Capítulo 9.

982 141 29
                                    

—¿Cómo fue tu primer entrenamiento? —Me abordó por la noche en el pasillo Jean, colocando un brazo sobre mi hombro para que no me marchase.

—Depende de lo que consideres bien. No tuve que aguantar a Levi, pero acabé perdida de mierda de caballo y mal olor.

Al menos ahora ya podía oler bien después de ducharme apropiadamente. Jean soltó unas carcajadas y me miró.

—Es que las cosas similares se atraen.

—Tú sí que eres mierda —Lo pateé. ¿Había algo que me produjese más satisfacción que darle una patada a Jean cuando se pasaba de listo? —. Mañana tengo que volver a entrenar a las 6 —Suspiré.

—¿Qué vas a hacer?

—No me lo ha dicho, pero espero que no sea limpiar más. Parece que vamos a estar entrenando resistencia. Espero que al menos mañana me dejen entrenar con vosotros con el equipo de maniobras.

—¿Por qué estás entrenando con Levi? ¿Acaso ocultas algún poder que no sé? —Arqueó una ceja.

—No —Alargué la o—. Simplemente parece que lo hice muy bien en Trost y quieren entrenarme mejor.

—Al final vas a llegar al nivel de Mikasa a ese ritmo.

—Nadie puede superar a Mikasa —Declaré.

Aquella noche mis amigas decidieron que era mejor un interrogatorio sobre el capitán que irnos a dormir. Al menos, todas menos Ymir.

—¿Ha sido muy estricto? —Preguntó Krista.

—¿Da tanto miedo como parece? —Inquirió Sasha.

—A mí me parece temible... —Murmuró Celia.

No tenía ganas de responder a ninguna pregunta en ese momento porque me dolían todos los músculos del cuerpo y en mi mente todavía reflotaba el olor de las cuadras durante horas. Casi podía escuchar todavía a los caballos relinchar casi como si se rieran de mi.

—¿Estáis interesadas acaso en el capitán? —Les pregunté. La verdad que tanta pregunta sobre él era algo raro. Ninguna me miró, menos Ymir y Mikasa, que negó rápidamente con asco. Bueno, Mikasa es que directamente lo odiaba todavía por lo que le hizo a Eren en el juicio. Ymir ni siquiera estaba pendiente de la conversación y se había echado la almohada a la cara para acallar nuestras voces.

—No se puede negar que es el hombre más guapo de aquí, pero ni de broma estaría tan loca como para que me guste. ¿Tiene corazón? Es la pregunta —Dijo Sasha.

Pensé que hasta este momento no le había visto una sola buena actitud a Levi que mereciese ser recordaba, así que contesté:

—No mucho.

La conversación derivó hacia temas de los que estaba muy cansada para hablar y me di la vuelta en la cama para dormir más tranquilamente sin la luz apuntándome.

...

La mañana llegó y con ello mis entrenamientos con Levi. Me puse lo más cómodo que encontré (todavía no entiendo como en este mundo pueden vivir sin mallas) y estuve puntual a las seis en el patio. Levi ya me estaba esperando allí de pie como si nada e impecable en una ropa algo más deportiva. Nunca lo había visto sin uniforme y parecía algo menos imponente.

—No has llegado tarde, eso está bien —Me felicitó. ¿Acaso me veía como una mascota o algo incapaz de hacer algo bien?

—¿Cuál es el entrenamiento de hoy, capitán? —No tenía muchas ganas de ponerme a hablar, simplemente acabar pronto con lo que me mandase.

¿Cómo acabé en Shingeki no Kyojin? | Levi Ackerman |Where stories live. Discover now