promise me | tskym.

Tres.

"¿Quién te dio esa lámpara?" Preguntó Yamaguchi.

Hoy, Tsukishima no se encontraba usando su laptop. Estaba descansando mientras que Yamaguchi estaba ahí. Sus ojos estaban entrecerrados y su piel estaba mucho más pálida de lo usual. En realidad, Yamaguchi iba a irse de la habitación luego de verlo en ese estado, pero Tsukishima insistió en que se quedara, entonces, Yamaguchi se sentó a su lado y empezó a bocetar algo. Música de la playlist de Yamaguchi (y Tsukishima) sonaba tranquilamente alrededor de la habitación.

La atención de Yamaguchi se había centrado en la lámpara de dinosaurio sobre el escritorio de Tsukishima. Ya la había visto la primera vez que había entrado por accidente, pero nunca se preguntó el porqué Tsukishima tenía una lámpara inusualmente tierna.

"¿Por qué?" Resopló. "¿Vas a dibujarla?"

"¡Quizás!" Yamaguchi bufó. Se dio la vuelta para mirar la lámpara en vez de a Tsukishima. "De todas maneras, apuesto a que sería una mejor referencia que tú."

"Grosero." Se burló de él. "Y nadie me compró ésa lámpara. Yo la compré para mí."

Yamaguchi se volteó tan rápido que casi le dio un tirón. "Qué."

Intentó recrear la imagen mental de Tsukishima en la tienda tomándolo y metiéndolo en su bolsa de compras. Su cerebro comenzó a fallar.

"¿Por qué estás tan sorprendido? Me gustan los dinosaurios."

"Te gustan- Te-" Yamaguchi farfulló. Tsukishima frunció el ceño.

"Cállate. La paleontología es genial. Si no tuviéramos fósiles no sabríamos cómo las especies que existieron en la Tierra evolucionaron y se adaptaron- ¿Podrías dejar de reírte?"

Tsukishima lanzó una almohada a Yamaguchi, quien seguía carcajeando.

"Por Dios. Eres un nerd de los dinosaurios."

"No lo soy."

"Probablemente eras de esos chicos que llevaban fósiles a la escuela para exhibirlos."

Tsukishima abrió su boca, quizás para refutar, pero la cerró. "Diría que estás equivocado, pero tengo una mochila de fósiles e impresiones por aquí."

"Por Dios, debes mostrármela en este preciso momento."

"En realidad, no creo que deba."

Yamaguchi se quedó observando fijamente a Tsukishima con ojos suplicantes. Luego de un minuto, Tsukishima suspiró y trató de agacharse para alcanzar algo debajo de su cama.

"Oh, no deberías. Ya te la alcanzo." Yamaguchi metió la mano debajo de la cama y sacó una bolsa. Le dio la bolsa a Tsukishima, quien colocó algunos fósiles en el acolchado, junto con un par de fotografías.

"Bueno," señaló a la pantalla, "es esto."

"¡Genial!" Yamaguchi exclamó. Tomó uno y pasó la mano por el molde. "Entonces, ¿Qué son todos ellos?"

Tsukishima suspiró. "¿Quieres la versión larga o la corta?"

Yamaguchi se encogió de hombros. "La larga. Tengo tiempo."

"Ok, pero tu preguntaste por esto. Recuérdalo." Tsukishima inhaló antes de lanzarse hacia una perorata increíblemente detallada sobre tipos de fósiles, cómo hacerlos, dónde se encontraban, cómo se ponían juntos y un montón de cosas más que Yamaguchi no pudo descifrar aunque intentara. Parpadeó sin idea mientras Tsukishima divagaba sobre similitudes fósiles entre continentes y cómo eso probaba que la Tierra no era plana o lo que sea. En vez de intentar de decodificar a Tsukishima, tomó su libreta. Quizás podría plasmar en el papel su sonrisa entusiasta.

"¿Sabes? Creo que esta exposición que se inaugurará el próximo año, tratará sobre dinosaurios, fósiles y todo ese tipo de cosas. Lo amarás," Yamaguchi habló distraídamente mientras sombreaba una pequeña parte del cabello de Tsukishima.

Tsukishima se congeló y miró a Yamaguchi, quien seguía sombreando. Yamaguchi finalmente notó el silencio y miró hacia arriba. Tragó saliva. "Era un pensamiento. Lo siento, Tsukki."

Tsukishima se relajó, pero negó con la cabeza. "Eso es todo lo que tengo sobre fósiles por hoy," murmuró y comenzó a guardar los fósiles. Yamaguchi quería partir el lápiz a la mitad.

Estúpido Yamaguchi. ¿Qué estaba mal con él? Tsukishima le dijo el primer día que se conocieron que no quería salir nunca.

Pero parte de su cerebro todavía lo molestaba por eso. ¿Por qué estaba tan reacio a la idea de salir? ¿Era por algo puramente médico? ¿O era alguien cínico? Recordaba lo que Tsukishima había dicho, que no había punto alguno de hacerlo. De todas maneras, estaba muriendo. Tsukishima veía de una manera fría y distante al mundo. Pensaba que no encajaba en él, y Yamaguchi odiaba eso.

"Eso sería agradable," Tsukishima habló suavemente, justo antes de que Yamaguchi empezara a juntar sus cosas para irse a casa.

"¿Hm? ¿Qué?"

"Dije que, eso sería agradable. Visitar el museo. Nunca lo haría, pero sería agradable."

Bueno, pensó Yamaguchi con una amplia sonrisa mientras balanceaba su bolso sobre su hombro.