Eres mía, Sakura.

Capitulo 1

Nunca me había sentido tan más enfermo desde que mi atención era solo y exclusivamente en el único estudiante femenino cuyo nombre hace honor no solo a su color de cabello sino también al carisma que tiene; Sakura Haruno, la única niña que ha logrado llamar mi atención no por su talento sino por su belleza y dedicación.
Lo que al principio eran solo inocentes clases privadas para aumentar más su poder ya que me la pasaba mayor parte del tiempo con los muchachos, se convirtió en nuestros pequeños momentos juntos.

—Kakashi-sensei ¿Usted cree que algún día podré ser igual de fuerte que Naruto y Sasuke?–me miro con aquellos ojitos verdes que brillaban por las lágrimas que amenazaban con salir provocando una incomodidad en mi corazón.— Siento que solo soy una molestia para el equipo.

Como una adolescente de 16 años escondió su cabeza entre sus piernas que abrazaba con fuerza como si se estuviera protegiendo de todo el mundo incluso de mí.

—Sakura eres el miembro más importante para el equipo, no tendrás una habilidad especial como Naruto o Sasuke pero eso es lo que te hace más valiosa que ellos porque estás avanzando con tus propias habilidades.–acaricie su cabeza dándole confianza.

Ella me miro sorprendida con la boca levemente abierta y un lindo sonrojo adornaba sus mejillas, me regaló una sonrisa antes de aventarse hacia a mi para abrazarme por el cuello pegando mucho más nuestros cuerpos; yo me quedé estático sin saber que hacer mis manos quemaban por querer sujetar su cintura para que no se fuera de mi lado. Su perfume a vainilla inundó mis fosas nasales pese a que tenía la máscara cubriendo mi cara.

—¿Sakura?–la llame con duda pasando saliva con fuerza, una parte de mi anatomía amenazaba con levantarse sino me la quitaba de encima. Con mucha duda la sujete de los hombros para alejarla de mi con cuidado antes de que una desgracia ocurriera.— Creo que es todo por hoy.

—Por favor Kakashi-sensei no me aleje de usted.–su cabello tapaba su rostro que no me permitía saber que emoción estaba sintiendo.

Mi corazón latio acelerado por lo que había dicho que temia que lo estuviera escuchando.

—Me siento confundida Kakashi.– se alejo un poco de mi pero aún estábamos a centímetros de tocarnos.—Cuando estoy con Sasuke-kun siempre estoy al pendiente de él por miedo a que se lastime pero él siempre me está alejando con Naruto, bueno, lo trate mal la primera vez que lo conocí y fui muy inmadura con él que no merezco que me llame su amiga.

Decidí ignorar el echo que no me dijera sensei ni tampoco quise prestarle atención a este amargo sabor de boca que tenía al escucharla mencionar al Uchiha quien es otro de mis obstáculos por los cuales no debo de acercarme más a Sakura.

—Pero cuando estoy con usted me siento yo misma que no tengo miedo de fracasar  porque se que nunca me juzgados en cambio me apoyaría a mejorar.–puso sus manos en mi rostro para acercarlo más al suyo. Mi cuerpo se volvió a tensar y mis ojos se abrieron de sorpresa al leer sus intenciones aún así no hice nada por detenerla.— Es por eso que quiero agradecerle dándole... Mi primer beso.

Su sonrojo se esparció por todo su rostro haciéndola ver adorable, estaría así de rojo sino fuera por la máscara.

—Sakura no desperdicies algo tan valioso como tú primer beso en alguien como yo.–la mire con seriedad pero mi corazón estaba roto ante tal verdad.—Alguien más jóven merece probar esos labios y alguien digno de tu amor.

Intenté levantarme pero ella me sujeto de los hombros para volverme a sentar y para asegurarse que no me movería se sentó sobre mis piernas complicando más la situación.

—¿Y usted quien es para decirme con quién debo besarme?– inflo sus mejillas molesta.— Si yo quiero entregarle mi primer beso a usted es mi problema y no debo porque darle explicaciones a nadie.

Estaba sorprendido por aquella respuesta que me quedé mudo viéndola, solo necesitaba un impulso más y mandaría todo a la chingada para tomar a Sakura.

—Sakura.– dije su nombre con seriedad para que vea bien la situación en la que estábamos. Ella me miro sorprendida quizás porque no se esperaba que usará ese tono.—¿Estás conciente en la posición que estamos? Antes de todo soy un hombre y mi cuerpo reacciona a este tipo de situaciones que una adolescente de 16 años no comprende aún.

Quizás fui muy duro con ella porque se había alejado un poco más pero seguía sentada sobre mis piernas cuando crei que se iba a levantar comenzó a moverse de manera intencional sobre mi miembro poniéndome duro, sentía su húmeda intimidad frotarse contra mi sacando suspiros.

—Ah... Kakashi tendré 16 años pero le recuerdo que estoy estudiando con Tsunade para ser un ninja médico así que se todo lo relacionado a las relaciones sexuales y a la anatomía del hombre.

Estaba a dos palabras de mandar todo por la borda, solo dos palabras ¿Dónde había quedado mi pequeña de 13 años que aún no sabía utilizar un kunai? Ahora me dice que conoce la anatomía del hombre ¿Que le pone a estudiar Tsunade? Más le vale que no esté llevando a Sakura a culb's nocturnos para enseñarle el cuerpo de uno.

—Aun así Sakura soy 10 años mayor que tu y soy tu maestro.

—La edad es solo un número y si, es mi maestro pero ¿Usted también lo desea, no es así?

Allí estaba lo que necesitaba antes de bajarme la máscara y besarla con pasión metiendo mi lengua en su boca iniciando una batalla con la suya; paso sus brazos alrededor de mi cuello acercándose más a mí así que la sujete de la cintura frotando nuestros cuerpos escuchándola gemir. Aquellos dulces gemidos me estaban volviendo locos que no era conciente en el lugar donde estábamos yo como quiera bese su cuello dejando rastros de saliva hasta casi por llegar a sus senos, su cuerpo estaba doblado hacia atrás poniéndome los en la cara una clara invitación para que los atienda. Sobre la tela divisé el pezón que se alzaba erguido y lo mordí despacio para después succionar.

—Aaahh... Kakashi... Aquí no.–estiraba mis cabellos para alejarme de ella cosa que será imposible ahora que ignoro todas mis advertencias.

Una vez que deje la tela húmeda me di cuenta que estábamos muy expuestos en el campo de entrenamiento.

—¿Tus padres están en la casa?–mis manos no se quedaban quietas acariciándola por todas partes.

—No, tardarán una semana en regresar.–sus ojos brillaron de intensidad al saber lo que vendría a continuación que teníamos una casa sola.

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Porque ustedes lo pidieron!!! Una nueva historia Kakasaku ❤️

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