Verdades despiadadas vs Mentiras piadosas

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Baekhyun abrió los ojos completamente descolocado, miró a su alrededor buscando en vano indicios del anterior escenario en el que había estado sumergido, no comprendía absolutamente nada, estaba a punto perder la cordura, se puso de pie observando a Kyungsoo que aún más asustado que él imitó su acción sin saber si darle espacio o acercarse, el castaño pasó de él, necesitaba aire fresco, necesitaba estar sólo y de ser posible volver a dormir para regresar a su sueño, ¿Porque eso era, cierto? Un sueño... Salió de la habitación y posteriormente de la casa dejando atrás al bullicio tragándose las voces de sus amigos, el rostro del ángel de la muerte parpadeaba en su cabeza como una lámpara disfuncional, cegándolo con su jodida luz intermitente, y Hyungsik, la decepción latente en sus pupilas era dolorosa, Baek caminó sin rumbo fijo buscando un lugar solitario donde dar rienda suelta a sus pensamientos, tenía tantas teorías, había decidido que por una vez dejaría los ataques de ansiedad de lado y sería razonable, después de todo tantas imágenes no podían ser coincidencia, como tampoco el hecho de que en todas el gigante idiota estuviera presente, sin darse cuenta llegó a un pequeño parque solitario quizá debido al horario, mismo que rodeado de árboles impedía que los pocos transeúntes que por la calle pasaban lo divisaran.

Baek se dejó caer en uno de los bancos subiendo los pies al tiempo que con sus brazos se abrazaba las rodillas, estaba mentalmente exhausto, y aunque se lo propuso no pudo lograr que sus pensamientos recuperaran el hilo de antes, estaba perdido, cerró sus ojos intentando rememorar su sueño, una moto, la misma que en otras ocasiones había visto, el mismo hombre alto vestido de cuero, el ángel, era él por Dios ahora lo había visto y no comprendía cómo entonces no lograba recordarlo, ese hombre, ese ser parecía haber sido importante en su vida, tanto así que sin darse cuenta se había presentado en todas sus visiones, Baekhyun sabía que estando con él su cabeza volaba a lo que parecía ser el pasado, sabía que su cuerpo, su corazón y hasta su alma lo reconocían aunque su mente se empeñara en mantenerlo en las sombras, lo sabía porque cuando lo tenía cerca no podía controlar sus emociones y el calor de su cuerpo lo impulsaba allí a donde estaba el otro, tan alto e inalcanzable.

¡Dios! El veterinario se incorporó y despeinando su cabello miró en todas direcciones intentando encontrarlo, siempre estaba cerca pero esta vez el idiota se escondía, huía como un cobarde, quizá era mejor así, que no volviera, que lo dejara en paz, Baek colocó una mano en su pecho respirando agitadamente cuando la fuerza de sus pensamientos lo golpeó, y de repente sintió miedo de no verlo otra vez -¿Dónde estás? Susurró al borde de la ansiedad sintiéndose sólo de repente.
La angustia se apoderó de todo su ser y de pronto el único pensamiento que ocupaba su cabeza era encontrarlo, volverlo a ver, necesitaba saberlo cerca porque de alguna manera su cabeza y corazón no funcionaban bien si no lo sentía, Baek sospechaba que sólo en su presencia era realmente él, el verdadero Baekhyun, ese que había perdido. Llegó a su apartamento y una vez descalzo comenzó a recorrer el lugar casi al borde de la desesperación, esperando encontrarlo en cada esquina, desprendiéndose en el proceso de su chaqueta y aflojando los primeros botones de su camisa, sentía que se asfixiaba y la única manera de recobrarlo era encontrando a quién tanto añoraba.

Abrió su habitación y entró en la estancia con el corazón en la garganta, sus ojos mirando en todas direcciones al tiempo en que sus pies giraban sin rumbo alguno, el nudo en su pecho se extendió y sacudiendo la cabeza para evitar desconcentrarse salió con el mismo ímpetu con el que había hecho su entrada, caminó hacia la cocina respirando trabajosamente como si estuviera haciendo algún tipo de ejercicio de resistencia, necesitaba mantener la compostura, centrarse en la energía que rodeaba su centro cuando el ángel estaba cerca pero... ¡rayos! No sentía nada, se dijo negando mientras sus manos temblorosas recolocaban su cabello castaño, ¿Para qué quería encontrarlo exactamente? ¿Se lo comería a preguntas? ¿Hablaría siquiera? No sabía, no sabía nada ya, su mundo estaba patas arriba y el único pensamiento lógico era, "Búscalo, encuéntralo, él tiene todo lo que necesitas", ¿Para qué quería saber quién había sido en el pasado si ahora, justo en este momento conocía todo lo que le hacía falta? ¿Acaso era necesario aclarar algo más? No, solamente el cómo podría quedarse a esa persona, a ese ente sobrenatural para sí. Pero no estaba, ahora que por fin había entendido sus sentimientos no podía verlo y Baek temía no poder hacerlo nunca más.

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