Capítulo 20

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Maratón 2/3

Dos días quedaban para la gran boda del siglo, según los medios de comunicación.

La casa Fernsby es un total caos, los niños están insoportables peleando a todas horas entre ellos y sobre todo con su padre, ya que no aceptan que le boda se lleve a cabo, algo que yo tampoco acepto pero que en mi caso yo no tengo ni voz ni voto por que no soy nadie.

— ¡Aida dile algo!

— ¿Qué quieres que le diga Christopher? explícame, por que no puedo ir y decirle a tu padre simplemente que me he enamorado de él, que mande a su prometida a la mierda y se venga conmigo.

— Si puedes decírselo, nosotros te apoyamos.

— Chris las cosas no funcionan así y lo sabes.

Me miró con reproche, se le notaba enfadado por lo que se levantó dejando caer la sillas hacia atrás lo que me hizo cerrar los ojos.

— Pensé que nos querías y que siempre estarías para nosotros.

— Chris...

— Déjame en paz, eres igual que mamá, nos vas a abandonar.

Dicho eso agarró a su hermano el cual lloraba y subió corriendo las escaleras para después pegar un portazo, sin poder retenerlo mucho dejé las lagrimas fluir, yo no quería dejarlos pero una vez que su padre se casara a mi ya no me necesitarían y era algo que Vanesa había dejado muy claro.

— Oh pero mira que penita das, ¿de verdad creíste que tu cuento de hadas se haría realidad?

Me quité las lagrimas y me levanté bruscamente al escuchar la voz de esa irritante mujer, la muy cabrona me miraba con una sonrisa de superioridad.

— Aléjate de mi Vanesa y bien te advierto una cosa, como a esos niños les pase algo en algún momento me encargare de hundirte aunque me tenga que arrastrar contigo.

— Escúchame niñata jamás podrás hacer nada, en cuanto  yo este casada con Colton todo su dinero me pertenecerá a mi también y esos niños se irán lejos de aquí a un internado, tendré hijos con Colton y serán los únicos herederos de su fortuna.

— ¡Eres una maldita aprovechada! ¡Estas loca si crees que permitiré eso!

— ¡¿Y como me lo vas a impedir zorra?!

Ese fue el detonante para que terminara dándola  una bofetada la cual ella me devolvió, al final terminamos enzarzadas en golpes, arañazos, gritos y tirones de pelo.

— ¡¿Que esta pasando aquí?!

Alguien me cogió de la cintura y me removí en los brazos de la persona que me separó de Vanesa, observe en su dirección y ella estaba siendo sujetada por Colton mientras a mi me sujetaba uno de sus hermanos.

— ¡¿Se os ha ido la cabeza o que?!

— ¡Ha sido ella Colton me ha atacado, es una lunática!— Gritó Vanesa apuntándome con el dedo.

— Vanesa quiero que te marche a casa ahora— La soltó y esta salió por la puerta refunfuñando— Aida a mi despacho, ahora.

Josh me soltó y me giré para pedirle disculpas a lo que el simplemente me sonrió.

— Si mi hermano pasa de ti llámame

Soltó cuando nos paramos en la puerta del despacho, le di un beso en la mejilla y llamé a la puerta, al segundo entre y me senté delante del escritorio de Colton el cual me miraba fijamente de manera penetrante.

Una niñera a la españolaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora