promise me | tskym.

Seis.

Yamaguchi se arrepentía de haberle introducido ese estúpido juego a Tsukishima.

"Tsukki. No hemos hablado desde que llegué aquí."

"Cállate, estoy intentando pasar este nivel." Sus ojos estaban pegados a la pantalla. Aparentemente, estaba en una especie de batalla épica con un aterrador y semilíquido píxel, y seguía muriendo en el camino. Yamaguchi se lo había mostrado solamente porque Kenma lo había estado jugando en el campamento de entrenamiento un par de días atrás. Estaba de visita el último día junto con un par de otros graduados, pero finalmente se había retirado a un rincón con sus videojuegos como de costumbre. Yamaguchi decidió unirse para ver qué era lo que mantenía tan ensimismado a Kenma. Lo disfrutaba un montón, por lo que Yamaguchi asumió que a Tsukishima podría interesarle también. De todas maneras, le gustaba mucho jugar RPGs. Lo que no sabía era que Tsukishima entraba en trances similares a los de Kenma mientras jugaba. Podía ser tierno a veces, mas luego de un rato solo se volvió frustrante.

"¿Y? No es mi culpa que no puedas pasar de nivel. Quiero contarte sobre este idiota del campamento de entrenamiento."

"Sigo escuchando," Murmuró. "Puedes continuar." Sus ojos ni siquiera se habían alejado de la pantalla. Yamaguchi, cual niño pequeño, le sacó la lengua y buscó su libreta. Decidió tomarse un descanso del dibujo principal y bocetó una pequeña versión de Tsukishima en el estilo del videojuego.

"¿Qué opinas?" Tsukishima y él estaban sentados al lado del otro sobre la cama, las piernas de Kei estaban cruzadas y las de Yamaguchi extendidas, como las de un gato. Se volteó un poco para mostrarle a Tsukishima su dibujo.

"¿Terminaste el dibujo?" Los ojos de Tsukishima finalmente se alejaron de la pantalla. Yamaguchi retiró su libreta y se sonrojó.

"No, aún sigo trabajando en ello. Solamente hice este pequeño boceto." Le extendió la libreta y en el rostro de Tsukishima, una pequeña sonrisa se asomó

"Es bonito. De hecho, eres muy bueno en esto."

"¡Hey!" Yamaguchi le arrebató la libreta con un bufido de indignación. "¿Qué se supone que significa eso?"

"Nada, solo que nunca vi uno de tus dibujos. Te tomas años para terminarlos."

Yamaguchi se apartó de él para meter su libreta en su bolso. "Bueno, el arte lleva tiempo. Se paciente."

"Pasaron meses, Yamaguchi."

"Paciencia. No entrarás a la Universidad de Artes sin un poco de paciencia."

Tsukishima lo ignoró y continuó jugando su juego, Yamaguchi había estado entusiasmado por ser aceptado en la Universidad de Artes durante una semana. Yamaguchi se tiró hacia atrás y dejó que su cabeza se hundiera en la rígida almohada de hospital. Tsukishima se veía aún más alto desde ahí abajo. Se veía un poco más pálido y delgado cuando lo vio, a lo que Tsukishima aseguró que estaba bien, no le había pasado nada, solo era un efecto secundario de una medicina. Las bolsas debajo de sus ojos se habían hecho aún más profundas, por lo que Yamaguchi se preguntaba cuanto había dormido estos días.

"Quizás te estaré visitando menos en la semana que viene."

Eso llamó la atención de Tsukishima. Pausó el juego y se volteó para mirar a Yamaguchi. "¿Por qué?"

"Tendremos un partido. Si ganamos, iremos a las nacionales. El equipo tiene que practicar más."

"Oh." Tsukishima pareció molesto por una fracción de segundo antes de relajarse de nuevo. "¿Cuándo es el partido?"

"En una semana. Estaremos jugando en el Gimnasio de Sendai, contra Shiratorizawa. Será brutal." Suspiró y estiró la cabeza hacia arriba para mirar al techo. "¿Podrías venir?"