella creía pintar malamente, recibía las adulaciones de todos. Y a la edad de diez años, accidentalmente abrió una galería de arte. Desde entonces, se ha convertido en una hermosa pintora. Algunas veces, cosas que publicaba al azar en internet, se volvían populares. Parecía que la única forma de describir su vida era "Victoria".

Una vez ya arreglada, la chica se encontraba sentada en el sillón de su habitación mientras disfrutaba su té de manzanilla. De repente, una mujer de cabello negro entró a su habitación.

— Hija — la mujer saludó entusiasmada a la chica y tomó asiento a su lado.

— Mamá — respondió y dejó su taza rápidamente encima de su mesita — mamá. ¿Por qué estás aquí?

— Está bien, lo sé, lo sé. Hay té — ignoró su pregunta. Se inclinó un poco para agarrar una taza y se sirvió la bebida.

— ¿Qué té? — la sujetó del brazo — ¿Por qué no me lo dijiste primero? Ella regresará pronto.

— Espera, espera. Déjame terminar esto.

— ¿No te dije que, si no es importante, no vinieras? — ambas voltearon al escuchar otra voz femenina y se incorporaron rápidamente, mostrando un semblante de preocupación y miedo.

Siendo una verdadera princesa, Hermione Granger tenía un pequeño secreto. Ella tenía dos madres: Katherine Henderson y Jean Granger (de apellido de soltera Wilkins).

Katherine Henderson era una mujer de cabello castaño oscuro, ojos verdes y facciones finas. A falta de dinero y para darle una mejor vida a su hija, tuvo que hacer el sacrificio de dejarla con la mujer del hombre que amó.