𝐋𝐨𝐮𝐝 °┇YiZhan ²

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-...Entonces ahora Zhan está sin medicación para que pueda ir a cirugía lo más pronto posible, hasta entonces nos quedamos en Chongqing - finalizó Yibo.

Los demás estaban impresionados, algo mareados por tanta información junta.

Ponerse al día costaba.

El grupo se había acomodado en la sala de estar, y fue la primera vez que los presentes pudieron observar a la nueva pareja (Zhuocheng y HaiKuan) actuar como tal ya que estaban más que juntos y se tomaban de las manos.

Zhuocheng estaba evidentemente ruborizado, y HaiKuan sonreía cada vez que lo veía así, aunque en cuanto comenzaron a hablar de la salud de Zhan se habían puesto serios y habían dejado los mimos.

-Hasta ahora parece que nada cambió - murmuró el peliazul, continuando con su relato -. Nada de fiebre, ni dolor de cabeza. Ya van dos días.

Zhan hundió su vista en el té que estaba tomando, no podía evitar sentirse incómodo cuando toda la conversación giraba en torno a él.

En su opinión, prefería que las cosas siguieran asi, sin fiebre, ni dolor, pero se ahorró su comentario.

Tomó un sorbo intentando parecer tranquilo, como si ignorar todo aquello dependiera de su té.

-Cambiando de tema - dijo Zhuocheng, un poco más alto de lo normal, haciendo que los demás se sobresaltaran - Zhan, quiero ver tu baile.

Zhan rió con cierta vergüenza.

-Y-Yo creo que lo ol-vidé.

-Quiero ver lo que recuerdes del baile - exigió el pelinegro -. ¿Tienes la pista?

Zhan asintió, sacando el celular de su bolsillo, buscó la canción unos segundos hasta encontrarla, apretando play en seguida.

Una melodia suave, lenta, tocada delicadamente entre un piano y una suave voz, dejaba una combinación de sentimientos, entre inocencia, tranquilidad y algo de tristeza.

-Quiero verte bailar eso - murmuró Zhuocheng, aún a mitad de la canción.

Zhan enrrojeció.

Soltó un ligero suspiro, sabía que su mayor no se cansaría de molestarlo hasta que lo hiciera, así que asintió, pasando la música.

-Momento, momento - frenó HaiKuan -, corramos un poco los muebles, así tienes espacio, y que alguien lo grabe.

Zhan se sintió aún más avergonzado, cubrió su sonrisa vergonzosa con sus manos.