Una semana sin Annie y Harry

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Agosto, 2013

Viernes

-¿Estás seguro de esto? -preguntó Annie mordiéndose el labio, mirando a Teddy.

-Sí, mamá. Estoy seguro.

Debido a su décimo aniversario, Harry les había conseguido un viaje a Estados Unidos, más concretamente a la playa, ya que Annie ha dicho que siempre tuvo la ilusión de ir a California. Y bueno, Harry es Harry, y de alguna forma u otra siempre consigue lo que a Annie le ilusione.

-Harry... no creo que esto sea buena idea -murmuró Annie, preocupada.

Teddy suspiró. Su madre al principio, había estado muy emocionada por el viaje que harían de manera muggle, pero luego, había comenzado la preocupación. No quería dejar a los niños a solas por una semana.

Y ahí estaban, con las maletas hechas, en la puerta principal, con un taxi esperando por ellos afuera para ir al aeropuerto. Teddy no recuerda cuántas veces su madre ha cambiado de opinión.

-Mamá, estaremos bien -dijo Teddy colocando sus manos en los hombros de Annie. Podía escuchas tras él los murmullos de Leo, Lily y James, con Alex vigilándolos- Alex se quedará conmigo toda la semana y vigilaremos a mis hermanos. El abuelo Sirius vendrá todos los días por la tarde. El tío Draco y la tía Astoria vendrán el martes y jueves. Mi tía Hermione vendrá mañana y el lunes. El tío Ron vendrá el domingo y miércoles y la tía Ginny vendrá el viernes. Además, la abuela Molly vendrá todos los días por el medio día.

Annie suspiró.

-Annie amor.. -dijo Harry mirando la hora.

-No deberías de cuidar a los niños tú solo, tienes veintiuno -murmuró Annie. Teddy le sonrió.

-Ustedes cuidaron de mí en medio de una guerra con diecisiete años. Es mi agradecimiento por haberme dado una familia.

Annie parecía al borde de las lágrimas. Asintió.

-Bien. De acuerdo -inspiró hondo- en la cocina te dejé todo lo que tus hermanos pueden comer, sus vitaminas y qué hacer en caso de que pase algo. También los números de teléfono por si no los tienes en tu celular y..

-Mamá, está bien. Lo sé.

Annie volvió a asentir.

-Bien. De acuerdo.

La castaña abrazó a Teddy.

-Cuídense mucho.

Harry abrazó a Teddy.

-Haz que mamá lo disfrute -dijo el menor- lo merece. Ambos lo hacen.

Harry le sonrió.

-Lo haremos. Prometemos llevarlos a la próxima.

James, Lily y Leo se abalanzaron sobre Annie, abrazándola fuertemente.

-¡Nos traes algo mamá!

-¡Papá! ¿Me puedes traer arena de California?

-¡Una tabla de surf! Parecen cool.

Después de una ronda de abrazos y besos a sus hijos por parte de Annie y Harry, salieron de la casa en dirección al taxi, donde subieron las maletas. Con Annie a punto de echarse a llorar por alejarse de sus hijos por tanto tiempo, y un Harry igualmente un poco renuente, se alejaron por la calle mientras los demás sacudían sus manos.

-De acuerdo, pequeños demonios -dijo Teddy cerrando la puerta y girándose. Lily, a pesar de tener ya siete años, alzó sus brazos. Teddy la tomó en los suyos- ¿qué quieren hacer?

Annie's extras: Bright yearsWhere stories live. Discover now