Gun Obsessed

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Xiao Zhan era la mejor medicina para Wang Yibo, después del episodio traumático que tuvieron que pasar juntos, se habían logrado recuperar con su pequeño Wang Zhao, a sus tres meses de edad ya era un niño sano apesar de nacer prematuramente, los meses pasaron algo rápidos pero para Yibo no era así en las noches aún tenía pesadillas donde podía ver el rostro de Yan Yi inyectandolo para poder abusar de él. Con ayuda de su omega ha podido pasarlo de a poco, ahora que su hijo por fin podría estar con ellos en su habitación era una distracción por las noches, cuando lloraba por comida o por que se había hecho del baño, interrumpía sus pesadillas y era un alivio. Era el padre más preocupado, cubría muy bien a Zhan por las noches, ambos siendo padres activos en el desarrollo de su hijo.

Pero claro que no había descuidado la mafia, ahora tenía que viajar junto con sus hermanos a Colombia por negocios, si fuese cualquier negocio en Asia enviaría a alguien de confianza como Ji Li, pero tiene que ir personalmente dos semanas fuera sin su familia, sería demasiado doloroso pero aún tenía que trabajar para darle los lujos que su familia merece.

— Estaremos bien amor, se los escondites de armas, bóvedas secretas y rutas de escape— repetía el ahora peli-blanco, mientras cargaba a el pequeño Zhao— deberías preocuparte por ti, igual nos dejaste con tanta seguridad que dudo que alguien pase cinco metros sin que alguien lo note.

Pero el mayor no iba a dejar que suceda un ataque nuevamente, últimamente tenían muchos ataques que ninguna otra mafia se había atrevido a hacer, primero en donde su esposo quedó en coma, segunda donde revelaron su relación haciendo que su identidad y su omega estuvieran en peligro y por último donde el había sido abusado y su esposo casi muere en el parto de su hijo. Él no iba a escatimar en la seguridad de su familia, aún investigaban si había infiltrados o alguien quien quisiese hacer daño a los Wang, que de pronto tuvieran ataque tras ataque no era normal.

— Se que puedes, tan tierno por fuera pero un mafioso por dentro— río el castaño— pero no es eso es solo que aún no encuentro a todos los responsables de todos los ataques, no estaré tranquilo hasta que estén más que muertos.

— Menos mal esa perra está muerta, pero anda entre más te despida menos querrás irte, te amo— se acercó a darle un beso lleno de amor— ZhaoZhao y yo estaremos esperando por ti.

El menor despidió a su esposo y regresó con Mark a que sus hijos durmiesen juntos, aún eran pequeños pero ambos en la cuna parecían ayudarse a dormir mutuamente.

Al arribar a Colombia sintió un mal presentimiento en su pecho, algo le decía que algo iba a ir mal por lo que se puso alerta, alertó a sus hermanos y a su gente, no era de más ser más prevenidos, este no era su territorio después de todo.

Cuando llegó al punto donde se iban a reunir, no encontraron al jefe, Ricardo iba a preguntar cuando un disparo le atravesó el brazo. Yibo de inmediato lo sacó a un lugar seguro, era el guardia favorito de su esposo, no lo dejaría morir. Más disparos se escucharon en el lugar, los guardias los cubrían en lo que intentaban llegar a la camioneta, con suerte salieron de ese lugar llegaron al aeropuerto clandestino donde otra emboscada los esperaba.
Yibo arto de esto decidió dejar a Ricardo a cargo de otro guardia, sacó su arma de oro empezando a disparar, el lado contrario cayó rápido con su llegada, los pocos que quedaron fueron apresados por su gente.